2. Es un método para investigar sobre uno mismo y sobre los demás, una
potente herramienta para el desarrollo personal, psicológico y espiritual.
Se compone de 9 arquetipos o estilos básicos de personalidad (los
eneatipos), muy diferentes entre si y en donde ninguno es mejor ni peor que
otro; cada tipo tiene sus ventajas y desventajas, sus fuerzas y debilidades
únicas. Al identificarnos con alguno de estos 9 tipos podemos ampliar
nuestro conocimiento sobre nosotros mismos y lo más
importante, aprender cual es el mejor camino para sentirnos mejor (y ser
más felices) en nuestra vida. Además nos puede ayudar a comprender más a
los demás al entender finalmente sus motivaciones (muchas veces diferentes
a las nuestras), un aspecto fundamental para las relaciones de todo tipo.
No te limites a averiguar quién eres: ¡descubre quién puedes llegar a ser!
¿Qué es el Eneagrama?
3.
4. Tipo 1: El reformador
El reformador. El tipo idealista de sólidos
principios, personas que se basan mucho en sus
valores personales como motor de vida y con
un fuerte sentido del bien y del mal. Bien
organizados, ordenados y meticulosos, tratan de
mantener valores elevados, pero pueden resultar
críticos y perfeccionistas. Si consiguen flexibilizar
estos valores y su visión del mundo (y de ellos
mismos) aprenden a ser más
naturales, felices, éticos y sabios.
5. Tipo 2: El ayudador
El ayudador. Personas orientadas a los demás
cuyo motor de vida es dar, escuchar, regalar,
apoyar, alentar… El problema de estas
personas es que pueden llegar a confundir
prioridades vitales y poner a los demás por
delante de ellas (con todas las consecuencias
negativas que esto pueda tener).
Paradójicamente en cuanto aprenden a
pensar más en si mismos se vuelve más
altruistas, generosos y comprensivos.
6. Tipo 3: El Triunfador
El triunfador. Personas orientadas al éxito,
adaptables y constantemente motivadas para
conseguir sus metas. El problema que pueden
tener es que se queden en ese halo de éxito y se
preocupen demasiado de su imagen sin tener en
cuenta otros aspectos de su vida ni profundizar
en si mismos. Paradójicamente cuando están
dispuestos a perder y a mostrar su cara más
vulnerable aprenden a triunfar de verdad en sus
vidas, son más auténticos, se aceptan e inspiran a
otras personas.
7. Tipo 4: El individualista
El romántico. Personas orientadas a si mismas,
que buscan sentirse especiales y diferentes de los
demás. Son muy introspectivas, sensibles y
emocionales. El problemas es que muchas veces
pueden ahogarse en si mismas, volviéndose
inseguras, susceptibles, aislándose de los demás
y creando mucha ansiedad. Si aprenden a ser
“normales”, a sentir “normal”, a mirar su lugar en
el mundo con “normalidad” son capaces de
inspirarse, de ganar identidad y ser más creativos,
capaces de renovarse y transformar sus
experiencias.
8. Tipo 5: El investigador
El experto. El tipo cerebral, curioso y vehemente.
Le apasiona aprender y sentirse un experto. El
problema que pueden llegar a tener es que se
refugien en el cerebro dejando de lado otras
áreas importantes de sus vida, pueden volverse
obsesivos, excéntricos y aislarse de los demás. Si
aprenden a estar en contacto con sus emociones,
instintos y su cuerpo como un todo su capacidad
de innovación, su curiosidad y su visión de la vida
se equilibra y mejora.
9. Tipo 6: El leal
El leal. El tipo comprometido, orientado a la
seguridad. Necesitan redes de seguridad para
sentirse seguros, ser leales a personas,
relaciones, ideas o estructuras. Este hecho les
puede volver muy indecisos, evasivos,
inseguros y contradictorios. Paradójicamente
en cuanto aprenden a ser más independientes
y autónomos crean redes más fuertes, ganan
en seguridad y se vuelven personas mucho
más estables.
10. Tipo 7: El entusiasta
El entusiasta. El tipo productivo y ajetreado.
Son versátiles, optimistas y espontáneos;
también podrían abarcar demasiado, ser
desorganizados, dispersos e indisciplinados.
Constantemente buscan experiencias nuevas y
estimulantes, pero la actividad continua los
aturde y agota. En su mejor aspecto, centran
sus dotes en objetivos dignos, son
alegres, muy capacitados y muy agradecidos.
11. Tipo 8: El desafiador
El líder. Personas protectoras y muy asertivas. De
todo el eneagrama es el que más disfruta del
liderazgo, este estilo excesivo e intimidante
puede llevarle a problemas de aislamiento con los
demás al no poder conectar, además pueden caer
en la agresividad y el autoritarismo cuando las
cosas no son como ellos quieren. Si aprenden a
ser más vulnerables y a dejar a los demás que
sean independientes, se vuelven heroicos
, magnánimos y a veces históricamente
grandiosos.
12. Tipo 9: El pacificador
El conciliador. Orientadas a la tranquilidad y a la paz
mental, son personas comprensivas, diplomáticas y
pacificadoras. El problema es que muchas veces
existen situaciones estresantes que no son capaces
de afrontar de manera
efectiva, desconectando, evadiéndose o cediendo
con tal de conservar su tranquilidad. En cuanto
aprenden a ponerse retos, a ser conscientes de los
estresores de su vida y de la importancia del
conflicto como parte del crecimiento se vuelven más
profundos y mejores mediadores.
13. Espero y deseo que te haya resultado interesante esta
primera presentación de introducción al Eneagrama.
¿Quieres profundizar más en el Eneagrama? Te invito a que
leas la presentación que he preparado para ti….
¿Te gustaría conocer cuál es tu eneatipo para poder
emprender con éxito tu camino hacia el autoconocimiento?
Envíame un email a paloma@confiaencoaching.com y te
ayudaré gustosamente.
¡Muchas gracias!