3. Esqueleto del cuello
• Las vertebras cervicales
• Hueso Hioides
• Manubrio del esternón
• La clavícula
http://es.slideshare.net/Arlette_Matod/anatomia-del-cuello-definitiva
10. Piso
Músculos suprahioideos
Músculos infrahioideos.
Triángulo anterior
Limites:
Borde inferior de la mandíbula
Línea media
Borde anterior del músculo
esternocleidomastoideo.
11. Triángulo anterior
Triángulo Carotideo
Borde inferior de la mandíbula
M. Omohioideo
Borde anterior del Esternocleidomastoideo
(contenido)
Bifurcación carotídea
Vena yugular interna.
Nervio Neumogástrico
Nervio Hipogloso
Triángulo Muscular
M. omohioideo
Borde anterior del músculo
esternocleidomastoideo
Línea media
Contenido
Gland. Tiroides
Gland Paratiroides
Esternohioideo
Tirohioideo
Tráquea
12. Triángulo Submentoniano
Limites:
Por debajo: Cuerpo del hueso hioideo.
A los Lados: Los vientres anteriores
derecho e izquierdo del m. digástrico
Contiene:
Glanglios linfáticos submentoneano.
13. Triángulo Submaxilar
Limites:
Borde inferior de la mandíbula
Los vientres anteriores y posteriores
del m. digástrico.
Contiene:
Rama Mandibular del nervio
Facial.
La Glándula submaxialr
La arteria y la vena facial
Nervio hipogloso, el nervio lingual
Musculos milohioideo y
geniohideo en el piso.
14. Triángulo de Pirogoff
Límites
Borde posterior del m.
milohioideo.
Nervio hipogloso
Tendón intermedio del
digástrico
Contenido
Arteria lingual
15. Triángulo de Beclard
Límites:
Borde posterior del m. hiogloso
Hueso hioides
Vientre posterior del digástrico
Contenido
Nervio hipogloso
Arteria Lingual
16. Triángulo de Farabeuf
Límites:
Vena Yugular interna
V. tirolinguofaringofacial
Nervio Hipogloso
Contenido
Bifurcación de la arteria carótida
primitiva (interna y externa)
17. Triángulo de Sedillot
Límites:
Fascículo esternal del
esternocleidomastoideo.
Fascículo clavicular del
esternocleidomastoideo.
Clavícula
Contenido:
Nervio Frénico
20. Trauma de cuello
Se define como trauma de
cuello toda lesión que
afecte la región
comprendida entre el borde
de la mandíbula y la base
del cráneo en su límite
superior y el borde de la
clavícula y la séptima
vértebra cervical, en su
límite inferior.
http://www.elportaldelasalud.com/trauma-de-cuello/4/
21. Zonas del cuello
Zona I: es demarcada por la entrada
torácica por abajo de las clavículas y
el cartílago cricoides por arriba.
Estructuras
Los grandes vasos (las subclavias,las
venas braquiocefálicas, las arterias
carótida común, el cayado aórtico, y
las venas yugulares)
Tráquea
Esófago
Los ápices pulmonares
La columna cervical, la médula
espinal y raíces nerviosas cervicales.
Zona II: abarca la región que va
del cartílago cricoides al ángulo de
la mandíbula.
Las estructuras
las arterias carótidas y las arterias
vertebrales
las venas yugulares
faringe
laringe y tráquea
esófago
la columna cervical
la médula espinal.
Zona III: está delimitada por el
ángulo de la mandíbula y la base
del cráneo.
Estructuras:
Las glándulas salivales y parótidas
Esófago
Tráquea
Los cuerpos vertebrales
Arterias carótidas
Venas yugulares
Los pares craneales IX y XII.
22. Tipos de lesiones en trauma de
cuello
Contusos o cerrados
Penetrantes o abiertos
Por aspiración
Iatrogénicos
24. Epidemiologia
El trauma cerrado de cuello se presenta
en un 8% de los casos informados por los
servicios de urgencias.
Los estudios reportan que sólo un 10%
de estos pacientes manifiestan síntomas
durante la primera hora posterior al
evento.
Los accidentes de tránsito constituyen su
principal causa, seguidos de los
accidentes deportivos y la estrangulación.
25. Mecanismos de producción de la
lesión
La contusión directa
La torsión y compresión
Fuerzas de aceleración y
desaceleración
Las fracturas de la base del
cráneo
26. La contusión directa de cuello
La contusión directa puede
producir desgarro vascular,
contención de hematomas
expansivos que causan
compresión de otros vasos e
incluso de la vía aérea,
hematomas en las paredes de
los vasos con trombosis venosa.
27. Torsión y compresión del cuello
Para la interrupción la cirulacion
de los vasos y vía aérea del
cuello se necesita la aplicación
de:
2 kg de peso sobre el cuello
para provocar el cierre de la
yugular.
5 kg para interrumpir su
circulación de las carotidas
30 kg las arterias vertebrales.
15 kg la tráquea
http://es.slideshare.net/franciscoleonreyes/ahorcaestrangula
28. Trauma de cuello por fuerzas de
aceleración y desaceleración
http://www.homeopatiayacupuntura.es/tag/dolor-cervical
29. Fracturas de la base del cráneo
Fractura del piso anterior
Fractura del piso medio
Fractura del piso
posterior
http://www.alfinal.com/cent/semana4.php
30. Fractura del piso anterior del
cráneo
Dx: signo de “ojos de
mapache”
Exige reposo absoluto en
cama, observación y según
los síntomas, el uso de
analgésicos.
Siempre queda implícito que
se trata de una fractura grave
por el riesgo inminente de
rasgadura de arterias vitales
cuyo sangrado seria mortal.
31. Fractura del piso medio del
cráneo
Dx: Signo de Battle
Se manifiesta por otorragia.
Siempre se observa ruptura del
tímpano ala otoscopia.
Tarda 8 semanas en sanar, el tx exige
observación y uso profiláctico de
antibióticos.
El reposo en cama (fowler) asegura el
cierre de la duramadre y su
sellamiento (cuidar que no desarrolle
fistula de LCR)
Se incluye el uso de Acetazolamida.
32. Fractura del piso posterior del
cráneo
Dx: Equimosis del velo del
paladar
Su tx es solamente medico con
reposo en cama y la
comprobación mediante TAC
Pronóstico grave
33. INDICACIONES DE CIRUGÍA EN
TRAUMA CERRADO
Lesión de la vía aérea.
Lesión del esófago.
Lesión vascular demostrada en
la arteriografía.
Lesión de laringe
35. Epidemiologia
Las lesiones vasculares comprenden
aproximadamente un 25% de los pacientes con
trauma penetrante de cuello y representan una tasa
de mortalidad que va del 10% al 50% de los
pacientes.
Las heridas por arma de fuego se asocian en la
mayoría de los casos a lesiones quirúrgicas
representadas por signos de certeza o duros.
La vena yugular es la que con mayor frecuencia se
compromete, así como la arteria carótida común es
la arteria más lesionada.
La arteria vertebral se ve comprometida tan sólo en
un 1.3% de los casos.
36. Mecanismos de producción de la
lesión
Heridas por armas
cortopunzantes
Heridas por proyectil
de arma de fuego
http://gsdl.bvs.sld.cu/cgi-bin/library?e=d-00000-00---off-0cirugia--00-0----0-10-0---0---0direct-10---4-------0-1l--11-1l-50---20-
about---00-0-1-00-0-0-11-1-00-00&a=d&cl=CL1&d=HASH8bd6e023050c6b003a0145.11.2.2
37. INDICACIONES DE CIRUGÍA EN TRAUMA
PENETRANTE: CIRUGÍA INMEDIATA
Signos evidentes de sangrado
activo.
Heridas penetrantes de la vía aérea.
Hematoma en expansión.
Shock en presencia de heridas de la
Zona I.
Heridas por proyectil de arma de
fuego en la Zona II.
39. Signos de lesión vascular
Signos inequivocos (duros) Signos sugestivos (blandos)
Hematoma pulsatil Hematoma
Soplo Historia de choque o de sangrado
masivo
Fremito Compromiso neurologico:
hemiparesia, parestesia, Sindrome
Horner
Sangrado profuso de la herida Trayecto vascular
Ausencia de pulsos temporales Disminución de pulsos temporales.
40. Signos de lesión de la vía aérea
Duros Blandos
Herida cervical soplante Disfonía
Disnea intensa Estridor
Enfisema subcutáneo
41. Signos de lesión de vía digestiva
Duros Blandos
Salida de saliva por
herida
Disfagia
Sangrado por cavidad
oral
Enfisema subcutaneo.
43. Escala Glasgow
APERTURA OCULAR RESPUESTA VERBAL FUNCION MOTORA
Espontanea Confuso Localiza dolor
A la orden Orientado Obedece orden
Estimulo doloroso Incoherente Respuesta extensión
Ausente No respuesta No responde
Ausente Incomprensible No responde
44. Signos de lesión de pares
craneales:
Nervio facial (VII par): Descenso de la
comisura labial del lado afectado
Nervio glosofaríngeo (IX par): Disfagia
(reflejo nauseoso alterado)
Nervio vago (X par, laríngeo
recurrente): Ronquera, disminución en
la fuerza de la voz
Nervio espinal accesorio (XI par):
Incapacidad para elevar el hombro
ipsilateral, y para lateralizar la barbilla
sobre el hombro contralateral
Nervio hipogloso (XII par): Desviación
de la lengua con protrusión.
51. Vías de Abordaje quirúrgico según
zona de Monson.
Zona 1:
Como concepto general el problema fundamental de estas lesiones es el
control arterial proximal. Resulta tentador el abordar una herida
supraclavicular con lesión de arteria subclavia directamente. Sin embargo,
una vez abierta la herida se puede tener sangramiento masivo
extremadamente difícil de controlar, siendo la colocación de clamps "a
ciegas" peligroso por la estrecha relación con el plexo braquial.
En lesiones de subclavia derecha y ambas carótidas comunes proximales
se puede obtener control a nivel del arco aórtico en forma expedita a
través de una esternotomía media.
En lesiones de la arteria subclavia izquierda, control proximal se obtiene a
través de una toracotomía izquierda.
52. Vías de Abordaje quirúrgico según
zona de Monson.
Zona 2:
► El abordaje clásico mediante incisión longitudinal paralela al borde anterior
del músculo esternocleidomastoídeo ofrece la mejor exposición de los
vasos del cuello.
► Se debe dividir la vena facial para rechazar la vena yugular interna hacia
lateral y así exponer la arteria carótida común y su bifurcación, es
conveniente comenzar la disección desde proximal para tener control de la
arteria carótida común en caso de sangramiento y para identificar con
mayor facilidad estructuras anatómicas importantes como el nervio
hipogloso.
53. Vías de Abordaje quirúrgico según
zona de Monson.
Zona 3:
► El paciente debe ser intubado por vía nasal, se requiere de un diagnóstico
preciso de la lesión en el preoperatorio para decidir si será necesaria la
subluxación de la mandíbula, lo que se debe realizar antes de iniciar la
cirugía.
► La incisión a utilizar es la misma de la zona 2 con extensión hacia superior,
orientandose hacia el lóbulo de la oreja para evitar lesión del ramo
mandibular del nervio facial. Durante la disección se puede dividir el
músculo digástrico y resecar el apófisis estiloides para ganar dos o tres
centímetros adicionales de exposición.
55. Abordaje y tácticas operatorias
de lesiones vasculares
Heridas de las Arterias carótidas
Zona I
Las lesiones de la AC en la zona I
se deben abordar por incisiones
combinadas: cervicotomía y
esternotomía. La reparación se
hace con base en los hallazgos
operatorios.
Zona II
Los pacientes con sangrado
activo o hematoma expansivo se
abordan por cervicotomía
longitudinal anterior; se hace
compresión, tanto en el sitio de
sangrado como en la AC
proximal, mientras se realiza
control proximal y distal de la
lesión.
Zona III
Mientras se realiza cervicotomía
longitudinal anterior, y si hay
sangrado activo, se comprime
externamente para controlar la
hemorragia; se continúa con
esta maniobra mientras se
repara la arteria proximal y distal
de ser posible.
http://clinicavascularvalladolid.com/blog/
56. Abordaje y tácticas operatorias
de lesiones vasculares
Heridas de venas yugulares
Las heridas de las venas yugulares
externas se pueden ligar.
En las lesiones de la vena yugular
interna, si el paciente está estable y
las condiciones lo permiten, se debe
hacer la reparación, bien sea la rafia
primaria, la resección y anastomosis
o el parche con otra vena.
Si el paciente está inestable o las
condiciones locales no permiten la
reconstrucción, se hará ligadura. En
ningún caso se debe hacer ligadura
bilateral.
https://jonkepa.wordpress.com/2009/04/08/%C2%BFpor
-que-las-venas-son-azules-si-la-sangre-es-roja/
57. Abordaje y tácticas operatorias
de lesiones vasculares
Heridas de las Arteria vertebrales
En general se prefiere la ligadura de los
dos cabos.
Si esto no es posible, se deben taponar
los agujeros para buscar la trombosis.
Si la lesión de arteria vertebral se
descubre por arteriografía y hay
trombosis del vaso, sólo se hará
observación.
http://www.cirujanosdechile.cl/revista_anteriores/PDF
%20Cirujanos%202002_01/Cir.1_2002%20trauma%20
arteria%20verte.pdf
59. Abordaje y tácticas quirúrgicas de
lesiones de las vías áreas superiores
en el cuello
Lesiones de laringe
Las fracturas simples
estables y no desplazadas se
suturan con monofilamento,
sin incluir la mucosa para
evitar los granulomas.
Las fracturas conminutas
con colapso laríngeo han
requerido traqueostomía
previa de urgencia.
http://bvs.sld.cu/revistas/cir/vol42_3_03/f0202303.jpg
60. Las indicaciones quirúrgicas para
trauma de laringe son:
Todas las heridas penetrantes
Ruptura de cuerdas vocales
Lesiones de mucosa con
exposición de cartílago
Separación tiroidea
Fracturas de cartilagos tiroides y
cricoides
http://www2.unifesp.br/dmorfo/histologia/ensino/laringe/fonacao.htm
61. Abordaje y tácticas quirúrgicas de
lesiones de las vías áreas
superiores en el cuello
Lesiones de tráquea
Las lesiones simples sin colapso ni
destrucción de más de dos anillos
se suturan con monofilamento,
absorbible o no.
Las lesiones complejas con
avulsiones de más de seis
centímetros se pueden manejar
con resección y anastomosis
termino-terminal, movilizando
previamente la tráquea.
http://www.elsevier.es/es-revista-cirugia-espanola-
36-articulo-rotura-traqueal-yatrogenica-por-
intubacion-13090072
62. Cricotiroidotomía
http://www.aibarra.org/Guias/2-6.htm
La cricotiroidotomía de
emergencia es la
realización urgente de una
abertura en la membrana
cricotiroidea para
establecer una vía aérea
Indicaciones:
Dificultades anatómicas
del paciente.
Sangrado excesivo en
nariz o boca.
Trauma facial masivo.
Obstrucción de la vía
aérea superior por
angioedema, trauma,
quemaduras y cuerpo
extraño.
Complicaciones:
► Estenosis subglótica
► Hemorragia (si se lesionan
vasos tiroideos).
► Perforación traqueal o
esofágica.
► Colocación
incorrecta/descanulación
accidental.
► Enfisema subcutáneo.
► Neumotórax.
► Neumomediastino.
► Infección.
► Disfonía.
65. Abordaje y tácticas quirúrgicas
de lesiones de vía digestiva alta
en el cuello
Lesiones de esófago y faringe
En pacientes con perforación de esófago de causa
traumática por arma blanca, de fuego de baja energía o
por instrumentación endoscópica, con extravasación
limitada y sin compromiso del tórax, basta en ocasiones el
tratamiento intensivo con antibióticos, supresión de los
alimentos por vía oral y comenzar la alimentación por vía
intravenosa.
En perforaciones que causan crepitación y disección del
material extravasado en los planos aponeuróticos, el
procedimiento mínimo consistirá en drenaje quirúrgico,
antibioticoterapia y las medidas citadas.
Si la perforación es reciente y si es posible técnicamente
será útil cerrar el sitio de la perforación.
El esófago se reparará de forma longitudinal o transversal
según el diámetro de la lesión, con puntos separados de
seda 00 ó 000 y los nudos hacia el interior de su luz o con
material no reabsorbible o absorbible a largo plazo como
vicryl o dexon.
http://gsdl.bvs.sld.cu/cgi-bin/library?e=d-00000-
00---off-0cirugia--00-0----0-10-0---0---0direct-
10---4-------0-1l--11-1l-50---20-about---00-0-1-
00-0-0-11-1-00-
00&a=d&cl=CL1&d=HASH8bd6e023050c6b003a
0145.11.5.2
67. Abordaje y tácticas quirúrgicas
de lesión de tejido glandular del
cuello
Tejido glandular
Para reparar heridas de glándula
tiroides basta con la hemostasis y el
desbridamiento del tejido
desvitalizado.
En cuanto a las paratiroides, podría
resecarse el tejido desvitalizado si el
compromiso es parcial.
Las lesiones de las glándulas salivales
se tratan con desbridamiento,
hemostasia y drenaje.
http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S
1025-55832013000400013
69. Abordaje y tácticas quirúrgicas
de lesiones nerviosas del cuello
Nervios
Se tratan inicialmente
con reconstrucción,
suturando el perineuro
con material absorbible.
Nervio laríngeo recurrente derecho (flecha amarilla)
Ligadura de la arteria tiroidea inferior (flecha azul)
http://elotoblog.blogspot.com/2013/09/la-hemostasia-en-la-cirugia-
del.html
70. CBA
Trauma de cuello
SIGNOS DUROS
• Sangrado activo
• Hematoma creciente
• Herida soplante
• Presecia de saliva en herida
• Soplo o thrill según la zona
• isquemia
SIGNOS BLANDOS
• Hematoma estable
• Antecedentes de sangrado
• Disfagia
• Disfonía
• Enfisema
• Parestesia
• Hemoptisis leve
Sin signos
Observación por
48 horas
ESTUDIOS (SELECTIVOS)
Nivel I:
Esofagograma
Esofagoscopia
Angiografia
Fibrobroncoscopia
Nivel II:
Ecoduplex
Nasofaringeo
Nivel III
Angiografia
nasofaringo
Cirugía
Positivo Negativo
Salida
71. CIRUGÍA DESPUÉS DE ESTUDIOS
COMPLEMENTARIOS
Radiografía del cuello positiva (enfisema, hematoma).
Endoscopia y esofagograma positivos.
Enfisema subcutáneo con esofagograma y endoscopia normales.
Heridas por proyectil de arma de fuego en la Zona II.
Heridas penetrantes de la Zona II con cualquier signo de lesión
vascular, digestiva o de la vía aérea.
Arteriografía con evidencia de lesión vascular. Indicaciones de
cirugía en trauma cerrado Lesión de la vía aérea.
Lesión del esófago. Lesión vascular demostrada en la arteriografía.
72.
73. Pacientes embarazadas
Consideraciones:
La vía área se torna compleja para su manejo
debido a la friabilidad y congestión de las
mucosas
El esfínter esofágico inferior se presenta
relajado y hay retardo en el vaciamiento
gástrico, favoreciendo la broncoaspiración.
Las pacientes con más de 20 semanas de
gestación deben de ser transportadas con
lateralización del útero hacia la izquierda.
Evaluación obstétrica.
http://www.elsevier.es/es-revista-cirugia-espanola-
36-articulo-rotura-traqueal-yatrogenica-por-
intubacion-13090072
74. Población pediátrica
Consideraciones:
Tienen un diámetro cefálico mayor.
El cuello es más corto.
Las mucosas son más friables y
fáciles de lacerar
La cavidad oral es de reducido
tamaño, dificultando su
manipulación.
Las vías áreas tienen una disposición
más cefálica y anterior y su punto
más estrecho es el cartílago
cricoides a nivel de C4.
http://www.fucirec.org/sitio/index.php/reconstruye/noticias/43-labio-
leporino-se-detecta-y-corrige-antes-de-nacer
75. Adultos mayores
Consideraciones:
Presentan cambios vasculares como:
aumento de la resistencia vascular
periférica.
Menor respuesta cardiaca a las
demandas corporales.
Los cambios osteoarticulares como
las artrosis, dificultan los hallazgos
radiológicos.
Las fuerzas de aceleración y
desaceleración los hace más
propensos a sufrir de lesiones debido
a la debilidad y calcificación de los
ligamentos.
http://pizarradetestable.blogspot.com/2009_05_01_archive.html
El plexo cervical tiene dos tipos de ramos, los superficiales que serán sensitivos, y los profundos que serán motores largos, que están organizados de la siguiente forma:
Superficiales
Occipital menor: Se origina en C2, e inerva la piel de la parte posterior del cuero cabelludo.
Auricular mayor: Se origina de C2 y C3, inerva la piel que va del ángulo de la mandíbula a la apófisis mastoides, la glándula parótida y la piel que la cubre, y la cara posterior del pabellón auricular.
Cervical transverso: Se origina de C2 y C3, inerva la piel del triángulo anterior del cuello.
Supraclavicular: Se origina de C3 y C4, inervan la piel del hombro.
Profundos
Asa cervical: Se origina por ramos de C1, C2 y C3, inerva los músculos infrahioideos del triángulo anterior del cuello.
Frénico: Se origina principalmente de C4 pero tiene ramos de C3 y C5, da la totalidad de la inervación motora del diafragma y la sensibilidad de su porción central.
Zona I: La sintomatología de las lesiones en esta zona no es muy clara y su inspección se dificulta sobre todo cuando las estructuras afectadas se encuentran dentro del tórax. Su angulación y delimitación por parte de las clavículas dificultan la exploración con ecografía. Representan la mayor tasa de mortalidad , por lesión de grandes vasos y estructuras torácicas que compromete.
Zona II: Su sintomatología es la más evidente de las tres zonas, así como más simple su exploración y examen. La mayoría de las lesiones carotídeas se presentan en las lesiones de la zona II.
Zona III: Su abordaje quirúrgico e inspección son quizá los de mayor dificultad con respecto a las dos anteriores.
ASPIRACION: casi siempre por ingestión de cuerpos extraños.
IATROGÉNICO: después de procedimientos como endoscopias, colocación de catéteres y sondas e intubación.
El trauma cerrado de cuello se presenta en un 8% de los casos informados por los servicios de urgencias. Los estudios reportan que sólo un 10% de estos pacientes manifiestan síntomas durante la primera hora posterior al evento. Los accidentes de tránsito constituyen su principal causa, seguidos de los accidentes deportivos y la estrangulación o lesiones secundarias y terciarias de explosiones.
Son múltiples los mecanismos por los cuales ocurren las lesiones. La contusión directa puede producir desgarro vascular, contención de hematomas expansivos que causan compresión de otros vasos e incluso de la vía aérea, hematomas en las paredes de los vasos con trombosis venosa. La torción y compresión excesivas pueden causar la ruptura total de los vasos y ocasionar, en la mayoría de los casos, la muerte. Las fracturas de la base del cráneo afectan en un número importante de veces la porción intrapetrosa de la carótida interna.
Fuerzas de aceleración y desaceleración súbitas pueden generar daño medular por latigazo, o aumento de la presión intratorácica en pacientes que reciben trauma torácico o cervical directo, cuando la glotis permanece cerrada, lo que genera desgarro esofágico o trauma laríngeo.
La torción y compresión excesivas pueden causar la ruptura total de los vasos y ocasionar, en la mayoría de los casos, la muerte.
La compresión del cuello puede generar isquemia encefálica producto de alteraciones circulatorias cerebrales, bastando la aplicación de una presión de sólo 2 kg de peso sobre el cuello para provocar el cierre de la yugular; las carótidas necesitan una presión de 5 kg para interrumpir su circulación, la tráquea 15 kg y las arterias vertebrales 30 kg. Este mecanismo explica perfectamente la muerte por ahorcadura en los casos de suspensión incompleta y en los sujetos traqueostomizados
Fuerzas de aceleración y desaceleración súbitas pueden generar daño medular por latigazo, o aumento de la presión intratorácica en pacientes que reciben trauma torácico o cervical directo, cuando la glotis permanece cerrada, lo que genera desgarro esofágico o trauma laríngeo.
Las fracturas de la base del cráneo afectan en un número importante de veces la porción intrapetrosa de la carótida interna.
Las heridas penetrantes del cuello constituyen la mayoría de las lesiones de esta zona y producen a su vez los mayores índices de mortalidad y complicaciones. Se define como herida penetrante aquella que sobrepasa los límites del platisma. El grado de lesión depende de varios factores, entre ellos, si fue producida por arma cortopunzante o por proyectil de arma de fuego. Las heridas penetrantes de arma blanca comprometen los tejidos y estructuras que se encuentran en el trayecto de la herida, sin afectar las estructuras vecinas. Aunque inicialmente la mayoría de las víctimas no presentan síntomas, con el paso de las horas pueden surgir manifestaciones de las lesiones causadas. Contrario a esto, las heridas por proyectiles de arma de fuego no muestran un patrón continuo y lineal debido a los diferentes movimientos propios de la bala, y las estructuras vecinas se ven gravemente afectadas por el efecto cavitacional; esto dificulta estimar con precisión los daños causados y el tipo de reparación que necesitan, lo cual depende directamente de la distancia a la que fue disparada la bala, la trayectoria del proyectil y el tipo de arma que fue utilizada. Las heridas causadas por proyectiles de alta velocidad (>2.000 — 2.500 pies/seg.), característicos de las armas de uso militar y de caza, generan ondas de choque y poseen un patrón propio de desvitalización de los tejidos que rodean el orificio de entrada; son las causantes de las lesiones más graves y con mayor morbimortalidad. A su vez pueden generar lesiones secundarias por fragmentos del proyectil o del hueso afectado. Evidentemente las heridas transficciantes por proyectil de arrna de fuego causan mayores daños que aquellas que son unilaterales.
Las lesiones vasculares que se presentan en el trauma penetrante de cuello se originan por acción mecánica directa sobre el vaso afectado y causan su sección completa o parcial, seudoaneurismas, fístulas arteriovenosas, disección vascular y daño endotelial; y es la trombosis una de las principales complicaciones en estos pacientes, pues ocurre en un 25% a 40% de los casos. En nuestro medio, las lesiones vasculares por proyectil de arma de fuego representan
aproximadamente un 75% de los casos y aquellas causadas por arrna cortopunzante, un 21%.
Las lesiones vasculares más frecuentes son las de la vena yugular interna (en un 9%) y las de la arteria carótida (en un 7%). Las lesiones faríngeas o esofágicas se presentan en un 4% a 12% de los casos, y las lesiones nerviosas complejas ocurren en un 3% a 8% de ellos. Las lesiones de médula espinal son menos frecuentes y cuando se presentan lo hacen como consecuencia del trauma directo más que por acción de esquirlas óseas o del proyectil.
En las lesiones vasculares del cuello no deben realizarse maniobras como pinzamientos o ligaduras vasculares para contener el sangrado; sólo se recomienda la utilización de vendaje compresivo o compresión digital.
Es importante evaluar y consignar los signos vitales al ingreso, la localización de la herida, el objeto causante y su trayectoria. No se debe introducir ningún tipo de instrumento, incluyendo el dedo del evaluador, para definir trayectorias, puesto que estas maniobras facilitan la liberación de coágulos que estén conteniendo
heridas vasculares que, en un sitio donde no se disponga de recurso quirúrgico inmediato, pueden poner en peligro la vida del paciente.
Las heridas se deben localizar de acuerdo con las zonas de trauma de cuello. Se debe tratar de establecer si la herida cruza la línea media, para lo cual se utiliza el término de herida penetrante transcervical.
Las incisiones utilizables son:
CERVICOTOMIA LATERAL LONGITUDINAL: Se hace a lo largo del borde anterior del músculo esternocleidomastoideo; se puede extender desde la mastoides hasta el esternón y si es necesario puede fracturarse o luxarse la mandíbula para lograr exposición de la Zona III. Es la incisión más aconsejada en urgencias, sobre todo vasculares o con compromiso del esófago.
INCISION SUPRACLAVICULAR. Util en el abordaje de los vasos subclavios o del plexo braquial.
CERVICOTOMIA TRANSVERSA. Más aconsejable cuando la urgencia es relativa y el compromiso es de la tráquea.
COMBINADAS: La longitudinal puede continuarse con esternotomía si se necesita control de los grandes vasos o prolongarse hacia la región supraclavicular cuando se combinan heridas de esófago y de carótidas con heridas del plejo braquial o de los vasos subclavios. A veces la esternotomía debe asociarse con toracotomía lateral (en libro abierto) para el abordaje de los vasos subclavios. En otros casos, la exploración del cuello debe ser bilateral por incisiones longitudinales.
Zona I
Las lesiones de la AC en la zona I se deben abordar por incisiones combinadas: cervicotomía y esternotomía. La reparación se hace con base en los hallazgos operatorios.
Zona II
Los pacientes con sangrado activo o hematoma expansivo se abordan por cervicotomía longitudinal anterior; se hace compresión, tanto en el sitio de sangrado como en la AC proximal, mientras se realiza control proximal y distal de la lesión. En caso de no haber trauma craneoencéfalico o a otro nivel, se recomienda, anticoagulación sistémica (heparina 100 U/kg) o local (50 U/mL) para evitar la formación de trombos distales. De ser necesario, se hace trombectomía con catéteres de Fogarty. Si a pesar de ello no hay flujo retrógrado se recomienda ligar el vaso proximal y distalmente.
Zona III
Mientras se realiza cervicotomía longitudinal anterior, y si hay sangrado activo, se comprime externamente para controlar la hemorragia; se continúa con esta maniobra mientras se repara la arteria proximal y distal de ser posible. Una vez detenido el sangrado, sea manualmente o con catéter, se debe definir rápidamente el manejo a seguir con la lesión de la ACI: continuar la oclusión con balón por 48 horas, exploración cervical alta con reparación o ligadura, o embolización angiográfica con o sin prótesis endovascular
LARINGE :
Las fracturas simples estables y no desplazadas se suturan con monofilamento, sin incluir la mucosa para evitar los granulomas.
Las fracturas conminutas con colapso laríngeo han requerido traqueostomía previa de urgencia. En tal circunstancia se debe hacer laringotomía para corregir las fracturas y luxaciones.
Los defectos de la mucosa se corrigen con rotación de colgajos; las suturas deben hacerse con material reabsorbible. Los cartílagos se suturan con material no absorbible.
No se recomiendan los desbridamientos extensos, sino sólo los estrictamente necesarios. En todos ellos debe dejarse soporte interno durante dos o tres semanas y es conveniente el uso racional de antibióticos. De ser posible debe solicitarse el concurso del otorrinolaringólogo.
Las lesiones simples sin colapso ni destrucción de más de dos anillos se suturan con monofilamento, absorbible o no.
Si es absorbible, debe ser del tipo que se absorbe después de cuatro o seis semanas.
Las lesiones complejas con avulsiones de más de seis centímetros se pueden manejar con resección y anastomosis termino-terminal, movilizando previamente la tráquea. Una alternativa para avulsiones con más de un treinta por ciento de la circunferencia de los anillos es el colgajo mioperióstico del esternocleidomastoideo
La cricotiroidotomía de emergencia es la realización urgente de una abertura en la membrana cricotiroidea para establecer una vía aérea. Suele ser la última opción viable y pronta para el manejo de la vía aérea difícil en el escenario de “no se puede intubar, no se puede ventilar”.
En pacientes con perforación de esófago de causa traumática por arma blanca, de fuego de baja energía o por instrumentación endoscópica, con extravasación limitada y sin compromiso del tórax, basta en ocasiones el tratamiento intensivo con antibióticos, supresión de los alimentos por vía oral ycomenzar la alimentación por vía intravenosa.
En perforaciones que causan crepitación y disección del material extravasado en los planos aponeuróticos, el procedimiento mínimo consistirá en drenaje quirúrgico, antibioticoterapia y las medidas citadas. En estos casos, si la perforación es reciente y si es posible técnicamente será útil cerrar el sitio de la perforación. Otra opción será introducir una sonda cervical para esofagotomía por la perforación y extraerla a través de la herida quirúrgica, tratando con ello de lograr el drenaje creando una fístula controlada.
El esófago se reparará de forma longitudinal o transversal según el diámetro de la lesión, con puntos separados de seda 00 ó 000 y los nudos hacia el interior de su luz o con material no reabsorbible o absorbible a largo plazo como vicryl o dexon. El esófago, a causa de su falta de serosa, es más frágil que cualquier otro segmento del tubo digestivo, por lo que debe ser manejado con delicadeza durante el acto quirúrgico.
La contaminación bacteriana de los planos fasciales es causa de dehiscencia de las suturas con el desarrollo de abscesos o fístulas, por lo que siempre deberá dejarse drenaje cercano a la línea de sutura, así como dejar semiabiertos los planos superficiales sin anudar los puntos de seda para permitir inspección diaria de la sutura esofágica
Para reparar heridas de glándula tiroides basta con la hemostasis y el desbridamiento del tejido desvitalizado.
En cuanto a las paratiroides, podría resecarse el tejido desvitalizado si el compromiso es parcial. Cuando se sospeche avulsión total, debe reimplantarse por lo menos una de ellas en el músculo esternocleidomastoideo o en el antebrazo.
Las lesiones de las glándulas salivales se tratan con desbridamiento, hemostasia y drenaje. Si la lesión es severa, puede resecarse la glándula con ligadura del conducto de Wharton. Si se va a conservar la glándula y hay lesión del conducto, éste debe reconstruirse sobre un tutor, que se saca a través del orificio en la mucosa bucal.
NERVIOS
Se tratan inicialmente con reconstrucción, suturando el perineuro con material absorbible. En general el pronóstico es malo, a excepción del hipogloso y de la rama mandibular del facial. Los resultados con reparación del laríngeo recurrente no han sido buenos.