3. Tres nuevas "tendencias"
iluminan la plástica griega
del siglo IV a.C.:
• la "charis" praxiteliana,
caracterizada por
expresar las emociones
líricas;
4. • el "pathos" de
Escopas, que tiende
a explotar el estado
dramático;
5. • y la fusión que hace de
ambas tendencias Lisipo,
el último de los clásicos,
acuñando un nuevo canon
de belleza ideal del
cuerpo humano.
6. • CONTEXTO HISTÓRICO
• 404 a.C.: Derrota ateniense frente a Esparta
supone un cambio mentalidad radical, una
diferencia de enfoque sin posible vuelta
atrás
• La guerra, la miseria y los fracasos habían
derrumbado en el Ática todos los ideales que
sustentaron el brillante siglo de Pericles:
– La confianza en los grandes dioses patrios y
panhelénicos
– El culto a la democracia y a las leyes
– El ensalzamiento supremo de todo lo que
perteneciese a la propia ciudad...
7. EL ARTE: LA BUSQUEDA DE LO INMEDIATO
La puesta en duda de los principios
consagrados alcanza también al arte,
valorando frente a los grandes ideales, lo que
se aprehende más directamente a través de
los sentidos, sin ningún prejuicio intermedio,
o lo que se siente con mayor intimidad.
8. • Lo más creativo del arte griego a partir de
este momento se basa en:
• LA PERCEPCION Y REPRESENTACION DE
LO QUE SE VE.- Apariencia antes que
esencia. En este sentido, los pintores serán
los que más profundamente se comprometan,
inventando (o descubriendo) dos útiles
esenciales:
– el sombreado
– la perspectiva
9. EL ANALISIS DE LOS SENTIMIENTOS Y
DE LAS PASIONES.
Representación del "pathos", la expresión de
los sentimientos momentáneos, un campo
prácticamente ignorado por el arte griego.
Empezará pues a ponerse de relieve el mundo
del sentimiento personal y a valorarse las
pasiones del alma.
10. • Cuando, hacia 375 a.C. cambia la situación y
Atenas vuelve a recuperar el liderazgo, los
talleres van saliendo de su letargo, la nueva
mentalidad y los nuevos mecenas (una
burguesía comerciante desarrollada al
amparo de la evolución económica) harán que,
junto al arte pagado con dinero público y a
los exvotos puestos en los santuarios, se
desarrolle el arte privado, el adorno de
jardines, la colección particular, y la sociedad
ateniense se interesa por lo íntimo, por la
nueva sensibilidad de lo inmediato y de los
sentimientos individuales.
12. • Aprendiz de Cefisódoto el viejo, se formó
viajando con él por Grecia, contrastando
conocimientos con otros maestros y escuelas,
efectuando obras en común, intentando
unificar estilos, aprendiendo todas las
novedades y, a la vez, dedicándose a estudiar
las grandes obras del pasado (especialmente
a Policleto).
13. Características Generales:
• Temas agradables, llenos de encanto y tratados
•
•
•
•
•
con suavidad.
Representa en sus obras la gracia, las formas
blandas y delicadamente bellas.
Dioses en actitudes muy humanas y cotidianas.
Rompiendo con la tradición, desnuda a las diosas.
Reflejados a través de un rítmico contoneo
sinuoso, que se ha dado en llamar "curva
praxiteliana";
Juega con los volúmenes esculpidos para que
generen contrastes de luz y sombra.
14. "Sátiro escanciador". Obra de
juventud, es toda una declaración
de principios de Praxíteles.
Su punto de arranque se halla en el
"Diadumeno" de Policleto, pero la
sensación es absolutamente nueva:
allí donde Policleto afirmaba las
masas musculares y su estabilidad,
Praxíteles sugiere la preeminencia
de los perfiles y la ligereza de las
formas.
16. -"Afrodita de Cnido", una de sus
obras más famosas. Pese a su
condición de imagen de culto, se
pensó enseguida en su contemplación
estética: situada en el centro de un
templete redondo, los visitantes le
daban la vuelta por completo, aunque
es una obra concebida, como todas
las de Praxíteles, según un punto de
visión principal.
La primera Afrodita absolutamente
desnuda y, a la vez, el primer ideal de
un cuerpo femenino basado
precisamente en una anatomía
femenina, y no, como en época de
Pericles, en una estructura corpórea
de varón.
17. -"Apolo Sauróctono", de una
novedad plástica
impresionante. El suave
torso se desequilibra hasta
tal punto que no puede
sostenerse por sí solo; la
ondulación del cuerpo,
estructurada sabiamente
por Policleto, se deshace en
una bella curva continua, la
"curva praxiteliana", que un
árbol debe soportar.
18. El propio árbol añade, con su
lagarto, una dimensión nueva a
la estatua: Apolo aparece
idealmente inmerso en un
paisaje idílico. Jamás hasta
entonces la absoluta felicidad
divina había sido plasmada de
forma tan directa y espontánea.
19. Hermes con Dionisos" o
"Hermes de Olimpia,
posible único original que
nos haya quedado del
escultor, aunque ciertos
detalles (musculatura,
cabello, abombamiento de la
frente, realismo del
manto...) ponen en duda
esta atribución.
21. • Sigue, como Praxíteles la senda de Policleto,
pero se distancia de la simpatía de éste y
ahonda en los estímulos patéticos, dando
origen a unos individuos atormentados e
inflamados de pasión.
22. A raíz de sus trabajos en la
tumba de Mausolo (Halicarnaso),
hacia el 350 a.C., se convirtió en
una de las grandes figuras del
arte griego.
23. Típica cabeza del
maestro: redonda, con la
cara recogida bajo una
pesada frente, con los
ojos profundos, las bocas
anhelantes, capaces de
expresar cansancio, drama
o tensión, "pathos" en una
palabra
24. -“Frontones del Templo de
Atenea en Tegea".
Obra cumbre en la que Escopas
da rienda suelta a su gusto por
los rostros apasionados, a su
sentido dramático de la
mitología.
Apenas quedan unos
fragmentos, pero, por lo menos,
las cabezas conservadas son de
un patetismo brutal, realzado
incluso por una talla sin pulir.
Desde luego, este acabado
imperfecto se justificaba por
la lejanía del espectador, pero
también tenía algo de rasgo
estilístico, de entusiasmo por lo
inmediato.
25. El pathos alcanzado por
Escopas, solución magistral al
problema de la expresión
psíquica, recibía adhesión
general, de ahí que nuestro
autor siguiese explotando sus
logros y analizando variantes:
-"Ménade furiosa", retratada
en plena orgía, con un cabrito
muerto sobre los hombros,
retorcida bajo el efecto de la
locura báquica.
27. • Broncista del Peloponeso.
• Considerado por muchos como la cumbre hacia la
que se había ido encaminando la estatuaria
griega en su progreso.
• Igual que los anteriores, su punto de partida es
Policleto.
• Se mantuvo en la senda tradicional de
representación de jóvenes desnudos.
• Escultor muy prolífico al que se atribuyen más
de 1500 esculturas.
• Trabajó para Alejandro Magno.
28. • Reformula su canon de
belleza, alargándolo y
estilizándolo: la altura
total del cuerpo es
ocho veces la medida
de la cabeza.
29. AUGIAS. Se nos presenta como una
obra de Policleto transformada.
Advertimos en ella cómo:
El atleta se apoya en su pierna
derecha, pero su brazo activo es
también el derecho, doblado y
sosteniendo una palma, y no el
izquierdo, como exigiría el canon de
Policleto.
Además, las proporciones del
cuerpo se han alargado.
Consecuencia: el cuerpo entero
vibra y parece aligerarse, incluso con
sus dos talones pegados al suelo.
30. La cabeza cobra
movimiento, al inclinarse
hacia la izquierda sobre
un cuello torcido hacia la
derecha.
Todo esto se acentúa,
como en Scopas, dándole
importancia a la cara a
través de un rostro más
expresivo y unos ojos
profundos.
31. "Eros de Tespias".
Análisis de la anatomía
infantil directamente
basado en la realidad.
Postura compleja, que
se enfrenta de lleno con un
principio clásico
indiscutible: el del culto a la
musculatura del torso.
32. "Apoxiomeno" . Obra básica para
explicar la conquista de la tercera
dimensión, para iniciar la realización
de esculturas que no tengan un
punto de vista esencial, sino que
inviten a darles la vuelta.
La idea de lanzar hacia adelante los
brazos del atleta vencedor que se
limpia el sudor y polvo de la
ejercicio con el estrígil, brazos que
sólo pueden verse si se gira en
torno a la estatua, constituye una
absoluta novedad, y abre unas
posibilidades enormes para el
futuro.
33. "Heracles en reposo",
conocido sobre todo por la
copia -de músculos
exagerados- llamada
"Hercules Farnesio“, también
avanza un pie y esconde su
mano tras la espalda para
invitarnos a rodearla.
Tras Lisipo, el arte
quedaría liberado de casi
todas sus trabas clásicas, y
abierto a múltiples
posibilidades antes
inconcebibles.