2. 1. INTRODUCCIÓN
El Gótico es el estilo que imperó en Europa occidental
desde mediados del siglo XII hasta el primer tercio
del siglo XVI. En Italia en el siglo XV fue
progresivamente sustituido por el arte renacentista.
3. 1. INTRODUCCIÓN
Nace en la región de París, se extiende rápidamente por
Inglaterra y España, más tardíamente por Alemania y,
como hemos dicho, apenas por Italia donde nacía y se
desarrollaría el Renacimiento.
5. 1. INTRODUCCIÓN
El término gótico nació en Italia en el siglo XVI, con
connotaciones peyorativas. Fue acuñado por Vasari para
calificar como bárbaro, propio de los godos, al arte de la
Edad Media, en oposición al ideal renacentista. El siglo
XIX, en el contexto del Romanticismo, se entusiasmó con
el mundo medieval y revalorizó el arte gótico.
6. 1. INTRODUCCIÓN
El contexto histórico del arte gótico fueron los siglos finales de
la Edad Media, una época de profundas transformaciones
económicas, políticas y sociales. En estos siglos se
desarrollaron las ciudades, que adquirieron cada vez más peso
en lo artístico, en lo político y en lo económico. En las ciudades
surgió una nueva clase social, la burguesía, que emergía a la vez que
se iniciaba el declive feudal. En las ciudades aparecieron también
nuevas instituciones culturales, las universidades, que quebraron el
monopolio, aunque no el predominio, de la cultura religiosa. Fue
asimismo la época en que se consolidó el poder de los reyes,
fundamentado jurídicamente en la recuperación del derecho
romano. El cambio en la economía fue tan profundo que está en
la base de las restantes transformaciones: renació la artesanía, se
desarrolló el comercio, se consolidaron los gremios, surgieron las
primeras instituciones comerciales precapitalistas.
10. 1. INTRODUCCIÓN
También hubo importantes cambios culturales que se
manifiestan sobre todo en la progresiva secularización
de la cultura. El trascendentalismo románico, empieza a
ser sustituido por una religión más humana, por una
mayor valoración del hombre y de la naturaleza,
considerados bellos en sí mismos por reflejar la belleza
divina.
11. 1. INTRODUCCIÓN
Otro aspecto importante fue la actitud de la Iglesia. En el
siglo XII tuvo lugar la reforma cisterciense, conducida por
San Bernardo de Claraval. En el siglo XIII se crearon
nuevas órdenes como la de los franciscanos o las de
los dominicos que se instalaban ya en las ciudades y
contribuyeron al cambio de mentalidad puesto que
participaban intensamente en los centros universitarios y
difundían la idea de la belleza como obra de Dios.
12. Una nueva espiritualidad: la reforma
cisterciense
Siendo Roberto abad del monasterio cluniacense de
Molesmes, él y un grupo de monjes de su comunidad
se propusieron retornar a la observancia estricta de
la primitiva regla de san Benito, quien en 540 fundara
la Orden Benedictina. Para ello erigió una nueva
abadía en Cîteaux, donde los monjes blancos, así
conocidos por el color de su hábito, dedicaron su vida al
trabajo manual y a la contemplación ascética con igual
empeño, poniendo en práctica el lema benedictino Ora
et labora (reza y trabaja). Bernardo de Claraval dio
un impulso considerable al crecimiento de la orden
cisterciense que en 1153, tan sólo 38 años después de
que fundase la abadía de la que fue titular, contaba con
343 monasterios, de los que 68 se habían creado por
irradiación de los monjes de Claraval.
13. El monasterio cisterciense
• En el tránsito del románico al gótico, la
reforma cisterciense tuvo un papel
destacado.
• Esta reforma, que busca recuperar la pureza
de la regla monástica, favorece un arte
austero.
• Del rechazo de la escultura y pintura
decorativas se deriva el predominio de la
arquitectura, lo que dará lugar a importantes
innovaciones técnicas.
• Su principal aportación reside en que, aunque
Refectorio del mantuvieron elementos románicos (como el
monasterio de Huerta arco de medio punto y las bóvedas de cañón),
(Soria) utilizaron el arco apuntado y la bóveda de
crucería, que caracterizan el gótico.
14. El monasterio cisterciense
• Las iglesias cistercienses,
además, albergan dos coros
(para separar a padres y
hermanos).
• Sus templos son de planta
basilical de tres naves,
cabecera rectilínea y ábside de
planta cuadrangular, buscando
la máxima pureza y el equilibrio
de las formas.
Monasterio de Veruela (Zaragoza).
Sala Capitular.
16. Una nueva espiritualidad: San Francisco de
Asís
• Francisco de Asís, en el siglo XIII,
nos transmite una nueva
dimensión del ser humano. En
adelante, el cuerpo no será un
miserable soporte del alma, sino
una maravillosa obra de Dios que
hay que respetar.
• La Baja Edad Media ha dejado
muy atrás el terror milenarista y se
abre hacia una era de amor: de
amor a Dios y a la naturaleza, de
amor espiritual y de amor
cortesano.
San Francisco bendice a los pájaros,
por Giotto
17. Periodización del Arte gótico
2ª ½ s. XII
génesis del estilo
Orden del Císter
Reforma del
s. XIII PLENITUD
Cister
Difusión por toda Europa
Región de París
(L’Île-de-France)
Crisis de la Baja Edad Media
(guerra, Hambres y peste)
s. XIV- 1ª ½ S. XV
Guerra de los Cien Años
Gótico Internacional
Arte cortesano
2ª ½ s. XV
Desarrollo Gótico Flamígero
Decorativo.
Agotamiento.
18. 1. INTRODUCCIÓN
No todos los siglos del Gótico fueron de progreso; en el
XIV se produjo una profunda crisis. Afectó a las
actividades económicas, a las relaciones entre países
(Guerra de los Cien Años), a la demografía (Peste Negra),
a la religión (Cisma de Occidente), a las conciencias y, por
supuesto, al arte. Entre las consecuencias inmediatas de la
crisis hubo una exaltación de las formas de religiosidad
individual y una doble manera de entender la vida: la
actitud vitalista y mundana de unos se contraponía a los
fatalistas, obsesionados por la muerte. En paralelo
surgieron dos formas de concebir el arte, una superficial,
refinada y de evasión, junto con otra caracterizada por un
profundo dramatismo trascendente.
19. 1. INTRODUCCIÓN
En España durante esos siglos se produjeron grandes
acontecimientos históricos. Tras la victoria de Las Navas de
Tolosa (1212) contra los almohades, se llevó a cabo el mayor
avance reconquistador de los reinos cristianos que ocuparon, a
lo largo del s. XIII, los territorios de Córdoba, Sevilla,Valencia,
Mallorca y Murcia. Sólo quedaba en manos musulmanas el
reino de Granada, conquistado en 1492 por los Reyes
Católicos. Fue también una época de expansión exterior de la
que son los mejores ejemplos la proyección territorial y
comercial de la Corona de Aragón en el Mediterráneo y, por
parte de Castilla la ocupación de las islas Canarias y el
desarrollo del comercio con Flandes. Al finalizar el periodo, el
matrimonio entre Isabel de Castilla y Fernando de Aragón
puso las bases para una futura unidad peninsular.
21. 2.1. Los edificios góticos. La catedral
Tanto en la esfera civil como en la eclesiástica, el crecimiento
de las ciudades planteó nuevos problemas arquitectónicos. Se
necesitaban nuevos tipos de edificios acordes con las
necesidades de las instituciones de gobierno municipal, de los
gremios, del comercio y hasta de los nobles que fijaban su
residencia en las ciudades. Por eso, con el arte gótico asistimos
a un inusitado florecimiento de la arquitectura civil. Se
construyen ayuntamientos (Bruselas, Lovaina) y otros
palacios para organismos públicos (palacio de la Señoría de
Florencia, palacio de la Generalidad de Barcelona), lonjas
comerciales (Ypres; Palma de Mallorca), palacios urbanos
(palacio Ducal en Venecia), hospitales (Hotel Dieu de
Beaune), castillos (Bellver en Palma de Mallorca), atarazanas
(Barcelona), casas gremiales, etc.
22. La arquitectura civil
La arquitectura civil es la mejor
muestra de la pujanza económica
del occidente cristiano en la Baja Edad
Media. El auge de las actividades
comerciales y artesanales, la
apertura de nuevas rutas comerciales y
el inminente descubrimiento de
América, además de la consolidación de
formas de gobierno municipales
frente al dominio señorial o eclesiástico,
facilitan el desarrollo de numerosos
edificios de uso civil.
Ayuntamientos, Lonjas, Palacios
urbanos, etc. son la mejor muestra de
este despertar urbano que anuncia ya
la proximidad del Renacimiento.
23. La arquitectura civil: la lonja
El s. XV conoció el impulso
definitivo de la arquitectura civil,
que en el ámbito de las finanzas
tuvo su máximo exponente en la
construcción de lonjas (edificios
destinados a albergar actividades
mercantiles y que eran el reflejo
del dinamismo de la clase
comercial).
Las lonjas, al principio simples
espacios porticados donde realizar
las transacciones, pasaron a ser
imponentes edificios de piedra
que reflejaban la riqueza de una
ciudad.
24. La arquitectura civil: los palacios
El palacio urbano es
técnicamente similar en
cuanto a soluciones
constructivas se refiere, pero
su riqueza ornamental y
suntuosidad.
Son el mejor exponente del
florecimiento de la burguesía
mercantil y financiera, de la
nueva aristocracia del
dinero.
25. 2.1. Los edificios góticos. La catedral
Otro tanto sucede con la arquitectura eclesiástica; la
aglomeración urbana precisaba de edificios más amplios y
por ello proliferaron las catedrales. La catedral es el
edificio arquetípico del arte gótico, pues la arquitectura
religiosa mantuvo su papel normativo y en ella se
generaron y experimentaron las innovaciones técnicas:
28. 2.1. Los edificios góticos. La catedral
Es la iglesia urbana por excelencia, sede episcopal (la palabra
catedral deriva de cátedra, trono del obispo) y símbolo de la
importancia de la ciudad. Refleja la capacidad económica y
artística de la urbe ya que se construye con las aportaciones
que hacen los ciudadanos a lo largo de generaciones. Por
supuesto es también la casa de Dios y, como tal, su forma y
sus elementos tienen, como en el románico, valores simbólicos:
el abad Suger nos explica que las columnas aluden a apóstoles
y profetas, que la bóveda es el símbolo de Cristo o que la luz
que filtran las vidrieras abre al hombre el camino para ver la
verdadera luz de Dios.
29. Dios es luz
“ Dios es luz. La luz, perpetua
Irradiación del dios luz extendido
sobre las criaturas en que se
juntan la materia y el espíritu,
es la idea que está en el corazón
de la estética de San Denís, a
querer reducir tanto como fuera
posible en un santuario, el lugar
del muro, a hacer los muros
porosos, translúcidos. A sacar
todo el partido a la bóveda de
crucería (...). Los rayos luminosos
se introducen ampliamente y el
abad Suger quiere que sean
triunfales, adornados con todas
las rutilancias de las gemas.
Gloria de la vidriera.”
G. Duby.
30. El simbolismo de la catedral gótica
“La catedral era un símbolo ambivalente de Cristo, la Jerusalén
Celestial y el universo. La magnificencia de ella juzgábase
adecuada a su función como ofrenda de los fieles y morada
espiritual de Cristo y de la Virgen. A través de la catedral el
hombre entendía lo invisible y lo infinito y lo divino se hacía
inminente. El maestro constructor procuraba idear un marco
que estimulase los pensamientos y sentimientos del devoto de
tal manera que este pudiera realizar el acto más importante
de su vida la comunión del alma con Dios” (Elsen “Los
propósitos del arte”, pg. 74-75)
31. 2.1. Los edificios góticos. La catedral
La planta típica de la catedral gótica es la basilical, con una
nave central amplia y muy elevada y una o dos laterales a cada
lado. Tiene transepto y en el crucero un cimborrio exterior, que a
veces presenta forma de flecha. La cabecera es generalmente
macrocéfala, formada por una capilla central profunda y una
o dos girolas con corona de capillas radiales.
32. La planta de la catedral gótica
Planta basilical Planta de salón
33. La concepción espacial gótica
CABECERA
Las plantas son muy similares a las románicas: tres o cinco naves longitudinales y
cabecera con transepto, presbiterio y remate en ábside o deambulatorio con capillas
radiales.
35. La concepción espacial gótica
Doble girola
Capillas
radiales
Torres
Cabecera
Crucero hipertrofiada
Naves destacado
36. La planta de salón
Dividida en cinco naves, que en la
cabecera generan un doble
deambulatorio.
El transepto no sobresale
exteriormente ya que queda
integrado en el cuerpo
longitudinal del edificio, aunque se
siguen abriendo pórticos al
exterior del mismo.
37. La girola o deambulatorio
La cabecera gótica es más amplia que la románica; los
brazos del transepto se acortan y adquiere protagonismo
el deambulatorio o girola rodeado de capillas radiales
llamadas absidiolos. En ellos las cofradías y gremios
artesanales, que habían participado en la financiación de la
catedral, instalaban las capillas de sus santos patronos.
38. 2.1. Los edificios góticos. La catedral
El alzado más usual viene caracterizado por la notable
elevación de la nave central, constituida por tres alturas: las
arquerías que comunican con las naves laterales, el triforio
(andito o pasillo abierto hacia la nave mediante arcos, que
sustituye a la tribuna románica) y el claristorio de ventanales.
39. Alzado y sección de una catedral
La organización del alzado interior sigue su precedente románico: arcadas que
conducen a las naves laterales, un triforio (estrecho pasadizo con arquerías), que
sustituye a la tribuna románica y un claristorio o cuerpo de ventanales con vidrieras
coloreadas.
40. Interior de la catedral
El alzado interior de la catedral se
articula en: arcadas que separan
la nave central de las laterales,
triforio a modo de galería abierta
sobre la nave central y
claristorio con vanos cubiertos
de vidrieras que posibilitan el paso
de la luz exterior.
41. Interior de la catedral
Pináculo
Bóveda de
crucería
Arbotantes
Claristorio
Triforio
Contrafuertes
Arcos
apuntados Pilar fasciculado
42. 2.1. Los edificios góticos. La catedral
La catedral tiene una o tres fachadas, la más monumental a
los pies y las otras dos en los brazos del transepto. Responden
a un modelo formado por un cuerpo central, cuya altura
alcanza la de la nave mayor, y dos torres laterales mucho más
elevadas, que algunas veces acaban en terraza pero la mayoría
culminan en agujas. En la parte inferior se abren los portales,
que son muy abocinados, con los arcos frecuentemente
subrayados por gabletes. Sobre ellos puede haber galerías con
arcos o frisos con esculturas y un gran rosetón. Abundan los
elementos decorativos.
51. 2.2. Estructura arquitectónica
La estructura del edificio gótico está constituida por un
esqueleto equilibrado y dinámico formado por arcos,
bóvedas, pilares, arbotantes y contrafuertes, que se completa
con muro y vidrieras. Para evitar que la lluvia deteriore
las bóvedas, las protegen con un tejado de doble
vertiente. Es un sistema orgánico, de elementos
especializados y articulados, que recogen las cargas
verticales y trasladan las presiones laterales, y que
permite construir edificios de gran altura y aligerar los
muros para abrir amplios ventanales.
52. 2.2. Estructura arquitectónica
Los elementos sostenidos de la arquitectura gótica
son el arco apuntado y la bóveda de crucería:
El arco apuntado está formado por dos segmentos de
circunferencia que se cortan. Es el elemento estructural que,
por su esbeltez y por transmitir las cargas más verticalmente
que el arco de medio punto, permitió el aumento en altura del
edificio y la apertura de grandes vanos. El arco gótico clásico
tiene la misma anchura que altura, pero en el siglo XIV fue muy
frecuente el alancetado (muy apuntado) y en el XV el rebajado,
además de dos arcos nuevos, el carpanel y el conopial.
55. 2.2. Estructura arquitectónica
Los elementos sostenidos de la arquitectura gótica
son el arco apuntado y la bóveda de crucería:
La bóveda de crucería está formada por un armazón
estructural de nervios. La más sencilla es la cuatripartita
cuyo esqueleto consta de dos arcos formeros y dos fajones, que
delimitan un rectángulo, y dos ojivas diagonales que refuerzan
las aristas y, al cruzarse, originan la clave. Los huecos que
quedan entre los nervios se rellenan con paños cóncavos,
llamados plementos. Es una estructura sólida y ligera, que se
puede adaptar a espacios poligonales más complicados que el
rectángulo. En el siglo XIV surgieron las bóvedas de terceletes,
con nervios menores, y en el XV se añadieron múltiples
nervios pequeños y combados dando lugar a las bóvedas
estrelladas.
56. La cubierta: la bóveda de crucería o nervada
ARCO TORAL O FAJÓN
CLAVE
El arco apuntado u ojival es el que hace
posible la gran novedad del gótico, la
bóveda de crucería.
57. La bóveda de crucería
La bóveda de crucería es el
resultado del cruce entre arcos
apuntados, que forman un
esqueleto de nervios; el espacio
entre los nervios de piedra se
rellena con plementería
(material ligero de relleno).
La clave de la bóveda es la
dovela central que la cierra.
El arco apuntado permite
elevar considerablemente la
altura de la nave sin que se
resienta su estabilidad por el
peso de la bóveda, ya que las
presiones tangenciales se han
reducido.
61. 2.2. Estructura arquitectónica
Los elementos sustentantes del esqueleto gótico son los pilares,
los contrafuertes y los arbotantes:
Los pilares reciben, en el interior, las cargas verticales de las bóvedas y
las trasladan hasta el suelo. Son soportes robustos que están recorridos
verticalmente por finas columnas adosadas en que se apean las ojivas y
arcos de las bóvedas. Cuando, en el gótico final, estas finas columnas
(baquetones) se multiplican originan el pilar fasciculado. Los pilares suelen
adornarse con un capitel corrido que une todas las columnas a modo de
cinta, decorada con motivos vegetales.
En el exterior, los arbotantes (arcos aéreos rampantes) transmiten los
empujes laterales de las bóvedas a los contrafuertes o estribos. Sirven
también para canalizar el agua que baja de los tejados y la expulsan a
través de las gárgolas.
Los contrafuertes reciben, en torno al edificio, las presiones laterales y
las trasladan hacia el suelo. Sobre los contrafuertes, con una función a la
vez ornamental y de contrapeso, se disponen unos pequeños pilares
apiramidados, llamados pináculos.
64. ¿Cómo se sostiene una bóveda de crucería?
Las tensiones de la bóveda de crucería, que se resuelven en el exterior con
contrafuertes y arbotantes, en el interior descansan sobre pilares. Los nervios de
la bóveda acostumbran a prolongarse en baquetones o columnillas adosadas a lo
largo del fuste de los pilares, hasta el suelo.
67. Elementos exteriores
Las torres, agujas, chapiteles
(remate piramidal), pináculos (remate
cónico o piramidal), gabletes (remate
en punta a modo de Frontón)…son
utilizados plásticamente para acentuar
el impulso ascensional de la
construcción gótica.
Aguja gótica
69. 2.2. Estructura arquitectónica
El muro modifica su función arquitectónica tradicional.
Pierde gran parte de su papel sustentante y queda casi
limitado a cerrar el espacio, por lo que puede abrirse en
múltiples y amplios vanos, sean ventanales verticales o
rosetones circulares. Unos y otros tienen maineles y
tracerías caladas para soportar las vidrieras. La forma de
las tracerías evoluciona a lo largo de los siglos. Así, en el
XIII, un mainel divide en dos el vano y lleva pequeños
rosetones trifoliados de lóbulos curvos, cobijados bajo el
arco mayor del ventanal. En el XIV aumenta el número de
maineles y los lóbulos se hacen apuntados. En el siglo XV
se imponen las tracerías flamígeras con curvas y contra
curvas que parecen llamas.
70. La desmaterialización del muro
Una vez que la cubierta ya no
carga sobre los muros y éstos
desaparecen, grandes
ventanales, decorados con
vidrieras y tracerías, que
potencian la luminosidad,
vendrán a ocupar su lugar. Las
fachadas serán perforadas por
un gran ventanal circular
vidriado, llamado rosetón.
73. 2.3. Espacio y volúmenes del edificio
gótico
En la arquitectura gótica predomina el vano sobre el
macizo, de lo que deriva una de las principales
características de su espacio interior: la luz coloreada
y fragmentada que penetra por las vidrieras crea un
ambiente metafísico y espiritual. El interior gótico es,
además, un espacio en tensión entre dos impulsos, uno
vertical y ascendente, creado por la elevación de la nave,
la altura a que están situados los vanos, las forma de los
arcos apuntados y los baquetones de los pilares; y otro
longitudinal hacia la cabecera promovido por el ritmo
de las arcadas y los pilares que conducen hacia el ábside
como ocurre en todas las plantas basilicales.
76. La verticalidad gótica
En el gótico el sentido ascensional
de las formas y la intensa
luminosidad del interior de los
edificios recrean el espacio ideal
para acercarse a un Dios más
humano; un reflejo de la “Jerusalén
celestial” de la que habla el
Apocalipsis de san Juan, con sus
“puertas de perlas”, “sus calles de
oro puro y vidrio transparente”.
Los avances en la técnica
constructiva del gótico hará posible
plasmar en piedra y de forma
simbólica tales visiones.
77. La verticalidad gótica
La proyección vertical de la
catedral gótica se resuelve
tectónicamente con gran
elegancia, de tal manera que la
belleza formal y la estabilidad
técnica del edificio son valores
complementarios que arrancan
de la perfección de las formas
geométricas.
78. 2.3. Espacio y volúmenes del edificio
gótico
Los volúmenes exteriores quedan definidos por la
apariencia monumental, el carácter atectónico y la tensión
ascendente. La monumentalidad deriva de las grandes
dimensiones del edificio, mientras que la tendencia
ascensional viene dada por los arbotantes rampantes, la
verticalidad de los pilares, la altura de las torres acabadas en
flechas, la aguja del crucero, la forma apuntada de pináculos y
gabletes, y la decoración, que en su mayor parte está formada
por motivos verticales. Es también una construcción
atectónica, de formas poco definidas y apariencia
relativamente liviana. Es la consecuencia de los pináculos
emergentes, de las torres caladas y salientes, de las agujas y
flechas, del carácter aéreo de los arbotantes que permiten que
el aire circule entre ellos; todo lo cual integra al edificio en el
espacio y desdibuja los volúmenes.
79. El exterior del sistema constructivo
El objetivo prioritario es
contrarrestar el empuje
tangencial de la bóveda interior
mediante contrafuertes y
arbotantes (arcos externos
dispuestos en diagonal, que
transmiten los empujes de la
bóveda interior al contrafuerte
exterior).
81. 2.4. Arquitectura gótica europea
El país en que nació el gótico, donde evolucionó y en el
que se encuentra la mayoría de las obras maestras, es
Francia:
Al gótico inicial (segunda mitad del siglo XII) pertenecen la
cabecera de Saint Denis y la catedral de Notre Dâme de
París, que posee una monumental fachada en H y es el primer
gran edificio construido con arbotantes.
94. 2.4. Arquitectura gótica europea
En la primera mitad del siglo XIII encontramos el gótico
clásico en el que él se impuso la bóveda cuatripartita y la nave
central de tres alturas con arquerías, triforio y claristorio. La
catedral de Chartres tiene unas proporciones tan
equilibradas que la convierten en el paradigma del clasicismo.
La catedral de Reims destaca por la unidad de estilo y su
notable profundidad, idónea para el ceremonial real ya que en
ella eran coronados los reyes de Francia. La catedral de
Amiens, además de su mayor verticalidad, presenta como
novedad el triforio calado que permite la entrada de mayor
cantidad de luz; es el punto de partida del gótico radiante. Las
tres tienen magníficas fachadas.
95. Catedral de Chartres
La de Chartres, que es la primera
catedral que reúne todos los elementos
citados con anterioridad. Un primer
incendio había obligado a reconstruir la
fachada de los pies con sus torres y el
tramo de naves adjunto, pero un
segundo incendio a finales del siglo XII
destruyó toda la catedral, cuya bóveda
era de madera, salvo la parte
reconstruida tras el primero de ellos, lo
que obligó a su rehabilitación total que
respetó la organización de la cabecera
anterior y la Portada Real (la de los
pies), esto último determinó optar por
tres naves; el resto el edificio es
totalmente nuevo, acabándose hacia
1220.
97. Catedral de Chartres
La planta es prototípica dentro de las iglesias del
norte de Francia: de tres naves en la zona de los
pies y en el transepto, pero la cabecera tiene cinco
con doble deambulatorio, capillas sin comunicación
entre sí y de planta circular, detalles ambos
arcaicos. Por su parte la organización del muro es
genuinamente gótica con sus tres niveles: arcos
formeros, triforio ya convertido en claristorio y
ventanales. Exteriormente se observa la
organización del muro con los contrafuertes y
arbotantes que contrarrestan las bóvedas
interiores y unas vidrieras que son las originales, lo
que hace que se mantenga el ambiente real de las
catedrales góticas.
101. Catedral de Reims
Esta catedral tenía como Saint-Denis un profundo
significado para la monarquía francesa. Si esta
segunda era la sede del panteón dinástico y el lugar
donde se custodiaban los símbolos del poder, en la
primera se coronaban los reyes. También un
incendio, como en Chartres, Amiens y otras
muchas iglesias francesas, el año 1210, motivó la
reconstrucción de la catedral. Iniciada sólo un año
después, se acabó en cien años (1311). El obispo
Braisne, retratado en una vidriera, es el impulsor
de unas obras que habían de rivalizar con la vecina
Amiens.
102. Catedral de Reims
A diferencia de otros edificios contemporáneos,
en éste se conocen los nombres de los
arquitectos que se sucedieron en la dirección de
la obra. Los proporcionó el laberinto, con la labor
ejecutada por cada uno de ellos, que ornó el
pavimento de la nave central y que fue destruido
al sustituirse el original por otro nuevo en el siglo
XVIII. Trabajaron en este orden: Jean d’Orbais,
Jean le Loup, Gaucher de Reims y Bernard de
Soissons. Así d’Orbais fue artífice de la planta y
de los trabajos iniciales en el ala oriental hasta el
transepto, Jean le Loup terminó el coro y edificó
los fundamentos del cuerpo principal del edificio,
el hastial occidental y las torres; Gaucher de
Reims intervino en las tres puertas abiertas a los
pies del edificio y Bernard de Soissons construyó
varias bóvedas (cinco en total) y el gran rosetón
de los pies.
103. Catedral de Reims
La planta de Reims muestra, como rasgo más sobresaliente, la
hipertrofia de la cabecera, una de las particularidades de
algunas iglesias francesas del siglo XIII, aunque aquí llega a
ocupar la mitad justa de todo el edificio; se justifica
parcialmente por la necesidad de ubicar en ella el coro. En el
resto de la construcción se siguen las pautas habituales. Tiene
tres naves, transepto también de tres naves y, en su alzado, el
muro interior presenta los tres niveles canónicos: arco, triforio
y ventana.
110. 2.4. Arquitectura gótica europea
El gótico radiante predomina en la segunda mitad del
siglo XIII. Se le llama así por la abundancia y tamaño de los
ventanales que prácticamente eliminan el muro. El mejor
ejemplo es la Capilla Santa (Sainte Chapelle) de París, cuyo
comitente fue el rey San Luis.
115. 2.4. Arquitectura gótica europea
En el gótico flamígero (siglo XV) se acentúa la decoración,
se diversifican los tipos de arco, se complican los nervios de las
bóvedas, y se multiplican las claves, muchas de las cuales son
colgantes. Está relacionado con los Países Bajos donde tuvo
gran desarrollo. En esta etapa se inician pocas obras nuevas
pero muchas catedrales se completaron con agujas, torres o
capillas añadidas. La ciudad flamígera por excelencia fue Rouen:
Saint Maclou y fachada de la catedral.
118. 2.4. Arquitectura gótica europea
Fuera de Francia también hay importantes ejemplos de
edificios góticos:
En Italia, las catedrales de Siena y Milán, el palacio de la
Señoría de Florencia y el palacio de los Dux de Venecia.
Las catedrales de Wells y Gloucester, la abadía de
Westminster, y la capilla del King’s College de Cambridge,
en Inglaterra.
En Alemania, las catedrales de Colonia y Ulm.
En los Países Bajos, la catedral de Amberes y la lonja de
Ypres.
156. 2.5. Arquitectura gótica en España
Las primeras grandes catedrales góticas españolas se
construyeron en el siglo XIII, en la Corona de Castilla, si
bien algunas iglesias del románico tardío, en la segunda
mitad del siglo XII, usaron ya la bóveda de crucería
(Catedral de Zamora, San Vicente de Ávila). También se
iniciaron algunos edificios protogóticos como la catedral
de Ávila.
157. Monasterio de las Huelgas (Burgos)
Fue fundado en 1189 por el rey Alfonso
VIII de Castilla. Este edificio fue
destinado en principio para monjas
cistercienses y constituido luego en
panteón regio.
Santa María la Real de las Huelgas tiene
notable interés artístico. El templo es de
un gótico excelente, con tres naves y
cabecera de cinco ábsides.
Su notable categoría monumental,
impropia de los monasterios de monjas
del Císter, fue debida a la característica
de ser panteón real.
159. Catedral de Ávila
Levantada sobre una antigua iglesia románica, está
dedicada a San Salvador. Es la catedral más antigua del
gótico español, con la circunstancia de que la cabecera
se halla incluida en las murallas, formando parte del
conjunto defensivo. Su aspecto almenado y torreado,
es mixto de templo y fortaleza.
Su construcción comenzó en el último tercio del siglo
XII, iniciando las obras del cimborrio el maestro
Fruchel, que hizo de la girola una pieza maestra de
nuestra arquitectura medieval, para lo cual utilizó
piedra arenisca de la Colilla que le da un curioso
aspecto.
El cuerpo principal del edificio, ya de sillares graníticos,
se finalizó en el siglo XIV. La planta de la catedral tiene
forma de cruz latina con tres naves, crucero y girola;
cuatro pilares góticos cistercienses sostienen las
bóvedas ojivales, rectangulares y trapezoidales. En los
siglos XV y XVI se añadieron el coro y el claustro.
161. Catedral de Cuenca, antes de 1902
En los siglos XVI y XVII se efectuaron varios
trabajos en la fachada y se construyeron varias
capillas y el claustro. En el siglo XVIII se realizaron
reformas en el ábside, pilares y en la decoración
interior. En el año 1902, se produjo el desplome de
la torre de Giraldo que provocó enormes
destrozos en la fachada por lo que hubo que
reconstruirla, en estilo neogótico, según proyecto
de Vicente Lámperez.
162. Catedral de Cuenca
Iniciada entre finales del siglo XII y principios
del XIII, es de aspecto exterior puramente
gótico pese a su sencillez, pero destaca sobre
todo por su bello interior, de planta de tres
naves con bóvedas sexpartitas, crucero que
sobresale en los laterales, espléndida girola y
hermoso triforio de arcos apuntados y
lobulados con tracería.
165. Catedral de Sigüenza
Sobre la puerta se abre un gran rosetón, obra
del siglo XIII, con complicada tracería. La planta
de la iglesia es cruz latina, con tres naves,
crucero y capilla mayor con girola. Está
iluminado por pequeños vanos abiertos sobre
las arcadas, por los grandes rosetones y por la
linterna que remata la bóveda del crucero. Las
naves están divididas por grandes pilares con
columnas adosadas, que rematan en líneas de
capiteles unidos, sobre los que se apoyan los
arcos ojivales, de los que arrancan los nervios
de las bóvedas de crucería.
167. 2.5. Arquitectura gótica en España
Las grandes catedrales castellanas del siglo XIII, las
de Burgos, Toledo y León, se inspiran en modelos clásicos
franceses:
La catedral de Burgos se comenzó en 1221, con el patrocinio
del rey Fernando III. Su planta es de tres naves con crucero
muy marcado y cabecera macrocéfala con girola. Tiene un
espléndido triforio con tracerías caladas. La monumental
fachada se terminó a finales del XV y, años más tarde, fueron
eliminados los portales góticos.
168. Catedral de Burgos
El obispo de Burgos había estudiado en París e
inicia las obras de la catedral en 1221. Los
maestros de obras fueron el Maestro Enrique
hasta su muerte en 1277 y Juan Pérez hasta 1296.
El proyecto original tenía tres naves y un
transepto de brazos muy marcados, cabecera
amplia con girola y capillas radiales
semidecagonales. Alzado de tres pisos, pero el
triforio ciego es ojival, no polilobulado con el
toledano. Como característica burgalesa original,
el “espinazo” o nervio dorsal que cruza las
bóvedas ojivales.
175. 2.5. Arquitectura gótica en España
La catedral de Toledo es la más original e hispana. Fue
promovida por el arzobispo Ximénez de Rada, en 1226, y se
edificó en el solar de la antigua mezquita mayor, por lo que su
planta es muy ancha, de cinco naves escalonadas, con doble
girola y el transepto no marcado en planta. Los dos rasgos más
originales son los arcos lobulados entrecruzados que hay en el
triforio de la cabecera, y la doble girola resuelta con alternancia
de tramos rectangulares y triangulares.
176. Catedral de Toledo
Se le atribuye el proyecto general de la obra al
maestro Martín, quien realizó el deambulatorio con
las capillas radiales en los primeros doce años de la
construcción de la catedral. Los siguientes 50 años, se
hizo cargo de la obra un maestro llamado Petrus
Petri, probablemente de origen francés, quien levantó
el transepto y parte de las cinco naves.
Se planteó una iglesia de cinco naves con doble girola
y sin transepto marcado al exterior (planta de salón),
según el modelo seguido inicialmente en Notre-
Dame de París, toda ella de una gran
monumentalidad. Su alzado es de tres pisos en altura.
El presbiterio está rodeado de una doble girola y su
gran novedad estaba en la manera de cubrir los dos
deambulatorios y las quince capillas de la cabecera; la
solución fue descomponer este espacio en tramos
triangulares y rectangulares, y contrarrestando sus
empujes mediante arbotantes bifurcados.
177. Catedral de Toledo
Aunque Toledo responde en planta a un modelo
francés, las soluciones adoptadas en lo que a elevación
de muros y proporciones del alzado en general se
refiere, nada tienen que ver con él. Es significativo de
esta acomodación el uso de los arcos polilobulados en
la zona de los triforios de la girola, de intenso sabor
musulmán. La catedral de Toledo, si bien es la empresa
de carácter monumental más ambiciosa de las
emprendidas a lo largo del siglo XIII en nuestra
Península; si también constituye un testimonio
irrefutable de la voluntad de adaptar un modelo
foráneo a la tradición local (la despreocupación por
lograr una estructura esbelta, en sintonía con lo
francés, es total), no es un edificio redondo, porque,
probablemente, lo segundo no acaba de funcionar.
181. 2.5. Arquitectura gótica en España
La catedral de León, iniciada a mediados del siglo XIII, es la
que imita de modo más fiel los modelos franceses. El principal
arquitecto fue el Maestro Enrique, que también había trabajado
en la catedral de Burgos. León copia la planta de la catedral de
Reims, aunque mucho más corta, y su alzado recuerda a la de
Amiens por el triforio calado, que confiere a su interior una
diafanidad incomparable. La fachada, terminada en el siglo XV,
tiene dos torres, pero separadas del cuerpo central.
182. Catedral de León
La catedral de León recibe también la influencia de
la Isla de Francia. Se inició a principios del s. XIII,
los trabajos se activaron a mediados para acabarse
a principios del XIV. Los arquitectos fueron el
Maestre Simón y los dos de la catedral de Burgos.
El Maestro Enrique se encargó de las bóvedas y de
las portadas de los pies y la sur; Juan Pérez, por su
parte, es el autor del claustro.
Es una réplica de Reims pero reduciendo sus
proporciones en un tercio: tres naves, amplio
transepto y monumental cabecera de cinco capillas
abiertas a la girola. Alzado de tres pisos, pero
triforio decorado con vidrieras, por lo que se
cuentan tres pisos de ventanas y muro inexistente.
193. 2.5. Arquitectura gótica en España
El siglo XIV se caracteriza por la decadencia del gótico
castellano y por el auge artístico de la Corona de
Aragón, sobre todo en Cataluña, Valencia y Mallorca, sus
estados marítimos mediterráneos. La Corona aragonesa
alcanzó en la primera mitad del siglo XIV una notable
prosperidad económica. Las actividades comerciales
impulsaron la creación de un imperio mediterráneo e
hicieron posible el desarrollo de la burguesía,
especialmente próspera en Cataluña. Por eso, además de
los edificios religiosos tuvieron gran importancia las
construcciones civiles (lonjas, atarazanas, palacios…):
194. 2.5. Arquitectura gótica en España
Los edificios religiosos del gótico mediterráneo se
caracterizan por los paramentos lisos y las ventanas pequeñas,
ya que el clima es muy luminoso. La nave central suele ser
ancha, las laterales elevadas y los soportes interiores delgados
y airosos: por eso, el espacio interior es diáfano, de notable
amplitud espacial. No suelen tener triforio o lo tienen
atrofiado. En el exterior, robustos contrafuertes recogen las
presiones, casi siempre sin arbotantes. La decoración es escasa
tanto dentro como fuera del edificio.
195. 2.5. Arquitectura gótica en España
En Barcelona hay dos templos importantes: la catedral y Santa
María del Mar, la iglesia del barrio de los mercaderes. Santa
María del Mar tiene tres naves cuyas bóvedas arrancan a igual
altura sobre los esbeltos pilares lisos; su dilatado y armónico
espacio interior de es uno de los más bellos de la arquitectura
española. La catedral de Gerona, aunque tiene la cabecera de
tres naves con girola, se continúa con nave única de casi
veintitrés metros de anchura, diseñada por Guillermo Bofill. La
catedral de Palma de Mallorca, también muy espaciosa,
llama la atención por su aspecto exterior de fortaleza debido a
la gran cantidad de contrafuertes. En arquitectura civil,
destacan el castillo de Bellver en Palma de Mallorca, y las
lonjas de la Seda de Valencia y de Palma de Mallorca,
ambas del siglo XV.
196. Catedral de Barcelona
De tres naves más dos de capillas entre los
contrafuertes, la nave del crucero no
sobresale de las laterales, girola con nueve
capillas radiales poligonales, nave central muy
ancha, destaca por representar sus torres los
clavos de la Santa Cruz, dos en el crucero y
otra a los pies.
204. Santa María del Mar
Es la iglesia más lógica y armoniosa del Gótico
de su época, de tres naves con girola destaca
por sus pilares muy finos y esbeltos.
207. Catedral de Gerona
Muy original, la
cabecera hasta el
crucero es normal de
tres naves con girola,
pero se continúa en una
única de una gran
anchura hasta los pies,
ya en el siglo XV.
210. Catedral de Palma de Mallorca
De enormes
proporciones
en el que
predominan las
líneas verticales
por la
abundancia de
contrafuertes y
su escasa
separación, es
la segunda más
alta de Europa
y una de las
más anchas
también, de
tres naves con
capillas entre
los estribos.
214. Lonja de Valencia
En ella se recogió el Consulado del Mar, institución de derecho marítimo, y la Taula de
Cambis. Se trata de un edificio que marcó la primacía valenciana entre las ciudades
españolas ribereñas del mediterráneo, con una inusitada actividad comercial.
Es particularmente atractiva la sala principal con sus columnas helicoidales y su
magnífica bóveda. En el ala izquierda está el Salón del Consulado del Mar, con magnífico
artesonado.
215. 2.5. Arquitectura gótica en España
Durante el siglo XV, Castilla recuperó la primacía, al
quedar la Corona de Aragón muy debilitada tras la crisis
del siglo XIV. En la primera mitad del siglo se construyó la
mayor iglesia de España, la catedral de Sevilla, de cinco
naves, en el solar de la Mezquita mayor almohade. La
cabecera es renacentista.
217. Catedral de Sevilla
Uno de los templos
más grandes de España,
de planta rectangular,
por tanto con cabecera
plana, con crucero que
no sobresale, de cinco
naves, las cuatro
extremas de igual
altura, capillas laterales
y bóvedas estrelladas
como características
más destacables. No
tiene torres, sino que
se aprovecha el alminar
de la mezquita
almohade que existía
con anterioridad en el
lugar, la Giralda.
218. Catedral de Sevilla
Conquistada la ciudad en 1248, la mezquita
almohade se purificó y se dedicó al culto
cristiano, cambiando la orientación N-S a E-O
y dividiendo el templo en dos sectores: el
oriental se dedicó a capilla real y el resto a
catedral. Así permaneció hasta que en 1375,
tras varios terremotos, el Arzobispo Fernando
de Albornoz decidió restaurarlo, pero era tal
el deterioro que presentaba que, por Acuerdo
Capitular de 1401, se decidió derribar la vieja
construcción y levantar un nuevo templo:
“Fagamos una iglesia tal e tan grande que no
haya otra e su igual e que los del porvenir nos
tengan por locos”.
221. 2.5. Arquitectura gótica en España
En la Segunda mitad del siglo se impuso el gótico
flamígero, al que en España se denomina estilo Hispano
flamenco o Reyes Católicos. La exuberancia
decorativa recuerda el horror vacui de la tradición
musulmana. El inventario de motivos es inagotable:
elementos heráldicos como el águila de San Juan, escudos,
reyes de armas, yugos y flechas; estatuas adosadas, bolas,
conchas, puntas de diamante, cadenas... En todo el edificio
la decoración es abundante, pero se concentra sobre
todo en las fachadas, decoradas como si fueran retablos.
Hay dos focos principales, uno en Burgos y otro en
Toledo.
222. 2.5. Arquitectura gótica en España
En Burgos trabajó el alemán Simón de Colonia autor de
la cartuja de Miraflores y de la capilla del
Condestable, en la catedral; la espléndida bóveda
estrellada de esta capilla impacta por su plementería calada
y sus nervios cairelados. Relacionado con el foco burgalés
está el colegio de San Gregorio de Valladolid.
224. Capilla del Condestable de la Catedral de
Burgos
Es la obra maestra de Juan de Colonia,
comenzada a finales de siglo, se caracteriza por
ser de planta octogonal y por su suntuosidad
decorativa, con tracería flamígera, escudos y
bóveda estrellada.
230. 2.5. Arquitectura gótica en España
El principal maestro del foco de Toledo fue el flamenco
Juan Guás que fusionó las formas flamencas flamígeras
con la tradición islámica (arcos mixtilíneos, por ejemplo).
Su obra más suntuosa es San Juan de los Reyes, hecha
con el mecenazgo de la reina Isabel. El piso superior del
claustro tiene arcos mixtilíneos y la iglesia, de una sola
nave, lleva la cabecera cuajada de decoración. También fue
obra de Guas el castillo de Manzanares el Real.
Enrique Egas diseñó el hospital de Santa Cruz de
Toledo, importando un modelo rectangular con cuatro
patios y capilla en el centro, de origen flamenco, que se
impuso en España.
232. San Juan de los Reyes de Toledo
De Juan Guas, el más
perfecto representante
del Gótico isabelino, de
nave única y muy ancha,
cubierta con bóvedas
complicadas de crucería
estrellada, con
abundante decoración
heráldica, a base de
monumentales escudos,
imágenes exentas y
temas epigráficos y
vegetales. Importante
también es su claustro,
con amplios arcos
divididos por un finísimo
mainel y decorados con
tracería flamígera.
237. Palacio del Duque del Infantado de
Guadalajara
Caracterizado
por su galería
flamígera
superior, sobre
cornisa de
mocárabes, de
ascendencia
árabe, y la
decoración de
puntas de
diamante del
muro, que es
ya
renacentista.
238. Catedral de Salamanca
Obra muy tardía, de principios
del XVI, comenzada por Juan
Gil de Hontañón y continuada
por otros maestros, como su
hijo Rodrigo, es de planta
rectangular, de tres naves y
capillas laterales, con bóvedas
estrelladas muy complejas y
recargadas con multitud de
nervios, que continúan en
forma de finos baquetones a
lo largo de los pilares, con
portadas muy recargadas
según el gusto del Gótico
flamígero, igual que la
decoración interna, con
galerías de tracería gótica,
escudos, medallones, etc.
240. Catedral de Segovia
Comenzada a principios de
siglo también según planos
de Juan Gil de Hontañón,
de tres naves más dos de
capillas, crucero que no
sobresale y bóvedas de un
recargamiento excesivo
con multitud de nervios
ornamentales; la cabecera,
con girola con capillas
radiales poligonales según
modelos góticos fue
realizada en la segunda
mitad del XVI por Rodrigo
Gil de Hontañón, cuando
ya se había extendido por
España el Plateresco.
241. 3. ESCULTURA GÓTICA
Con el renacer de las ciudades, la aparición de la
mentalidad burguesa, la difusión de la cultura en las
universidades y el desarrollo del pensamiento escolástico,
se planteó la búsqueda de una religiosidad más
humana que vemos reflejada en la escultura tanto en su
aspecto formal como iconográfico. En esta línea es
destacable la influencia de escritores religiosos como San
Bernardo (en sus Sermones habla de que el mundo no es
un lugar de pecado sino la obra bella de Dios), San
Francisco de Asís (recomienda el acercamiento del
hombre a la naturaleza) y de San Buenaventura
(destaca el valor de los sentimientos).
242. 3.1. Características de la escultura
La temática que más se repite es la religiosa. Aunque
se siguen representando los temas del arte románico, hay
preferencia por motivos nuevos como los evangélicos, los
marianos (de la Virgen María) y los hagiográficos (vidas de
santos), es decir, aquellos que permiten acercarse a los
valores humanos. Las fuentes de inspiración
iconográfica son, además de la Biblia, los Evangelios
apócrifos y la Leyenda Dorada de Santiago de Vorágine (una
colección de vidas de santos y de leyendas piadosas).
243. 3.1. Características de la escultura
Podemos resumir las características estilísticas en que
se busca la expresividad a través del naturalismo. Este
naturalismo se manifiesta en aspectos como:
Las figuras adquieren volumen y corporeidad, independientes
del marco. Sus proporciones varían de modo que unas veces
son figuras estilizadas y otras monumentales y plásticas.
Los pliegues de los ropajes muchas veces se adaptan a la
anatomía corporal con aire clásico, otras se acartonan en busca
de plasticidad, o bien se acumulan movidos a los pies de las
figuras.
Los rostros se individualizan y se tornan expresivos. Se vuelve
a representar los sentimientos de tristeza, alegría, dolor,
ternura…
Las posturas adquieren naturalidad, usándose el contraposto.
244. Planteamiento general
INSPIRACIÓN EN LAS APROXIMACIÓN A LA
FORMAS SENSIBLES BELLEZA FÍSICA
DE LA NATURALEZA, DESDE LA
QUE SON COMPRENSIBLES DIMENSIÓN ESPIRITUAL
PARA TODOS. DE SU ICONOGRAFÍA
PLANTEAMIENTO DE NUEVOS
PROBLEMAS: LA REPRESENTACIÓN
DEL ESPACIO, LA VOLUMETRÍA DE LAS
FIGURAS (SU ANATOMÍA) Y LA
RELACIÓN ENTRE
EL COLOR Y LA LUZ.
245. 3.2. Modalidades y ejemplos
Imágenes de devoción. Predominan las imágenes de Cristo
crucificado y de la Virgen con el Niño. En el primero se acentúa la
expresión dramática y las manifestaciones de dolor: va coronado de
espinas, tiene tres clavos y lleva un pequeño paño de pureza; el
cuerpo aparece arqueado por el peso y el dolor. La Virgen tiene
aspecto y gestos maternales. Sonríe y mira tiernamente al Niño o
juega con Él. Si está de pie su cuerpo se arquea en contraposto por
el peso de su hijo. A partir del siglo XIV, las figuras se hacen más
dramáticas y aparece el tema de la Piedad. Entre los ejemplos
destacados es imprescindible referirse al Calvario que Klaus Sluter
hizo para la Cartuja de Dijon; se ha perdido la imagen del
Crucificado pero se conserva el magistral Pozo de Moisés, que le
servía de basamento: va decorado con las figuras de los cuatro
profetas mayores, en un estilo monumental que anticipa a Miguel
Ángel. La Virgen Blanca de la Catedral de Toledo es uno de los
ejemplos más hermosos de tema mariano.
246. El tema de Cristo
Temas de la vida de Cristo. Se
prefieren escenas de la
Pasión, especialmente Cristo
crucificado. Se le representa
con la corona de espinas, el
paño de pureza (con pliegues),
un único clavo en ambos pies
que ya están juntos, abundantes
heridas (destaca la del costado)
Se destaca el peso del cuerpo de
Cristo que va desnudo. Nos da
imagen de dolor. Se suele
disponer, preferentemente, en el
tímpano y en el parteluz.
247. La Virgen con el Niño
Temas marianos o escenas de la
Virgen. Aunque en el románico tardío, la
Virgen María comienza a ser muy
representada, es en el gótico donde
adquiere pleno protagonismo. La Virgen
se esculpe sobre todo con el Niño. Se la
representa como madre, bella,
idealizada. Muestra una gran
humanización.
249. 3.2. Modalidades y ejemplos
Escultura monumental. Aparece sobre todo en los
portales de las fachadas, aunque la encontramos en otras
muchas partes del edificio como en las torres, los
pináculos, los pilares, las gárgolas, etc. La ubicación de la
escultura en las portadas mantiene básicamente la
distribución románica, con algunas modificaciones como,
por ejemplo, que las figuras de las arquivoltas se disponen
siguiendo la dirección de la rosca, que las esculturas van
sobre ménsula y bajo dosel, y que el tímpano se divide en
registros (en el siglo XIII en tres, en el XIV en cinco y en
el XV se tiende a la escena única):
251. La portada gótica
En el tímpano de las portadas
aparece en tema central.
Heredero del mundo románico
es muy frecuente el
Pantocrátor (Maiestas Domini
o Cristo en Majestad) y el
Tetramorfos.
También se esculpe a Cristo
como Juez enseñando las
llagas o la Muerte de la Virgen.
Como en el románico, la escena
principal suele completarse
en las arquivoltas con los
veinticuatro Ancianos del
Apocalipsis y el Grupo
Apostólico.
252. La portada gótica
El habitual parteluz de las
puertas góticas suele ser
ocupado por una "figura
amable" que da la
bienvenida al feligrés, como
Cristo Maestro o La
Virgen en Majestad. Se
simboliza la entrada al
paraíso y por ello es una
entrada amable.
Como en el románico, estas
fachadas pueden incorporar
elementos profanos pero
ocupando lugares
secundarios.
253. 3.2. Modalidades y ejemplos
Siglo XIII. La región de París, fue el primer hogar de la
escultura gótica, del que irradió a otras regiones de Francia y a
los demás países europeos. Las cuatro grandes catedrales
francesas de París, Chartres, Amiens y Reims tienen
excelentes portadas, varias de ellas dedicadas a la Virgen.
255. Pórtico Real de la Catedral de Chartes
En el Pórtico Real de la fachada occidental encontramos la transición entre el
Románico y el Gótico, como se puede apreciar por la mezcla de las características de
ambos estilos.
257. Portada del Crucero, el Juicio Final
En una de las portadas del crucero se representa el Juicio Final, con las jambas
decoradas con altorrelieves de santos y apóstoles, de gran belleza. Al lado opuesto del
crucero se representan distintas escenas de la vida de la Virgen (Tránsito, Asunción y
Coronación).
260. 3.2. Modalidades y ejemplos
En Amiens la imagen más importante es el Beau Dieu,
situado en la fachada principal, una figura todavía rígida, pero
llena de majestad y clasicismo. En la portada de la Virgen
Dorada, de finales del siglo, la estilizada figura de María del
parteluz, sonríe al Niño con dulzura.
267. 3.2. Modalidades y ejemplos
La catedral de Reims conserva un excelente conjunto
escultórico debido a varios maestros. Las esculturas más
interesantes son el grupo de la Anunciación, perteneciente al
llamado Maestro del ángel de la sonrisa. Otro maestro destacado
es el de las figuras antiguas, que se inspira en la escultura clásica
y el autor de la Visitación, en que la acusada diferencia de edad
entre la Virgen María y su prima Isabel pone de manifiesto el
humanismo gótico.
269. Portada de Reims, La Anunciación y La
Visitación de Reims
En este templo trabajó el que
se ha denominado "Maestro de
la Sonrisa" pues esculpió a sus
personajes con una marcada
tendencia a lo amable, a la
bondad. En Reims cabe resaltar
La Anunciación y La Visitación de
las jambas, del mismo autor y
de gran naturalismo.
272. 3.2. Modalidades y ejemplos
Alemania destaca por su tendencia expresionista, en obras
como el tímpano de la portada del Juicio Final de la catedral
de Bamberg. La catedral de Estrasburgo (ciudad que
formaba parte del Sacro Imperio alemán) tiene una escultura
más parecida a la francesa, como vemos en la Sinagoga, una
grácil figura con revoloteo de pliegues en la parte inferior, obra
de la escultora Sabina von Steinbach.
274. 3.2. Modalidades y ejemplos
Durante el siglo XIII hay en Castilla dos centros destacados,
Burgos y León. En la catedral de Burgos se conservan las dos
portadas del transepto y otra que da al claustro. La más
importante es la del Sarmental, cuyo tema (Cristo y
Tetramorfos) es románico, aunque las figuras de los
evangelistas que están escribiendo en sus pupitres son
naturalistas. Entre las esculturas del claustro son especialmente
hermosas las de Alfonso X el Sabio y su esposa.
277. Puerta del Sarmental de la Catedral de
Burgos
Está en el brazo derecho o
sur del transepto, es una
portada típica gótica, aunque
no termina de desprenderse
completamente del
hieratismo románico. En el
tímpano se esculpe a Cristo-
Doctor dictando su palabra
a los cuatro Evangelistas,
acompañados por el
Tetramorfos simbólico, más
naturalista. En el dintel
aparece el Apostolado y en
las arquivoltas ángeles y
ancianos músicos. En el
parteluz, aparece el Obispo
Don Mauricio.
278. Puerta de la Coronería de la Catedral de
Burgos
Ubicada en el lado norte del transepto,
muestra en sus jambas a los Apóstoles,
muy naturalistas, ángeles en las
arquivoltas y en el tímpano el Juicio
Final. En la parte superior del tímpano
figuran las insignias de la Pasión
sostenidas por ángeles y Cristo Juez,
acompañado de la Virgen y San Juan.
279. Puerta de la Coronería de la Catedral de
Burgos
280. 3.2. Modalidades y ejemplos
Los maestros de León funden la tradición y la novedad. La
portada del Juicio Final, en la fachada principal de la catedral,
es la obra maestra: el relieve del dintel, en el que aparecen
justos y pecadores, destaca por el virtuosismo y minuciosidad;
por su parte la Virgen Blanca del parteluz, considerada la
mejor escultura castellana de la época, es muy clásica.
282. Puerta del Juicio Final de la Catedral de
León
La Puerta del Juicio Final o
de la Virgen Blanca, ya de la
segunda mitad del siglo, es
la central de la fachada
occidental: en la parte
superior del tímpano, en la
que se hace patente un
cierto manierismo técnico,
aparece Cristo mostrando
las llagas y un ángel
portando los instrumentos
de la pasión; y en el dintel,
la parte más hermosa,
figura la separación de los
bienaventurados y los
condenados después que
San Miguel pese las almas.
284. Puerta del Juicio Final de la Catedral de
León
Es una típica Virgen gótica plena de belleza, alegría,
armonía, humanización y naturalismo.
285. 3.2. Modalidades y ejemplos
En el siglo XIV se decora la catedral de Toledo, con un
programa en el que la Virgen tiene la absoluta primacía: la
portada más importante es la puerta del Reloj. También
merece citarse la puerta Preciosa del claustro de la catedral
de Pamplona.
286. Puerta del Reloj de la Catedral de Toledo
De finales del siglo XIII es la lateral izquierda,
la del transepto norte, es la única obra
significativa del XIII de la Catedral de Toledo.
Sus arquivoltas aparecen repletas de prelados
y ángeles con libros, incensarios y candelas
bajo doseletes. En su tímpano se desarrollan,
en cuatro registros o franjas horizontales,
diversas escenas del Nuevo Testamento con
abundancia de detalles narrativos.
Su ciclo iconográfico comprende la
Anunciación, la Natividad, la Adoración de los
Reyes, la Degollación de los Inocentes, la
Huida a Egipto, la Circuncisión, Jesús entre
los doctores, la Presentación, el Bautismo, las
Bodas de Caná y, en el vértice, el Tránsito de
la Virgen.
288. 3.2. Modalidades y ejemplos
Los sepulcros pueden ser exentos o adosados bajo
arcosolio. Los exentos llevan sobre la tapa la imagen
yacente del difunto, como en un lecho; si es un sepulcro
matrimonial aparecen ambos cónyuges. Los personajes
están representados con los ojos abiertos o dormidos,
vestidos con ropas ceremoniales de su rango y con un
animal acostado a sus pies, un perro, si es la tumba de una
mujer, un el león si es la de un hombre. Los frentes del
sepulcro se decoran con escudos heráldicos y con otros
motivos figurativos: en el siglo XIII se prefiere representar
el cortejo fúnebre; a finales del XIII y en el XIV son
frecuentes las figuras de santos; desde final del siglo XIV
se pusieron de moda los plañideros encapuchados.
289. Los sepulcros
Otra manifestación escultórica
importante es el de los sepulcros
esculpidos que pueden ser de dos
tipos:
Adosados: de arcossolio.
Exentos: la cama funeraria está
separada del muro.
Se decoran los lados de la cama
funeraria, y ésta se apoya en figuras
animales. Sobre la cama funeraria ser
suele representar al fallecido en
posición yaciente y orante. Se
realizan por encargo de burgueses,
reyes y nobles. Se suelen encontrar
en las capillas.
290. 3.2. Modalidades y ejemplos
Uno de los mejores sepulcros del siglo XIII es el del
Infante Don Felipe en Villalcázar de Sirga, perteneciente
a la escuela burgalesa, la más importante de Europa. Del
siglo XIV es el del duque de Borgoña Felipe el Atrevido,
en Dijon, hecho por Klaus Sluter, el escultor de la corte
borgoñona, que puso de moda el tema de los
encapuchados. La obra maestra del siglo XV en España es
el de los reyes Juan II y su esposa en la Cartuja de
Miraflores, de Gil de Siloé.
295. 3.2. Modalidades y ejemplos
También es obra de Siloé uno de los mejores sepulcros
de arcosolio. En éstos el difunto puede aparecer yacente
pero también arrodillado, en actitud orante, o recostado.
Orando de rodillas sobre un reclinatorio está el Infante
Don Alfonso, obra de Siloé, en la Cartuja de Miraflores,
mientras el Doncel de Sigüenza, de Sebastián de
Almonacid, aparece recostado leyendo.
298. Sepulcro del Doncel de Sigüenza
Representa al caballero Martín Vázquez de Arce, muy original porque no representa al
difunto yaciente u orante, sino en actitud naturalista, leyendo ligeramente incorporado,
vestido con armadura de la Orden de Santiago, embutido en un gran nicho del muro
bajo un arco.
299. 3.2. Modalidades y ejemplos
Los retablos son conjuntos de tableros de madera
ensamblados, decorados con esculturas o pinturas, que se
colocan detrás del altar. Aunque surgieron en el siglo XIV,
la época de auge del retablo gótico fue el siglo XV, en
especial en los Países Bajos, Alemania y España. La
escultura de los retablos se talla en bulto redondo o en
relieve y se dora, es decir, se recubre con pan de oro. El
más grandioso y monumental de los retablos españoles
de este periodo es el de la catedral de Toledo, obra de
varios maestros. Mucho menor es el tríptico de
Covarrubias, que representa la Epifanía. Gil de Siloé hizo
el de la cartuja de Miraflores.
300. Retablo Mayor de la Catedral de Toledo
El Retablo Mayor de la Catedral de Toledo, en la
que intervinieron los principales escultores y
pintores de la época, asentado sobre un banco
con cinco relieves consta de cinco calles,
siendo la central también más ancha,
decoradas con escenas de la vida de Cristo y
de la Virgen; es una de las obras más
importantes del siglo XV, ya de transición al
Renacimiento en alguno de sus
compartimentos, como los atribuidos al
borgoñón Felipe Bigarny.
301. Retablo Mayor de la Cartuja de Miraflores
Obra en la que los efectos de
riqueza y barroquismo alcanzan
límites insospechados y en la que
Gil de Siloé sustituye el típico
retablo dividido en cuerpos y
calles por una original
organización a base de círculos
presidida por el Calvario y cuatro
escenas de la Pasión de Cristo.
302. 3.2. Modalidades y ejemplos
En el Gótico encontramos otras modalidades
escultóricas:
Las sillerías son conjuntos de sitiales para el coro, tallados
generalmente en madera y decorados con relieves en los
respaldos, brazos, doseles y misericordias. El maestro Rodrigo
Alemán, a finales del siglo XV, es el autor de la sillería baja de la
catedral de Toledo, que decoró con temas de la recién
terminada guerra de Granada.
Las puertas monumentales eran de bronce fundido. Las más
destacadas se hicieron en Italia, como las del baptisterio de la
catedral de Florencia, de Andrea Pisano.
303. Las sillerías de coro
También se decoran las sillerías de coro (madera de
nogal) con relieves. También los púlpitos (planta
poligonal).
306. 4. PINTURA GÓTICA
Debido a la estructura del templo gótico, que presenta
escasas superficies para la pintura mural, se desarrollaron
nuevos campos pictóricos en retablos, trípticos, vidrieras,
tapices, miniaturas, etc. La pintura de los siglos del Gótico
no es homogénea estilísticamente, sino diversa y
multiforme; se presenta como un arte en evolución
cronológica y con diferencias regionales. Por ello es más
correcto que hablar de pintura gótica, referirse a las
escuelas pictóricas de la época del Gótico.
307. 4.1. Características
Técnica y soportes. Para la tabla, que es el soporte
más utilizado, se utiliza la técnica del temple. La pintura
mural emplea el fresco seco sobre el muro enfoscado pero
tuvo poca importancia salvo en Italia y en las regiones
mediterráneas de la Corona de Aragón. Desde Flandes, en
el siglo XV, se difundió el óleo sobre tabla.
308. 4.1. Características
Rasgos de estilo. No hay un estilo definido, sino que
evoluciona desde una pintura puramente lineal, que imita
la vidriera, falta de espacio (muchas veces con fondos
dorados) y de colores planos y puros, hasta adquirir la
sensación de corporeidad y de volumen mediante la
matización cromática y la gradación de la luz y la sombra.
Asimismo se inicia la búsqueda del espacio pictórico con
formas de perspectiva rudimentarias, pero
progresivamente más correctas.
309. 4.1. Características
Se representan los mismos temas de la escultura, es
decir, los evangélicos, los marianos y los hagiográficos,
enfocados de forma narrativa. Para resaltar los valores
humanos, escenas y figuras buscan el naturalismo e
intentan expresar sentimientos y emociones, aunque
muchas veces pecan de ingenuidad.
310. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
Italia, una de las regiones más prósperas de la Europa
bajomedieval, fue la cuna, en el siglo XIV, de una
importante actividad pictórica, mural y sobre tabla,
trascendental para la evolución del arte occidental. A
estos maestros se les ha denominado primitivos, por
iniciar una tradición pictórica que desembocó en el
Renacimiento Su rasgo más característico es el
acercamiento directo a la realidad, quizás por influencia
de la religiosidad franciscana. Forman dos escuelas, una
en Florencia y otra en Siena.
311. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
La Escuela de Florencia fue iniciada, a finales del siglo XIII,
por Cimabue (Madonna entronizada, Uffizi), un pintor de
estilo aún muy bizantino, maestro de Giotto.
313. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
Giotto ha sido valorado como el padre de la pintura moderna por sus
aportaciones a la plasticidad pictórica. Conocemos de su vida
lo que nos cuenta Vasari, que lo presenta como el primer pintor con
prestigio social y bien pagado, considerado un renovador por sus
contemporáneos. Las figuras que pinta Giotto son sólidas y
monumentales, de apariencia pesada. Solía colocar personajes en
primer plano, vueltos de espaldas, para que destaque su masa
corpórea y sirvan de referencia espacial. Intensifica los sentimientos
en un afán de resaltar la humanidad de los personajes: para ello
confiere dramatismo al ambiente y busca la unidad psicológica
mediante gestos teatrales. Ambienta las escenas en marcos reales
con paisajes o ámbitos urbanos pero estereotipados como si se
tratara de un decorado teatral. La luz actúa con una doble función,
plástica para acentuar la sensación de espacio, y expresiva para dar
unidad a las composiciones.
314. Giotto
El pasado clásico: el estímulo
constante de la CULTURA CLÁSICA
en Italia
El contexto: la expansión
La tradición: es
urbana, económica y
discípulo de CIMABUE
cultural de FLORENCIA
(tradición bizantina)
La burguesía: un nuevo
GIOTTO cliente de
mentalidad más abierta.
El reto del artista: el problema
de la
REPRESENTACIÓN DEL
MUNDO VISIBLE
315. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
A Giotto pertenecen la Madonna entronizada de los Uffizi y
el Crucificado de Santa María Novella, ambos en tabla, y las
pinturas murales de Asís, sobre la vida de San Francisco. Su
obra maestra son los frescos de la capilla Scrovegni, en la
Arena de Padua, con escenas tan conocidas como Abrazo
ante la Puerta Dorada, Llanto sobre Cristo Muerto y el
Prendimiento.
316. Virgen en el Trono, de Giotto
El retablo para la iglesia florentina de Ognissanti
evidencia un alejamiento de la representación
tradicional de la Virgen en majestad. El trono está
plasmado como marco arquitectónico y el ropaje
de la Virgen no simboliza ya lo celestial, puesto que
su belleza y valor le aportan un toque humano. No
obstante, la exagerada dimensión e la figura
humana la presenta como una fuerza superior
reinante.
318. Iglesia San Francisco de Asís, San Francisco
bendice a los pájaros, de Giotto
Los frescos sobre la vida de San Francisco son
plenamente naturalistas, las figuras cobran
volumen y las escenas con pasajes de la vida del
santo perspectiva, disponiéndose en
profundidad en diversos planos en un marco
paisajístico y arquitectónico.
“Camino de Bevagna, el Beato
Francisco predicó a los pájaros, y‚
éstos exultantes, extendían los cuellos
abrían los picos y le picoteaban la
túnica; y mientras lo veían, los
compañeros le esperaban en el
camino”.
319. Iglesia San Francisco de Asís, Éxtasis de
San Francisco, de Giotto
Los frescos sobre la vida de San
Francisco son plenamente naturalistas,
las figuras cobran volumen y las
escenas con pasajes de la vida del
santo perspectiva, disponiéndose en
profundidad en diversos planos en un
marco paisajístico y arquitectónico.
320. Iglesia San Francisco de Asís, San Francisco
recibiendo el manto, de Giotto
Los frescos sobre la vida
de San Francisco son
plenamente naturalistas,
las figuras cobran
volumen y las escenas
con pasajes de la vida del
santo perspectiva,
disponiéndose en
profundidad en diversos
planos en un marco
paisajístico y
arquitectónico.
321. Iglesia de San Francisco de Asís, Expulsión
de los diablos de Arezzo, de Giotto
Este fresco forma parte del ciclo de
28 escenas sobre la Vida de San
Francisco. Durante la guerra civil en
Arezzo, el santo vio demonios sobre
la ciudad y pidió al hermano
franciscano Silvestre que los
expulsara. Gracias a su oración
perseverante y confiada obtuvo la
fuerza necesaria para conseguirlo. La
obra de Giotto se caracteriza por
una representación muy expresiva de
los sentimientos y del lugar.
322. Frescos de la Capilla de los Scrovegni de
Padua
Dedicados a
Jesucristo, la
Virgen y San
Joaquín y Santa
Ana; más
perfectos son
considerados
como el máximo
exponente de la
madurez artística
de Giotto, que ya
ha encontrado
su auténtico
estilo.
326. Frescos de la Capilla de los Scrovegni de
Padua, Huída a Egipto, de Giotto
Estudio de la luz
(efectos de
claroscuro a través
de variaciones
Escorzos
cromáticas)
Mayor interés por Figuras sólidas y
las figuras que por pesadas
los paisajes
Aumento de
expresividad,
aunque rostros aún
se parecen mucho
entre ellos
327. Frescos de la Capilla de los Scrovegni de
Padua, El beso de Judas, de Giotto
328. Frescos de la Capilla de los Scrovegni de
Padua, Lamentación sobre Cristo Muerto
Las narraciones de Giotto
se caracterizan por la
suavidad del movimiento.
En esta escena utiliza
además la posibilidad
amplificadora de los
distintos sentimientos
expresados: desde el
recogimiento en sí mismas
de las mujeres del primer
plano, hasta la excitación
extrema de Juan. Incluso el
paisaje desierto con el
árbol muerto se acomoda
al sentimiento de las
apenadas figuras, cuya
ordenación en el espacio
se estructura en tres
niveles.
329. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
Escuela de Siena. Mientras Florencia se encaminaba hacia el
Renacimiento a través de los hallazgos de Giotto, Siena
permaneció más ligada al Gótico. Se mantuvo viva la tradición
bizantina y predominó una concepción lineal a base de un
dibujo caligráfico y sinuoso, que se detiene en el detalle y en lo
anecdótico. Los pintores de Siena buscan lo delicado y lo
agradable a través de la estilización, de la expresión soñadora
y del colorido preciosista. La plasticidad queda en un segundo
plano.
330. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
El creador de la escuela fue Duccio, autor de la Maestá de la
catedral de Siena, pero el principal representante es Simone
Martini. En la Anunciación, del museo florentino de los Uffici,
podemos admirar su estilo de suaves líneas onduladas con el
que crea personajes esbeltos, de rostros ovalados, boca
pequeña y ojos oblicuos.
331. Gran Maestà, de Duccio
Gran retablo pintado por
ambas caras, la parte frontal
muestra a la Virgen
entronizada y rodeada de un
gran número de ángeles,
santos y apóstoles,
levemente naturalistas.
332. Madonna Rucellai, de Duccio
Se trata de un retablo que muestra a la Virgen
sentada en el trono con el Niño Jesús, con un
fondo de oro de tradición bizantina y flanqueada
por ángeles de rodillas.
333. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
Los hermanos Lorenzetti mezclan las características
sienesas con la influencia florentina en obras como los frescos
alegóricos del Buen y Mal Gobierno, en el Palacio público de
Siena.
336. 4.2. Pintura ítalo-gótica o del Trecento
(siglo XIV)
España recibió la influencia de ambas escuelas italianas.
En el Museo del Prado está el retablo del arzobispo
Sancho de Rojas, anónimo, de tradición florentina. Pero
fue más importante el influjo de los pintores de Siena, que
se manifiesta sobre todo en la Corona de Aragón, en
obras como el retablo de Tobed, de los Hermanos Serra.