El documento describe escenas del Juicio Final según está representado en la iglesia de Saint Foy de Conques. Cristo preside el juicio desde un trono celestial y dicta sentencias, enviando a los justos al cielo y a los pecadores al infierno. En el cielo reina la paz entre santos y mártires, mientras que en el infierno los condenados sufren tormentos eternos diseñados según sus pecados.