1. Trabajo de imagen I
Por Juan Pablo Sepúlveda Posso
Docente: Luis Orcasitas
Universidad Pontificia Bolivariana
2013
2. Arte románico
El periodo románico del arte fue un movimiento surgido en Europa alrededor de
los siglos XI, XII y parte del XIII, en plena alta edad media. El arte románico fue un
estilo predominantemente cristiano, que recogió tanto las tradiciones como las
técnicas de distintos periodos y lugares de la temprana edad media, como
herencia de las sociedades romanas, prerrománicas, bizantinas, germánicas y
árabes.
Es considerado que el periodo románico del arte no surgió específicamente en un
país de la edad media, sino que se fue originando de manera paulatina y
prácticamente simultanea en países como Alemania, Francia, Italia y España; y
aunque en cada uno de estos sitios fue desarrollado de manera particular y con
algunas características propias, se fue popularizando al tratar de una temática en
específico y se terminó convirtiendo en un estilo internacional en el marco
europeo.
Siendo un movimiento surgido en plena edad media, antes del renacimiento, fue
una consecuencia inmediata a la prosperidad material que se veía en los feudos
de esta época, y se vio manifestado en la construcción de edificios –la mayoría
religiosos- como las iglesias.
Se vivía en un contexto donde las clases sociales estaban completamente
marcadas, y el dinero estaba distribuido de manera que la iglesia y los nobles
poseían la mayor cantidad del mismo. La iglesia estaba en uno de sus topes de
credibilidad e influencia como institución, y esto valió un creciente fenómeno de
relaciones entre religiosos y nobles, reyes, obispos y abades. Dichas relaciones,
que generalmente se daban por el poder, la influencia, el dinero y la religión,
impulsaron la edificación de grandes templos, construidos en la mayoría de los
casos por la mano de obra y los impuestos de los aldeanos y los campesinos.
En esta época, fuera de los trabajos manuales y del campo, había una gran
tendencia por profesiones como las de arquitectos, picapedreros y pintores, lo cual
impulsó que mucha gente tuviera el protagonismo tanto en la construcción como
en la decoración y adecuación de las estructuras que se edificaban y que servían
como punto de reunión de una fe que estaba en el pedestal de la gente.
Hay que tener en cuenta que la época era eminentemente religiosa, y toda la
gente tendía a considerar la religión como una de las cosas más importantes de
sus vida, por la influencia enorme que la iglesia ejercía y el recién oscurantismo
3. por el que la humanidad acababa de pasar. No había aún renacimiento, ni
explosión en grandes descubrimientos ni la llegada a América, por lo que la vida
en Europa se centraba en los feudos y reinos, bajo la dominación de clérigos y
nobles. También hay que mencionar las cruzadas, las cuales se llevaban a los
ejércitos a oriente y fomentaba el sentimiento nacional en torno al religioso. La
religión católica era la bandera de estos pueblos.
Dicho esto, y teniendo en cuenta que el arte de una época siempre representa
todos los aspectos culturales que el pueblo de dicha época está viviendo, el arte
románico fue sobre todo un arte religioso que reflejó completamente los valores de
la sociedad feudal cristiana y guerrera. En la arquitectura se veían construcciones
bastante austeras y oscuras, lo que se puede considerar como una representación
del pensamiento de que Dios era un Dios justiciero combatiente, y no uno cercano
al pueblo y que perdonara fácilmente.
El término “románico”, como concepto que definió un estilo artístico, lo empezó
usando Charles de Gerville alrededor de 1820 (muchos años después de la
mencionada manifestación artística), incluyendo en este término todo el arte que
se realizó anterior al estilo gótico y posterior a la caída del imperio romano,
principalmente en la alta edad media, luego del siglo X. Se puede considerar que
esta palabra se acuñó a esta época por la herencia del lenguaje, en el que las
lenguas románicas fueron las sucesoras del latín.
Pintura al fresco en la época rómanica.
Como se mencionó anteriormente, el arte románico estuvo principalmente
enfocado a la religión, y es muy difícil pensar en una iglesia de la edad media que
no estuviera pintada, tanto en el interior como, en ocasiones, también en sus
exteriores. Hoy en día, por el paso del tiempo, ciertas de estas obras se han ido
perdiendo, aunque otras se han sabido conservar para su estudio en la actualidad.
Las paredes en la época románica se pintaban con la técnica del fresco, mediante
colores acuosos sobre una pared húmeda preparada con varias capas de cal y
arena fina. Cada una de estas capas absorbía el color, y al secarse, adquirían la
solidez de la piedra. Pintar al fresco exigía una gran rapidez de ejecución y
4. además no había forma de corregir o de rectificación. Se estima que los pintores
disponían de alrededor de siete horas para poder realizar un tramo de pintura.
Algunas características de la pintura románica:
- El estilo es esquemático y lineal, alejándose de la realidad naturista.
- Se puede observar que en muchas ocasiones los rostros son muy
parecidos unos a otros cuando fueron pintados por el mismo maestro.
- Las pinturas románicas carecen de perspectivas y fondos, además de
líneas de fuga.
- Se pueden encontrar muchas imperfecciones, bien sea por la rapidez en la
que las obras fueron realizadas o porque la filosofía de la época dictaba
que el hombre es imperfecto, y por lo tanto se debía representar como tal
en algunas ocasiones.
- El color es sumamente reducido, se usa principalmente el ocre-amarillo,
rojo, negro, blanco; así, un tono más oscuro indicará sombra y uno más
claro indicará luz.
- La figura del ser humano tiene una presencia constante y la de Dios da fe a
la teoría de que el hombre fue hecho “a su imagen y semejanza”.
- El desnudo no es considerado como algo bello o estético, y en el caso de
que se representara por ejemplo a Adán y Eva, u otra escena que tuviera
que implicar necesariamente el desnudo, se tapaban sus partes con una
hoja de parra o simplemente con un cruce de piernas. El vestido, en
cambio, otorgaba dignidad y riqueza, y se usaba para distinguir entre clases
sociales.
- Es difícil encontrar a los cuerpos pintados en la pintura románica sintiendo,
pues se los encuentra más actuando.
Pantócrator de sant Climent de Taüll
El pantócrator del ábside de Sant Climent de Taüll es considerado una de las
obras maestras en la pintura románica. Su datación corresponde, según
estimaciones, a la fecha en la que el templo fue construido, el 10 de diciembre de
5. 1123, tal como aparece en una inscripción que se haya en una columna de la
edificación.
El ábside, que es el espacio más importante de la iglesia , al ser el lugar donde se
manifiesta el poder absoluto y completo de la divinidad, está representada la
“Maiestas Domini” (Cristo en majestad) en medio de ángeles portadores de
algunos símbolos, y se eleva sobre el colegio apostólico y la Virgen, que están
dispuestos en un friso
seguido.
Cristo aparece sentado,
inscrito en una
mandorla mística, que
es un símbolo que
representa su gloria y
majestad. Sus pies
están sobre una
semiesfera con algunas
runas vegetales que se
supone que representa
la tierra. Con la mano
izquerda está sujetando
“El libro de la Vida y la
Sabiduría”, en el que se
puede leer “Ego sum
lux mundi”, que significa
“Yo soy la luz del
mundo”; mientras que la
mano derecha la tiene levantada y haciendo la señal de bendecir. Esto, en la obra,
indica el carácter divino del personaje en cuestión, y resalta su condición de Dios
supremo e omnipotente.
Dentro del círculo divino se puede observar la primera y la última letra del alfabeto
griego (alfa y omega) como símbolos del principio y el fin de todas las cosas. En
los tramos de la bóveda inmediata al ápside se observa la Mano de Dios (Dextera
Domini) inscrita en un círculo y la imagen del cordero místico (Agnis Dei) con siete
ojos. Esto se presume que sigue de manera explícita algo de la narración del
apocalipsis.
También, es de destacar la sutil geometrización de las formas. Destaca la simetría
de la cabeza de Cristo, con cabellos escalonados y simétricos, que caen hasta los
6. hombros. Este tipo de características marcan la distancia esencial de su divinidad
respecto al ser humano. En su figura se puede denotar autoridad.
El artista ha conseguido imbuir a los animales emblemáticos de Marcos y Lucas, el
león y el toro, en una gran potencia energética a partir de la seguridad de la línea
en el dibujo de curvas cargadas de tensión.
La brillantez y la amplia gama de colores es otro de los puntos a resaltar del
llamado Maestro de Taüll. Azules, rojos y amarillos constituyen una gama
cromática equilibrada que dotan al conjunto de una elegante belleza que realza
aún más el valor de los seres representados que forman parte del cortejo de la
teofanía.
Debajo, la irregularidad de los arcos y algún detalle menor, como la extraña figura
de María, perjudicada por el excesivo geometrismo, ha hecho pensar a algún
investigador que hubo otro pintor o que esta zona fuese obra del taller del artista.
La calidad e intensidad de colores empleados, la extraordinaria belleza del dibujo,
la habilidad de la composición, el uso de la línea para enriquecer las formas, así
como la geometrización de las facciones, son muestras claras de la maestría del
artista, pocas veces igualada.
Este formidable fresco, procedente de la valle de Boí, en Lleida, acredita uno de
los mejores pintores del románico hispánico. Actualmente se conserva en el
Museu Nacional d'Art de Catalunya, en Barcelona, considerado el más rico del
mundo en pintura románica.
Webgrafía
- https://es.wikipedia.org/wiki/Arte_
- http://arteparaninnos.blogspot.com/2012/09/pintura-al-fresco-en-epoca-
romanica.html
- http://www.historiadelarte.us/romanico/pantocrator-de-sant-climent-de-
taull.html