La población de la Unión Europea es diversa culturalmente, con más de 20 lenguas oficiales y el cristianismo como religión mayoritaria. España es el quinto país más poblado de la UE, con más de 44 millones de habitantes, y ha experimentado una baja natalidad y mortalidad en las últimas décadas, lo que ha llevado a un envejecimiento de la población. La mayoría de los españoles trabajan en el sector servicios y la mujer se ha incorporado progresivamente al mercado laboral aunque todavía enfrenta brechas salarial