Este documento cuenta la historia de Abandonado, un perro de color melón que fue abandonado por su familia original debido a su color. Abandonado tuvo una vida difícil en la calle hasta que conoció a Tomás, un niño de cinco años que se hizo amigo de él a pesar de su color. Tomás llevó a Abandonado a su casa, donde fue bien recibido por la familia de Tomás y pasó a llamarse Meloncete.