2. ¿QUE ES DIVERSIDAD
CULTURAL?
La diversidad de culturas se refiere al
grado de diversidad y variación
cultural, tanto a nivel mundial como
en ciertas áreas, en las que existe
interacción de diferentes culturas
coexistentes.
Muchos estados y organizaciones
consideran que la diversidad de
culturas es parte del patrimonio
común de la humanidad y tienen
políticas o actitudes favorables a
ella. Las acciones en favor de la
diversidad cultural usualmente
comprenden la preservación y
promoción de culturas existentes.
3. El deber de los Estados es tomar medidas
para preservar y promover la diversidad
cultural, servir de base para una mayor
cooperación internacional en el ejercicio
de ese derecho y, mediante la creación
de obligaciones, aumentar la
transparencia de las políticas culturales, sus
objetivos y su desarrollo.
4. Esto debía servir asimismo de
punto de referencia a distintas
sociedades que se ocupan de
negociaciones de comercio
internacional. Pondría de
relieve la necesidad de los
gobiernos de disponer de un
margen normativo para
preservar y promover la
diversidad cultural mediante el
establecimiento de derechos
y obligaciones, con
disposiciones obligatorias
sobre medidas relativas a la
creación, producción,
distribución, comunicación,
exhibición y venta de
contenido cultural.
5. También vendría a colmar el vacío que existe
actualmente, desde el punto de vista de la
diversidad cultural, en la normativa internacional
relativa a la cooperación y a los derechos y
obligaciones en materia de políticas culturales
internacionales. Ayudaría, asimismo, a los países a
retener la capacidad de promover políticas
culturales necesarias en otros foros internacionales,
en particular en acuerdo paralelos.
6. Actualmente es de reconocimiento general que la
diversidad cultural forma parte del patrimonio
común de la humanidad, y que la producción y
disponibilidad de una diversidad de bienes y
servicios culturales procedentes de fuentes
nacionales y extranjeras introducen externalidades
positivas, es decir, ventajas sociales y culturales
que superan el valor puramente comercial de esos
bienes y servicios.
7. UNESCO
la Declaración universal de la UNESCO sobre la
diversidad cultural, por ejemplo, se reconoce que
los bienes y servicios culturales no deben tratarse
simplemente como productos básicos o bienes de
consumo.