El documento discute cuatro nombres que se le dan al Príncipe de la Paz en Isaías, incluyendo Consejero Maravilloso, Príncipe de la Paz, Dios Guerrero y Padre Perpetuo. Explica que la paz cristiana proviene de Jesucristo, quien reconcilió a la humanidad con Dios a través de su muerte y resurrección.