Presentación desarrollada por el Dr. Javier Contreras, alergólogo del Servicio de Alergia del Hospital Universitario La Paz, incluida en el Curso para Educadores en asma desarrollado en dicho Hospital de Madrid en Noviembre del 2009.
Manejo del asma centrado en el paciente (Javier Contreras)
1. Javier Contreras Servicio de Alergia Grupo Educasma Hospital Universitario La Paz MANEJO DEL ASMA CENTRADO EN EL PACIENTE
2. “ Generalmente las personas se convencen más por las razones que descubren ellas mismas , que por las que les explican los demás” Blaise Pascal (1623-1662) AUTOCUIDADOS GUIADOS
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5. HISTORIA DEL MODELO CENTRADO EN EL PACIENTE Baling Entrevista que incluye enfermedad, circunstancias vitales y psicológicas de los pacientes Ian McWhinney Después de la entrevista con el paciente debería poder responder a las siguientes preguntas: ¿por qué vino el paciente ahora?, ¿qué significado tienen sus quejas?, ¿cómo lo percibe el mismo el paciente? Levenstein Las consultas son más efectivas cuando se logra conocer las expectativas y preocupaciones del paciente Universidad de Western Ontario Definición de principios, procesos, contexto y desarrollo académico del método centrado en el paciente
- el que el médico era considerado el experto en los problemas sanitarios y decía al paciente de una forma más o menos paternal lo que debía o no debía hacer. Este modelo se equipara frecuentemente con la entrevista clínica centrada en la enfermedad, aunque sin duda esto no siempre ha sido así. Baste recordar a médicos que con una actitud posiblemente paternalista hacia un paciente, no sólo le decían lo que tenía o no que hacer en relación a su enfermedad, sino que le daba recomendaciones de todo tipo (de forma de vida, de relacionarse, educativas, etc), a menudo después de que el paciente o su familia se lo solicitase. Al fin y al cabo, el médico, especialmente hasta hace unos años y sobre todo en el medio rural, ha sido un referente. En el modelo paternalista se considera que la negociación con el paciente no suele existir. Pero con frecuencia eso es así porque médico y paciente asumen que es el médico el que está más capacitado, en cierta medida desde su atalaya, para decir lo que es mejor en un momento determinado. Y el paciente, si hay concordancia, lo acepta. El modelo paternalista es reflejo también de una época histórica en que quizá esa forma de relación predominaba en múltiples ámbitos de la vida.
- el que el médico era considerado el experto en los problemas sanitarios y decía al paciente de una forma más o menos paternal lo que debía o no debía hacer. Este modelo se equipara frecuentemente con la entrevista clínica centrada en la enfermedad, aunque sin duda esto no siempre ha sido así. Baste recordar a médicos que con una actitud posiblemente paternalista hacia un paciente, no sólo le decían lo que tenía o no que hacer en relación a su enfermedad, sino que le daba recomendaciones de todo tipo (de forma de vida, de relacionarse, educativas, etc), a menudo después de que el paciente o su familia se lo solicitase. Al fin y al cabo, el médico, especialmente hasta hace unos años y sobre todo en el medio rural, ha sido un referente. En el modelo paternalista se considera que la negociación con el paciente no suele existir. Pero con frecuencia eso es así porque médico y paciente asumen que es el médico el que está más capacitado, en cierta medida desde su atalaya, para decir lo que es mejor en un momento determinado. Y el paciente, si hay concordancia, lo acepta. El modelo paternalista es reflejo también de una época histórica en que quizá esa forma de relación predominaba en múltiples ámbitos de la vida.
Actualmente, es frecuente que parte de la población demande otro tipo de relación, en la que el paciente tiene un papel más activo e igualitario. En este modelo, se pone énfasis en considerar al paciente como un todo, valorando no sólo su enfermedad o problema de salud más o menos concreto, sino sus sentimientos, temores, opiniones, creencias, expectativas, repercusiones de la enfermedad en su vida diaria, etc. Y además de cómo un todo, como un "igual", con el que se comparte e intercambia información y decisiones al mismo nivel. El médico sería el poseedor de unos conocimientos y habilidades en su área y el paciente el conocedor de sus expectativas, sentimientos, preferencias, forma de vida, etc. Aparte de estos modelos concretos, la tendencia (por no decir la situación actual) en nuestro medio es tener en cuenta no sólo a la enfermedad sino sobre todo al enfermo, a la persona que tenemos enfrente con su motivo de consulta, con todo lo que le rodea, le influye y condiciona. Y quizá nunca haya dejado de ser así para un importante número de médicos. Aunque, según los resultados de algunos trabajos publicados en España, no parece ser la forma de relación médico-paciente más habitual como sería deseable.