El documento resume las ideas principales de "El Príncipe" de Maquiavelo sobre cómo obtener y mantener el poder político. En pocas oraciones, Maquiavelo explica que obtener el poder es complicado pero mantenerlo es aún más difícil, y que los nuevos gobernantes deben tomar medidas para consolidar su autoridad y evitar ser derrocados.
2. El Príncipe es un libro de poca
extensión pero extremadamente
conceptual. Es un tratado de ciencias
políticas y el tema central es el poder.
Cómo obtenerlo, cosa complicada, y
cómo mantenerlo, algo mucho más
difícil con seguridad. Sus
razonamientos se basan en
innumerables ejemplos históricos, que
a cada paso surgen en el libro.
3. Los principados se dividen en
hereditarios y nuevos. Los hereditarios,
en quien los disfruta, provienen de su
familia, que por mucho tiempo los
poseyó. Los nuevos se adquieren de dos
modos: o surgen como tales en un todo; o
aparecen como miembros añadidos del
Estado ya hereditario del príncipe que
los adquiere.
4. El príncipe no necesita más que no
traspasar el orden seguido por sus
mayores, y contemporizar con los
acontecimientos, debe conservarse, a
menos que surja una fuerza
extraordinaria y llevada al exceso, que
venga a privarle de su Estado.
Duque de
Ferrara
5. Se encuentran muchas dificultades,
cuando el principado no es nuevo. Por
eso se le llama principado mixto, las
incertidumbres dimanan de una
dificultad, que consiste en que los
hombres, aficionados a mudar de seños
con la loca y errada esperanza de
mejorar su suerte, se arman contra el
que los gobernaba y ponen en su puesto
a otro.
6. La necesidad natural en que el nuevo
príncipe se encuentra de ofender a sus
nuevos súbditos, lo lleva a que tenga
por enemigos a cuantos haya ofendido
al ocupar el principado, y que no
pueda conservar a sus amigos.
Milán y Luis XII
7. Cuando son de la misma especie, hay
suma facilidad en conservarlos,
especialmente si no están habituados
a vivir libre en republica. Para
poseerlos con seguridad basta haber
extinguido la descendencia del
príncipe que reinaba en ellos.
Normandía Bretaña Borgoña Gascuña
8. Después del precedente , el mejor
medio consiste en enviar algunas
colonias a uno o dos parejas, que sean
como la llave del nuevo Estado.
Formando el príncipe semejantes
colonias, no se empeña en dispendios
exagerados.
DIFICULTADES EN LA
ADQUISICIÓN DE ESTADOS
Colonias
9. Cuando se adquieran algunos Estados
que se diferencian, las dificultades se
acumulan, y es menester de mucha
sagacidad y particular favor del cielo
para conservarlos. Uno de los mejores
medios para este propósito es que el
príncipe se vaya a residir en ellos.
Sultán de
Turquía, con
respecto a
Grecia.
10. El príncipe que adquiere una
provincia, cuyo idioma y cuyas
costumbres no son las de su Estado
principal, debe hacerse allí también el
jefe y el protector de los príncipes
vecinos que sean menos poderosos, e
ingeniarse para debilitar a los de
mayor poderío.
Provincias
11. El orden común de las cosas es que, no
bien un extranjero poderoso entra en
un país, todos los príncipes que allí
son menos poderosos se le unen, por
efecto de la envidia que concibieran
el que les sobrepujaba en poderío y a
los que éste ha despojado.
Poderío
12. ◊ Los romanos adoptaron siempre,
prevenciones en las provincias de que
se hicieron dueños. Enviaron allá
colinas; tuvieron a raya a los
príncipes de las inmediaciones menos
poderosos que ellos, sin aumentar su
fuerza.
Grecia, donde
conservaron
los etelios y a
los acayos los
humillaron.
13. ΩSi se conocen anticipadamente los
males que pueden después
manifestarse en un Estado, lo que no
concede el cielo más que un hombre
sabio y bien prevenido, quedan
curados muy prontos.
Romanos
14. ∑ Cuando por haber conocido el
Estado, se les deja tomar un
incremento tal que llega a noticia
de todo el mundo, no hay ya
arbitrio que los remedio.
Roma,Italia
15. » El deseo de adquirir es cosa ordinaria y
lógica. Los hombres que adquieren
cuando pueden hacerlo serán alabados
y nadie los censurará. Pero cuando no
pueden, serán tachados de error y todos
vituperarán.
Alabanzas
Vituperando
16. ¤ Luis XII, cometió cinco faltas, dado
que destruyo las reducidas potencias
de Italia; aumento la dominación de
un príncipe ya poderoso, introdujo a
un extranjero, no residió allí, y no
estableció colonias; y una sexta, la de
ir a despojar a los venecianos.
Venecia
17. De dos modos son gobernados los
principados conocidos. El Primero
consiste en serlo por su príncipe
asistido de otros individuos, son
admitidos, por gracia o por
concesión, en clase de servidores.
18. El segundo modo de gobierno:
príncipe, asistido de barones, que
encuentran su puesto en el Estado, por
la antigüedad de su familia. Estos
mismos barones posees Estados y
súbditos que los reconocen por barones
suyos y les consagran su afecto.
ReydeFrancia
19. ∆ El conquistador no puede serlo
llamado allí en las provincias de un
Imperio, ni esperar ser ayudado en
la empresa por la rebelión de los que
el soberano conserva a su lado.
Siendo todos esclavos suyos y
estándoles reconocidos por sus
favores, la utilidad no sería mucha.
20. ‽ Después de haber vencido, derrotando
en una campaña sus ejércitos, no
habrá que temer mas que a la
familia del príncipe. Si el
conquistador la destruye, el temor
desaparecerá por completo. La victoria
misma le dará a conocer infinitas
dificultades.
21. Cuando el príncipe quiere conservar
un Estado, debe o irse a vivir en ellos,
o dejar al pueblo con su código
tradicional. Una ciudad libre que el
príncipe quiere conservar, se contiene
mucho más fácilmente por medio del
influjo de sus ciudadanos.
22. • El que se hace señor de una ciudad
libre y no descompone su régimen
político, debe contar con ser
derrocado por ella. Para justificar
tal ciudad su rebelión invocara su
libertad y sus antiguas leyes.
Pisa y Florencia
23. Los hombres caminan casi siempre por
caminos trillados ya por otros, y a
penas hacen más que imitar a sus
predecesores en las empresas que
llevan a cabo.
No se puede seguir en toda la
ruta abierta, así que se eligen
algunos senderos solamente.
24. • Los principados que son nuevo en todo
y cuyo soberano es, por ende,
completamente nuevo, hay menos
dificultad en conservarlos.
Príncipes Moisés y Príncipe Ciro
25. Los que llegan a ser príncipes con
valor, no adquieren su soberanía sin
trabajo, pero la conserva fácilmente y
las dificultades con que tropiezan al
conseguirla provienen en gran parte
de las nuevas leyes y de las nuevas
instituciones que se ven obligados a
introducir para fundamentar su
estado y para proveer a su seguridad.
26. No hay cosa mas ardua de manejar,
ni que se lleve a cabo con más peligro,
que obrar como jefe para dictar
estatutos nuevos, pues tiene como
enemigos a cuantos sacaron provecho
de los estatutos antiguos.
27. Conviene notar, que el natural de los
pueblos es variable. Fácil es hacerles
creer una cosa, pero difícil hacerles
persistir en su creencia.
28. Pero cuando han triunfado de ellos y
empiezan a ser respetados, como han
subyugado a los hombres que les
envidiaban su calidad de príncipes,
quedan, al fin, asegurados,
reverenciados y poderosos.
29. Los que de particulares que eran se
vieron elevados al principado por la
sola fortuna, llegan a él sin mucho
trabajo, pero lo encuentran máximo
para conservarlo en su poder.
30. ‡ Los Estados que se forman de repente,
no tienen las raíces necesarias para
consolidarse. EL primer golpe de la
adversidad, lo arruina.
FranciscoSforza
31. ∞El que no preparo los fundamentos
de su soberanía antes de ser príncipe
podría hacerlo después, poseyendo
un talento superior.
Duque de Valentinois
32. Supuesto que aquel de simple
particular asciende a príncipe, lo
puede hacer todavía de otros dos
modos, sin deberlo todo al valor o a
la fortuna.
33. • El primero método para llegar a
príncipe, pasando de ser un simple
particular, es de un modo detestable y
malvado.
AGATOCLES DE
SIRACUSA
34. • El Segundo método para llegar a ser
príncipe pasando de ser un simple
particular, es con el favor de los
conciudadanos.
35. Los actos de severidad mal usados son
aquellos que, pocos al principio, van
aumentándose y se multiplican de
día en día, en ves de disminuirse y de
atenerse a su primitiva finalidad.
36. • Es menester que el que adquiera un
Estado ponga atención en los actos de
rigor, que le es preciso ejecutar, a
ejercerlos todos de una vez e
inmediatamente a fin de no verse
obligado a volver a ellos todos los
días.
37. • EL que obra de algún modo por
timidez o guiado por malos consejos
se ve forzado de continuo a tener la
cuchilla en la mano y no puede
contar nunca con sus súbditos.
38. Cuando con el auxilio de sus
conciudadanos un particular llega a
reinar en su patria, se le llama
principado civil. Para adquirirlo no
hay necesidad alguna de cuanto el
valor o la fortuna pueden hacer si no
mas bien de cuanto una acertada
astucia puede combinar.
39. • En toda ciudad existen dos
inclinaciones diversas, una de las
cuales proviene de que el pueblo
desea no ser dominado y oprimido y
la otra de que los grandes desean
dominar y oprimir al pueblo.
40. En cuanto al principado, su
establecimiento se promueve por el
pueblo o por los grandes, según que
uno u otro de estos dos partidos
tengan ocasión para ellos.
41. EL que consigue la soberanía con el
auxilio de los grandes se mantiene
en ella con mas dificultad que el que
la consigue con el del pueblo.
42. • Es difícil con decoro y sin agraviar a
los otros, contentar los deseos de los
grandes. Pero se contentan fácilmente
los del pueblo, porque llevan un fin
mas honrado.
43. Si el pueblo es enemigo del príncipe,
este no se vera jamás seguro, pues el
pueblo se compone de un numero
grandísimo de hombres. Lo peor que
el príncipe puede tener de un pueblo
que no lo ama es su abandono.
44. • Si le son contrarios los grandes, debe
temer ser atacado y destruido por
ellos, ya que emplean bien el tiempo
para salir del apuro y solicitan
dignidades para sustituir al príncipe.
45. ‹ Deben considerarse dos aspectos
principales. Los primeros si no son
rapaces, debes ser estimados y
honrados y los segundos que no se
ligan al príncipe personalmente.
46. • Un ciudadano llegado a ser príncipe
por el favor del pueblo ha de detender
a conservar su afecto, lo cual es fácil
ya que el pueblo pide únicamente no
ser oprimido.
47. Cuando los hombres reciben bien de
quien no esperan mas que mal, se
apoyan mas en el. Así el pueblo
sometido por un príncipe nuevo, se
erige en bienhechor suyo, le coge mas
afecto que si el mismo por
benevolencia le hubiera elevado
soberanía.
48. • Como haya tomado las disposiciones
oportunas y mantenido, con sus
estatutos y con su valor, el de la
generalidad de los ciudadanos, no
será engañado jamás por el pueblo y
reconocerá que los fundamentos que
se ha formado con este son buenos.
49. • En los peligros, semejante príncipe no
encuentra ya razón para recuperar
su omnímoda autoridad por cuando
a los súbditos, acostumbrados a
recibir ordenes, no están dispuestos
en tales circunstancias a obedecer a
las suyas.
50. • En épocas revueltas, cuando el Estado
más necesita de los ciudadanos, son
poquísimos los que le secundan. Y la
experiencia es más peligrosa.
51. • Pueden los príncipes sostenerse por si
mismos cuando tienen suficientes
hombres y dinero para formar el
correspondiente ejército, con que
presentar batalla a cualquiera que
vaya a atacarlos.
52. • Cualquiera que haya artillado
fuertemente el lugar de su mansión y
se haya portado bien con sus súbditos,
no será atacado nunca sino con
mucha circunspección.
53. Un príncipe que posee por punto de
residencia una plaza fuerte y se hace
amar dentro de ella, difícilmente será
sitiado, y si lo fuera, el que lo intentase
acabaría por levantar el cerco con
aprobio.
54. La naturaleza de los hombres es de
obligarse unos a otros lo mismo por los
beneficios que conceden que por los que
reciben.
55. Los principados eclesiásticos, su
adquisición y posesión no existe ninguna
dificultad pues no se requiere, ni de
valor, ni de buena fortuna.
56. Únicamente estos príncipes tienen
Estados sin verse obligados a
defenderlos, y súbditos, sin
experimentar la molestia de
gobernarlos. Los Estados, aunque
indefensos, no le son arrebatados, y los
súbditos, aun careciendo de Gobierno, no
se preocupan de ellos.
57. Los soberanos de los Estados pontificios,
Venecia y reino de Nápoles, solo
cuidaban que ningún extranjero trajese
un ejercito a Italia y que ninguno de los
grupos políticos de esta se
engrandeciera a costa de otros.
58. Los barones de Roma carecían de
fuerza, porque Alejandro VI, con los
diferentes modos de lograr la derrota de
sus facciones, los había destruido.
59. Los principales fundamentos de
todos los Estados, ya antiguos, ya
nuevos, ya mixtos, están en las
armas y en las leyes.
60. Las armas con que un príncipe
defiende su Estado pueden ser
tropas propias, o mercenarias, o
auxiliares, o mixtas.
61. Las armas mercenarias y
auxiliares, son inútiles y peligrosas.
Si un príncipe apoya su Estado con
tropas mercenarias, no se hallará
seguro nunca.
62. Los capitanes mercenarios son hombres
excelentes, o no lo son. Si lo son, no puede
el príncipe fiarse en ellos, porque aspiran
a la grandeza, y si no es un hombre de
valor, causa comúnmente su ruina.
63. La República debe enviar a uno de
sus ciudadanos para mandarlas, y,
si desde las primeras acciones de
guerra no manifiesta bélica
capacidad, debe reemplazarse por
otro.
64. La experiencia enseña que únicamente
los príncipes que poseen ejércitos propios
y las republicas que gozan del mismo
beneficio, triunfan con facilidad, en
tanto que los príncipes y las republicas
que se apoyan sobre ejércitos
mercenarios, no experimentan mas que
reveses.
65. Entre aquellos valerosos capitanes que
podían ser temibles, unos no tuvieron la
dicha de haber ganado batallas, otros
encontraron obstáculos insuperables en
su ruta, y algunos orientaron hacia otra
parte su ambición.
66. Los progresos conseguidos por los
venecianos denotan que obraron con
seguridad y con gloria, mientras ellos
mismos hicieron la , guerra, dejando a la
nobleza el cuidado de pelear
valerosamente con hombres del pueblo
bajo armado.
67. Con tropas mercenarias las
conquistas son lentas, tardías,
limitadas y los fracasos bruscos
repentinos e inmensos.
68. En muchas ciudades se elevaron
diversos individuos a la categoría
de príncipes suyos.
Casi toda Italia estaba
bajo el poder de Papas.
69. El método seguido por algunos capitanes
consistía principalmente en privar de
toda consideración a la infantería, ya
que al no poseer Estado alguno no tenían
como darle de comer a algunos hombres.
MÉTODO DE CAPITANES
70. En un ejercito de veinte mil hombres, no
se contaban dos mil infantes. Además se
había esforzado todo lo posible para
desterrar de sus soldados y de si mismo
las penalidades y el miedo,
introduciendo el uso de no matar en las
refriegas y limitándose a hacer
prisioneros sin degollarlos.
71. Algunas armas pueden ser inútiles y
buenas en si mismas, pero resultan
infaustas siempre para el que las llama,
porque, si pierde la batalla, queda
derrotado, y si la gana, se constituye en
algún modo en prisionero de quien le
auxilió.
72. Únicamente el que no quiere habilitarse
para vencer es capaz de valerse de
armas, que miro como mucho mas
peligrosas que las mercenarias.
73. Las mercenarias después de la
victoria necesitan de una ocasión
favorable para atacarle, por no
formar todas un mismo cuerpo.
LAS MERCENARIAS
74. Si la cobardía es lo que mas debe
temerse en las tropas mercenarias,
lo más temible en las auxiliares es
la valentía.
75. Un príncipe sabio evitara las
armas mercenarias y auxiliares, y
recurrirá a sus propias armas,
prefiriendo perder con ellas, a
ganar con las ajenas.
76. Los ejércitos de Francia se componen, en
parte, de sus propias armas y en parte de
las mercenarias. Reunidas unas y otras
valen más que si solo fueran mercenarias
o auxiliares. Pero un ejercito así formado
es inferior.
77. A menudo, cualquier cosa que los
hombres establecen, fundados en
algún bien que augura, esconde en
si mismo un funestísimo veneno.
78. El príncipe no ha de tener otro objeto, ni
abrigar otro propósito, ni cultivar otro
arte, que el de enseñar el orden y la
disciplina de los ejércitos, porque es el
único que se espera ver ejercido por el
que manda.
79. Varios príncipes, que se ocupaban
más en las delicias de la vida que
en las cosas militares, perdieron su
Estado.
80. La primera causa que haría a un
príncipe perder el suyo, seria
abandonar el arte de la guerra como la
causa que hace adquirir un reino al que
no lo tenía, es sobresalir en ese arte.
81.
82. El príncipe no debe cesar de ocuparse en
el ejercicio de las armas, dándose a ellas
mas en los tiempos de paz que en los de
guerra, y pudiendo hacerlo de dos
modos: el uno con acciones y el otro con
pensamientos.
83. Las acciones de un príncipe, deben no
solamente tener bien ordenadas y
ejercitadas a sus tropas, si no también ir
a menudo de caza, con la que por una
parte acostumbra a su cuerpo a la
fatiga, y por otra aprende a conocer la
calidad de los valles…
84. Los conocimientos semejantes de su país,
le sirven para defenderlo mejor, y
además, cuando ha frecuentado mucho
los lugares, comprende fácilmente lo que
debe ser otro país que no tenga vista, y
en el que aun no haya combinado
operaciones militares
85. El príncipe que carece de ciencia
práctica, no posee el primero de los
elementos necesarios a un capitán,
porque ella enseña a hallar al enemigo,
a tomar alojamiento, etc.
86. El príncipe, para ejercitar su espíritu,
debe leer historias, y al contemplar las
acciones de los varones insignes, debe
notar particularmente como se
condujeron en las guerras, examinando
la causa de sus victorias y las de sus
derrotas.
87. Es necesario que un príncipe que desee
mantenerse en su reino, aprenda a no
ser bueno en ciertos casos, y a servirse o
no servirse de su bondad, según que las
circunstancias lo exijan.
PRÍNCIPE BUENO
88. Cuantos hombres atraen la atención
de sus prójimos y muy especialmente
los príncipes, se distinguen por
determinadas prendas personales que
provocan la alabanza o la censura.
Uno es mirado como liberal y el otro
como miserable.
89. No habría cosa más deseable y mas
loable que un príncipe que estuviese
dotado de cuantas cualidades buenas.
Pero es casi imposible, es necesario que
el príncipe sea lo bastante prudente
para evitar la infamia de los vicios.
90. La liberalidad que impidiese que le
temieran, sériale perjudicial en grado
sumo. Si la ejerce con prudencia y de
modo que no lo sepan, no incurrirá por
ello en la infamia de vicio contrario.
91. Conservar su reputación de liberal no
puede abstenerse a parecer suntuoso,
sucederá siempre que un príncipe que
aspira a semejante gloria, consumirá
todas su riquezas en prodigalidades y al
final se vera obligado a gravar
extraordinariamente a sus súbditos a
ser extremadamente fiscal y a hacer
cuanto sea imaginable para conseguir
dinero.
CONSERVAR LA
LIBERALIDAD
92. No pudiendo, un príncipe, sin que ello le
resulte perjuicio, ejercer la virtud de la
libertad de un modo notorio, debe si es
prudente, no inquietarse de ser notado
de avaricia, porque con el tiempo le
tendrán más y más por liberal.
VIRTUD LIBERAL
Le bastan sus rentas para
defenderse de quien le
declare la guerra.
93. El príncipe que con sus ejércitos va a
efectuar saqueos, y a llenarse botín, y a
apoderarse de los caudales de los
vencidos, esta obligado a ser prodigo con
sus soldados que no le seguirán sin ese
estímulo.
94. Uno de los inconvenientes mayores de
que un príncipe ha de precaverse es el de
ser menospreciado y aborrecido.
MENOSPRECIADO Y
ABORRECIDO
95. La mejor sabiduría es no temer la
reputación de avaro, que no produce
más que infamia sin odio, antes que
verse, por el gusto de gozar renombre de
liberal, en el brete de incurrir en la nota
de rapacidad, cuya infamia va
acompañada del odio público.
96. Todo príncipe ha de desear que se le
repute por clemente y no por cruel, sin
embargo debe temer en todo instante
hacer mal uso de su clemencia.
¿ O CRUEL?
97. Un tal príncipe no debe creer con
ligereza en el mal de que se le
avisa, sino siempre obrar con
gravedad suma y sin el mismo
atemorizarse.
98. La obligación del príncipe es proceder
moderadamente, con prudencia y aun
con humanidad, sin que mucha
confianza le haga impróvido y mucha
desconfianza le convierta en un hombre
insufrible.
99. Los hombres se atreven más a
ofender al que se hace temer,
porque el afecto no se retiene por el
mero vínculo de la gratitud.
100. Si sus inclinaciones le llevasen a
raptar la propiedad del prójimo, le
sobraran ocasiones para ello, pues
el que comienza viviendo de
rapiñas encontrara siempre
pretextos para apoderarse de lo que
no es suyo.
RAPTAR
101. Cuando el príncipe este con sus tropas y
tenga que gobernar a miles de soldados,
no debe preocuparle adquirir fama de
cruel, ya que, sin esta fama, no logrará
conservar un ejercito unido, ni dispuesto
por cosa alguna.
PRINCIPE CON SUS TROPAS
102. Maquiavelo decía que de las cosas mas
importantes es saber hacer lo más
conveniente para el pueblo, ya sea propio
o haya sido incorporado. En caso de que
sea hereditario, es más fácil mantener el
poder, porque el príncipe recibe el poder
por herencia. Lo importante es que
intente mantener las mismas leyes de sus
antepasados y estar al tanto de todos los
acontecimientos, y en caso de que le sea
arrebatado el poder, lo podrá recuperar
con un mínimo descuido del usurpador
103. 1. Mercenario: aquel
soldado que lucha o
participa en un conflicto
bélico por su beneficio
económico y personal.
2. Fuerzas armadas:
Conjunto formado por los
ejércitos de tierra, mar y
aire de un país.
3. Eclesiástico: Relativo a la
comunidad cristiana que
constituye la Iglesia, y
especialmente a los
clérigos
4. Infantería: tropa
instruida, organizada,
equipada y armada para
combatir a pie.
5. Príncipe: Jefe de Estado
de un principado
6. Principado: Territorios o
lugar que pertenecen a
un príncipe.
7. Súbditos: Se aplica a la
persona que está sujeta a
la autoridad de otra
persona y que tiene la
obligación de obedecerla.
VOCABULARIO
104. 8. barones: Miembro de la
nobleza de categoría inferior
a la de vizconde.
9.Estado: Territorio que se
gobierna por leyes propias,
aunque depende del gobierno
central del país.
10.soberano: Se aplica a la
persona que posee y ejerce la
autoridad más elevada sobre
los asuntos sociales,
económicos y políticos de un
pueblo o nación
11. colonia: Territorio alejado
de las fronteras de un país
extranjero y dominado por
este administrativa, militar
y económicamente
12.refriega: Batalla o
combate de poca
importancia.
13.libertad: Facultad de las
personas para actuar según
su propio deseo en el seno de
una sociedad organizada y
dentro de los límites de reglas
definida
14.duque: Miembro de la
nobleza de categoría inferior
a la de príncipe y superior a
la de marqués.
15. Conquistador: Se aplica a
la persona o ejército que
consigue el dominio y control
de una población o de un
territorio como consecuencia
de una guerra
105. 16. fortalezas: Recinto
protegido con murallas o
construcciones de defensa
para resguardarse de los
enemigos
17. artillar: Dotar de
artillería una embarcación o
un lugar.
18. ciudadela: Recinto
fortificado en el interior de
una ciudad que sirve de
defensa o refugio para sus
habitantes.
19. caballería: Cuerpo de un
ejército formado por soldados
montados a caballo o en
vehículos motorizados, y el
personal y material de
guerra complementarios
20. armas: Instrumento,
máquina o medio que sirve
para atacar o defenderse.