1. La Oratoria
La oratoria es el arte de hablar con elocuencia, es decir, en términos
simples es la capacidad que alguien dispone de hablar y exponer un punto de
vista ante el público de modo claro, atractivo y comprensible. Las habilidades
oratorias de una persona son extremadamente importantes a la hora de
convencer, persuadir o atraer al público, y es por esto que son especialmente
trabajadas por políticos, publicistas, líderes empresariales, figuras públicas
docentes y personas del entretenimiento, entre otros.
Alexander Albán Aléncar (2005), la define como: “conjunto de principios y
técnicas que permiten expresarse, principalmente de manera oral, con claridad,
facilidad y sin temores, ante un público numeroso y variado, con la intención de
transmitir un determinado mensaje.”
Importancia
Es de gran ayuda a para saber hablar bien en público o en privado es el
factor más importante de la personalidad, crea prestigio y respeto, haciéndose
atractivo con las personas que nos rodean. No ayuda a tener toda seguridad al
hablar, una persona que tenga buena dicción, que sepa conversar, que tenga trato
agradable, correcto, tendrá mejores oportunidades en la vida, que otros que
carezcan de ellos.
Infinidad de personas triunfan con este recurso obtenido para sus fines,
eficientes servicios, magníficos sueldos. Cualquier persona, que ya sea
estudiante, obrero, empleado, funcionario, entre otros. Necesita este recurso para
desenvolver sus actividades eficientemente..
Otro aspecto importante de la oratoria es que también hay que saber hablar
para ser escuchado. Lo notable es que el hecho de tener que hablar ante
extraños, o en una simple reunión de trabajo, no parece ser una tarea sencilla, a la
que la mayoría de las personas considere como fácil.
Antecedentes e Historia de la Oratoria
La oratoria nació en Sicilia y se desarrolló fundamentalmente en Grecia,
donde fue considerada un instrumento para alcanzar prestigio y poder político.
Había unos profesionales llamados logógrafos que se encargaban de redactar
discursos para los tribunales.
El más famoso de estos logógrafos fue Lisias. Sin embargo, Sócrates creó
una famosa escuela de oratoria en Atenas que tenía un concepto más amplio y
patriótico de la misión del orador, que debía ser un hombre instruido y movido por
2. altos ideales éticos a fin de garantizar el progreso del estado. En este tipo de
oratoria llegó a considerarse el mejor en su arte a Demóstenes.
De Grecia la oratoria pasó a la República Romana, donde Marco Tulio
Cicerón lo perfeccionó. Sus discursos y tratados de oratoria nos han llegado casi
completos. Durante el imperio, sin embargo, la oratoria entró en crisis habida
cuenta de su poca utilidad política en un entorno dominado por el emperador,
aunque todavía se encontraron grandes expertos en ese arte como Marco Fabio
Quintiliano; los doce libros de su Institutio oratoria se consideran la cumbre en
cuanto a la teoría del género. Sin embargo, como ha demostrado Ernst Robert
Curtius en su Literatura europea y Edad Media latina, la Oratoria influyó
poderosamente en el campo de la poesía y la literatura en general pasándole
parte de sus recursos expresivos y retorizándola en exceso.
Vinculación de la Oratoria con el discurso, la retórica, la lógica y la
hermenéutica
El discurso: Se refiere a la exposición oral a partir de un texto escrito. De
esta manera la importancia de la oratoria en el discurso recae en el hecho de que
para ser escuchado hay que saber hablar. A tales efectos, Miramón (2013) refiere
que “el discurso es una dialéctica de acontecimiento y sentido, de proposiciones y
de referente”. La importancia del discurso radica en la manera en que se transmite
a un público, por tanto siempre va conjuntamente de la mano con la oratoria, pues
esta no puede acontecer si no se desarrolla un discurso, sin embargo, el discurso
es un dialogo que se realiza para exponerlo a un público, es todo el contenido
dentro del mismo, es con lo cual se expresa el pensar, en cambio, la oratoria es el
arte de poder expresarse físicamente al momento de exponer un discurso.
La retórica: Es el arte de dar al lenguaje escrito o hablado la eficacia
necesaria para deleitar, persuadir o conmover. En un sentido general, Moreno
(2012) refiere que la retórica “involucra cualquier proceso comunicativo ordenado
que tenga como fin la persuasión”, por cuanto defiende una opinión personal a
través del discurso público, con ánimos de generar una influencia en la manera de
pensar y actuar de los demás, provocando una reflexión inducida en quien
escucha para que llegue, en definitiva, a las conclusiones que previamente se han
previsto. Por otra parte, la oratoria es el arte de hablar con elocuencia, lo que
conlleva a designar a la retórica como la teoría y la oratoria como la aplicación de
la teoría retórica en un discurso concreto. Así, la vinculación de estos dos términos
radica en que la retórica surge de la praxis oratoria y la oratoria se enriquece con
las aportaciones de la retórica.
3. La Lógica: Según Hormazábal (2005), la lógica es la “ciencia que expone
las leyes, modos y formas del conocimiento científico”, por tanto conlleva la
práctica del raciocinio exacto y la exposición de razonamientos correctos y
formalmente válidos en un proceso intelectual ordenado a través de la oratoria.
Según esta concepción, la relación entre la oratoria y la lógica se refleja en
examinar la validez de los argumentos en términos de su estructura,
independientemente del contenido específico del discurso, de la lengua utilizada
en su expresión, y de los estados reales a los que dicho contenido se pueda
referir.
La Hermenéutica: Permite realizar sobre un texto o un discurso, una
multiplicidad de lecturas porque la realidad no se presenta al hombre de modo
inmediato y porque conocer la realidad supone aclarar, proclamar, interpretar,
esclarecer o traducir. En este sentido, Miramón (2013) señala que la hermenéutica
“apela a la intencionalidad del sujeto hablante y al sentido de la oración teniendo
como base el retorno del sentido al sujeto”, lo que quiere decir que cuando un
sujeto se sitúa frente a un texto, no solo rehace la subjetividad plasmada por el
autor, sino que también se compenetra y se proyecta en el análisis interpretativo
para colocarse como sujeto intérprete. De esta manera, la hermenéutica es un
recurso explicativo a través del cual se establece que el todo siempre es más que
la suma de sus partes, pues los elementos sólo resultan comprensibles dentro de
todo el contexto, pero también el contexto se explica en función de sus partes y de
las relaciones existentes entre las mismas.
Beneficios
Entre los beneficios de la Oratoria se puede hacer referencia a la Habilidad
de la persuasión, destreza en la expresión, pensamiento crítico, liderazgo y
personalidad, capacidad investigativa, dominio y control del miedo escénico,
aumenta la seguridad y autoestima, poder y prestigio, alcanzar el reconocimiento y
éxito en el ámbito personal, profesional, académico, satisfacción personal, no hay
nada mejor cuando uno hace lo que más le apasiona, cuando tú hablas, das a
conocer tu punto de vista y captas la atención de quienes te rodean con la mayor
eficacia. De igual manera interviene la seguridad emocional y personal, esta
misma que cuando a raíz de mucha practica y dedicación la obtienes, te dan las
fuerzas suficientes para obtener tus más ansiados sueños o metas, fluidez de
palabras. Cuando se practica la oratoria cada día, tus palabras se hacen más
sólidas, fuertes, entendibles y encantadoras por quienes las oyen.
Los seres humanos somos por naturaleza sociables, desde tiempos
remotos, hemos necesitado de técnicas y diferentes maneras para comunicarnos.
La oratoria ha sido utilizada por importantes civilizaciones, muy especialmente por
4. los Griegos y los Romanos, demostrando ser un medio efectivo para interactuar y
transmitir conocimientos y maneras de pensar, sin obviar el hecho de que solo el
hombre, es el único ser sobre la tierra que posee el don de la palabra,
permitiéndosele manifestarse a través de esta, y establecer relaciones con sus
congéneres.
Característica
Las características de la oratoria como manifestación artística son aquellas
cosas que la diferencian de otras manifestaciones del arte. Por ejemplo, la música
se lleva a cabo con la voz o con un instrumento musical, y se escribe con símbolos
especialmente diseñados para que los diferentes componentes de una orquesta
se comuniquen entre sí y reproduzcan la composición musical del autor. La
oratoria se lleva a cabo con la palabra, de modo que entendamos con claridad,
impacto, persuasión y entretenimiento el mensaje que el orador quiere transmitir a
su auditorio.
Está por demás decir que la oratoria crea confianza en uno mismo la
convicción de que podemos hablar exitosamente en público, es una de las
variables que más peso tiene en nuestro fortalecimiento de nuestra confianza
personal. Este poder para expresarse, es un pase de entrada al terreno de la
autorrealización. Cualquiera que descubra y use su capacidad para influir en otros,
tendrá la posibilidad de extender positivamente su poder y disfrutar de ello.
Objetivos
El objetivo de la oratoria es hacer de la persona un buen orador, entonces
se diría que el hombre necesita ser natural y amable, también ser breve, aunque
con esto se debe tener mucho cuidado puesto que ser breve no significa hablar
poco tiempo, ni hablar rápido para acabar pronto, ser breve significa no introducir
en nuestro discurso frases innecesarias.
No podemos poner a jugar en nuestra contra el cansancio del oyente, si
nuestra disertación lo está aburriendo cuanto antes terminemos mejor ya que si lo
mantenemos en vilo no hay que permitir que la fatiga lo despegue del hilo
conductor de nuestra exposición. Y jamás engañar con la promesa "ya voy a
terminar" y continuar por otros largos y tediosos minutos, si lo decimos tenemos
que cumplirla y terminar de inmediato. Este es el consejo fundamental para todo
buen orador; que sea breve, Es decir puntual y conciso.