El cristianismo se expandió desde Jerusalén a través del Imperio Romano en los primeros siglos de la era cristiana. Las grandes ciudades cosmopolitas del imperio como Antioquía, Éfeso, Alejandría y Cartago actuaron como centros activos para difundir la fe cristiana a sus alrededores. Finalmente, el cristianismo se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano en el año 380 d.C. bajo el emperador Teodosio, uniendo las raíces judeo-cristianas de
2. En el siglo I de nuestra era, toda la
cuenca del Mediterráneo comprendía el
imperio creado por la ciudad de roma,
ocho siglos antes en el año de 753 a.C.
10. Éfeso
Asia menor fue la zona del imperio romano donde el
cristianismo tuvo mayor vitalidad en los primeros
siglos.
11. Alejandría
En esta ciudad las sectas gnósticas intentaban
combinar al cristianismo con la filosofía griega y
con las ideas religiosas de origen oriental
12. Cartago
En el siglo II encontramos una amplia presencia
del cristianismo, que tuvo gran influencia en los
inicios del cristianismo en España.
13. Roma
El 27 febrero del año 380, el cristianismo se
convirtió en la religión exclusiva del Imperio
Romano por un decreto del emperador Teodosio, lo
que tuvo trascendentales consecuencias.
Memoria conmemorativa del emperador
Theodosius. El decreto unió las raíces judeocristianas del continente europeo con la cultura
greco-romana.