El documento describe el desarrollo de los órganos de los sentidos en el embrión y feto, incluyendo el oído, ojo y piel. Explica que el oído se desarrolla a partir de tres partes y está completamente formado al final del sexto mes de gestación, aunque el feto puede percibir sonidos a partir de la semana 16. El ojo empieza a desarrollarse en la cuarta semana como vesículas ópticas y está sensibilizado a la luz hacia el cuarto mes, aunque distingue la fuente
2. OIDO
En el adulto forma una unidad anatómica que
sirve para la audición como para el equilibrio.
En el embrión se desarrolla a partir de 3 partes
distintas:
Oído externo: órgano que capta los sonidos.
Oído medio: conductor del sonido.
Oído interno: convierte las ondas sonoras en
impulsos nerviosos y registra los cambios en el
equilibrio.
3. OÍDO INTERNO
El desarrollo es aproximadamente a los 22 días.
Como un engrosamiento en el rombencéfalo =
placodas óticas.
Durante el desarrollo posterior cada vesícula se
dividen en diferentes estructuras formando el
LABERINTO MEMBRANOSO.
4. OIDO MEDIO
Consiste en la cavidad timpánica y el conducto
auditivo.
Deriva de la primera bolsa faríngea.
El conducto auditivo se extiende entre la cavidad
timpánica y la nasofaringe.
Los huesecillos que transfieren el sonido desde la
membrana timpánica hasta la ventana oval,
derivan del primer 8MARTILLO Y YUNQUE) y el
segundo (ESTRIBO) arcos faríngeos.
Conducto auditivo externo se desarrolla de la
primera hendidura faríngea.
6. • Desde el final del sexto mes, el oído ya está en su sitio y
completamente formado. Sin embargo, el feto ya puede percibir
sonidos procedentes de la madre o del exterior desde algunas
semanas antes, concretamente desde la 16ª, y reacciona a ellos
acelerando el ritmo cardíaco y la frecuencia de los movimientos
corporales.
• Qué oye
• El oído interno está totalmente desarrollado a partir de la mitad del
embarazo y el feto puede percibir los latidos del corazón de su
madre, los ruidos intestinales durante la digestión, el paso de la
sangre a través del cordón umbilical.
• De hecho, se sabe que dentro del útero se produce un continuo
sonido rítmico, similar al del agua fluyendo, mezclado con el ruido
del aire que pasa por los pulmones de la madre. Al final del sexto
mes es sensible a los sonidos externos y lo manifiesta mediante
movimientos: se sobresalta con los portazos, se agita o se calma
según la música que escucha su madre.
• Se sabe que el feto prefiere la música suave y melódica. Por el
contrario, rechaza la música con estridencias y a volumen elevado
7. OJO
Los ojos empiezan a desarrollarse como vesícula
ópticas a cada lado del prosencéfalo al final de la 4ta
sem
Las vesículas ópticas entran en contacto con el
ectodermo superficial e inducen la formación del
cristalino.
Cuando la vesícula óptica comienza a invaginarse para
formar las capas pigmentada y neutral de la retina, la
placoda cristaliniana se invagina para formar la
vesícula del cristalino.
Las fibras nerviosas del ojo también recorren este
surco para llegar hasta las áreas ópticas del cerebro.
8. CONTINUA…
La córnea esta formada por:
Una capa de ectodermo superficial
El estroma que es continuo con la
esclerótica.
Una capa epitelial que rodea la cámara
anterior.
9. CONTINUA…
El desarrollo de los párpados es independiente del de los ojos: a la octava
semana, los párpados han crecido tanto que se han sellado, recubriendo los
ojos, y a través de ellos solo se aprecia un pigmento negro: las retinas. El
feto aún no ve, pero se sabe que sus ojos se mueven cuando duerme o
cambia de posición.
Al sexto mes de embarazo, sus párpados empiezan a separarse y al
séptimo ya los abre por completo, ya que en este momento el globo ocular
ya tiene su estructura definitiva. En el octavo mes es sensible a la luz, lo
que significa que sus pupilas se contraen o dilatan dependiendo de la
intensidad lumínica, y también abre los ojos cuando está despierto y los
cierra cuando está dormido (la mayor parte del tiempo).
Qué ve
Hacia el cuarto mes de gestación sus ojos muestran cierta sensibilidad a
la luz. Puede apreciar si un fuerte estímulo luminoso (el sol, por ejemplo)
atraviesa la pared uterina y el líquido amniótico y reacciona cambiando de
posición para protegerse de la luz cuando le molesta. Entre las semanas
30ª y 34ª sus pupilas ya se contraen y se dilatan, y distingue de dónde
procede la luz