2. Érase una vez un niño que nació en Zundert, un municipio de Holanda. Se llamaba Vincent Van Gogh. Creció allí y se convirtió en un fabuloso pintor.
3. Un día Van Gogh decidió irse a otro lugar, y ¿sabéis dónde fue? A una ciudad preciosa llamada Arles, en Francia, donde siguió pintando, realizando cuadros preciosos del lugar al que había llegado. A R L E S
5. Decoró su habitación como él quiso. Como le gustó tanto, decidió hacer un cuadro.
6. Van Gogh se quedó allí bastante tiempo. ¡Aquello le encantaba! Todas las mañanas se levantaba y paseaba. Le fascinaba pintar paisajes con árboles, montañas, el cielo… pero había una cosa que era lo que más le gustaba pintar…
8. Sus cuadros siempre llevaban el color amarillo. Le encantaba pintar paisajes, pero también deseaba que llegara el atardecer para poder pintar cuadros de noche...
9. Gracias a nuestro gran amigo y pintor Vincent Van Gogh, tenemos un montón de cuadros preciosos que pintó para todos nosotros… y colorín colorado, el cuento de Van Gogh se ha terminado.