2. A la hora de pagar, el hombre saca su chequera y sin pestañear, rellena un talón por el importe solicitado.
3.
4. - ¡ Bien!, haremos una cosa: Como hoy es sábado y mi banco está cerrado, le propongo que guarde el tálón y la joya. El lunes, Ud procede a su cobro y cuando se le haya librado el importe de la joya, haga el favor de enviarla a casa de la señorita. ¿De acuerdo??.
5. El vendedor,más tranquilo, accede a esta solución sin ninguna duda, asegurando que la joyería procedería al envío de la joya,y que él mismo, en persona, procuraría por el buen término de la operación. El lunes por la mañana, se procede a la presentación del talón en el banco y evidentemente resulta impagado !!!