Los avatares para el juego dramático en entornos virtuales
SUTEP DESLINDE CON EL ANARQUISMO
1. Fundado el 06 de julio de 1972- Afiliado a la CGTP y a la IE
Inscrito en el Ministerio de Trabajo ROSSP. Exp. Nº 37265-2004-DRTELC/DPSC/SDRG/DRS
web: www.sutep.org.pe email: info@sutep.org.pe Tlf: 01-4276677
SUTE REGIÓN LIMA
DESLINDE CON EL
ANARQUISMO PRO PATRONAL
BOLETÍN 1 y 2 edición especial Junio - Julio 2014
suteregionlima@hotmail / www.sutelima.org
¡EL DIVISIONISMO NO PASARÁ!
2.
3. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
3
DESLINDE CON EL
ANARQUISMO
PROPATRONAL
CONTENIDO
I. Antecedentes
II. Paralelismo sindical en acción
III. El anarquismo y las formas de lucha
IV. El anarquismo y la huelga
V. El anarquismo y las elecciones de los dirigentes
VI. El rol del anarquismo en FENDEP
Conclusión
Referencias Bibliográficas
Junio 2014
BOLETÍN Nº1
¡Por la Unidad Sindical Clasista!
4. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
4
PRESENTACIÓN
El proceso de paralelizar al Sutep, no es un hecho casual. Desde hace mu-
cho tiempo lo han intentado de diversa manera, utilizando felones de todo
pelaje.
Apenas fundado el Sutep (1972), los acólitos de la dictadura militar crearon
el SERP (Sindicato de Educadores de la Revolución Peruana), que fueron
reconocidos por la dictadura; empero, jamás por el Magisterio Nacional.
Asimismo, a inicios de 2,000, los funcionarios de la administración Lynch de-
cidieron liquidar al Sutep para implementar la reforma educativa neoliberal,
utilizando a los renegados “democráticos” y a los “clasistas” de Sendero y
Puka Llacta.
Sin embargo, estos pequeño-burgueses radicalizados se dividieron y surgió
el CONARE 1, 2, 3, etc. Junto a ellos actuaban los pukas, pero como el
periodismo hizo famosos a los Huaynalayas, Condori y MOVADEF, decidie-
ron formar su propia federación: FENDEP.
Por ello, es necesario asumir el trabajo de ir a las bases y deslindar con
estas posiciones anarquistas propatronales; para eso, se necesita conocer
sus absurdos planteamientos y contradicciones que el presente documento,
debidamente sustentado, nos brinda.
PRESENTACIÓN
5. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
5
DESLINDE CON
EL ANARQUISMO PROPATRONAL
I. ANTECEDENTES
En la década del sesenta los trabajadores pe-
ruanos acabaron con el dominio del sindica-
lismo amarillo que imperaba en el movimiento
obrero. Promovieron un liderazgo de izquierda,
que respondía a la nueva corriente que se ha-
cía hegemónica en el movimiento sindical: el
clasismo. Esta se distinguía por su combativi-
dad en la defensa de la autonomía de clase,
en la lucha por los derechos de los trabajado-
res, en la oposición intransigente contra el em-
presariado y en la afirmación de la solidaridad
obrero-popular. El puño en alto, logotipo de
innumerables publicaciones sindicales, era una
muestra de esa disposición permanente al com-
bate (Vildoso: 1992, 19).
Según Contreras (2004, 3), considerando la
lucha de clases como el principio rector en
las relaciones sociales en una sociedad de
clases, doctrinariamente el sindicalismo clasista
asume los siguientes principios:
1. Unidad clasista: considerando los intere-
ses comunes de los trabajadores y, al mismo
tiempo, la diversidad ideológica y credos
políticos y religiosos, se hace necesario lu-
char y enrumbar en forma unitaria el Sindi-
cato.
2. Independencia política: el reconocimien-
to de la existencia de las clases sociales con
sus propios intereses, obliga a los trabaja-
dores a mantenerse distante y no permitir la
intervención de los empleadores o patronal
en los asuntos del Sindicato.
3. Solidaridad: es el desarrollo de expresio-
nes, acciones o actividades concretas en
apoyo a las luchas de otros gremios y orga-
nizaciones del pueblo.
4. Centralismo democrático: es la unidad
dialéctica entre la democracia y el centra-
lismo; significa que las decisiones a optar
proceden de las mayorías, y las minorías la
acatan, garantizándoles respeto por sus opi-
niones.
5. Basarse en sus propias fuerzas: consis-
te en que las decisiones y su desarrollo o
concreción deben ser asumidas por las mis-
mas fuerzas del Sindicato.
Por ello, no fue casual que en la ciudad del Cus-
co, del 2 al 6 de julio de 1972, se reunieran
más de 6OO delegados de las diversas bases
regionales y provinciales del Perú, en el deno-
minado CONGRESO NACIONAL DE UNIFI-
CACIÓN DEL MAGISTERIO PERUANO; cuya
acta expresa lo siguiente:
“La realización de este importante certamen sin-
dical significa el ascenso de la conciencia de
clase en las filas del magisterio y la materiali-
zación de un caro anhelo de más de 120 000
profesores del territorio nacional, que a través
de muchos años han venido luchando para
construir una sola central representativa de los
educadores peruanos. En esta importante cita
de unificación se ha transformado orgánica-
mente la Federación Nacional de Educadores
del Perú (FENEP) en el SINDICATO ÚNICO DE
TRABAJADORES EN LA EDUCACIÓN DEL
PERÚ (SUTEP) que agrupará a los trabajado-
res del sector educación sin distinción de nive-
les educativos (Primaria, Secundaria, Técnica,
Educación Física, Formación Magisterial y otros
servidores del ramo). La constitución de una
nueva central representativa de los maestros
del Perú, conlleva la liquidación definitiva de
las tradicionales y anacrónicas organizaciones
por niveles, que en más de una oportunidad ha-
6. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
6
bían defraudado las justas aspiraciones de los
docentes del país. El SUTEP ha sido constituido
en concordancia con los Principios Universales
del Sindicalismo Clasista, de allí que abrigamos
la más firme esperanza que los trabajadores en
la Educación del Perú sabrán superar todo tipo
de discrepancias y se integrarán activa y con-
secuentemente a las tareas de la consolidación
del proceso de unificación, que determinará la
cimentación de nuestra poderosa central y de
sus diversos escalones sindicales, y así luchar
por la consecución de nuestras reivindicaciones
económicas, sociales y profesionales” (Acta de
Fundación del SUTEP: 06 – 07- 72).
Asimismo, en la escena nacional, la experien-
cia bajo la orientación clasista permitió una
amplia socialización política de los dirigentes a
través de la participación en distintas instancias
de centralización popular. Del mismo modo, se
inscribió en la oposición a la dictadura militar,
siendo la columna decisiva en la acción de ma-
sas más importante de la década del setenta:
el Paro Nacional del 19 de Julio de 1977.
Este Paro promovió nuevos niveles de unidad de
la izquierda y contribuyó a que el gobierno de
Morales Bermúdez organizara la transferencia
del poder a los civiles (Vildoso: 1992, 67). Fe-
cha que jamás debemos olvidar para reconocer
Nuestro inolvidable
Horacio y el Dr. Alfonso
Barrantes Lingán. Asesor
Legal del SUTEP.
el accionar nefasto de los anarquistas dogmá-
ticos y el sacrificio de los trabajadores clasistas
en la Historia del Movimiento Sindical Peruano.
Antes de tan histórica fecha, hay que señalar
que el 24 de octubre de 1973, el SUTEP realizó
el primer Paro Nacional, que fue salvajemente
reprimido por la dictadura militar de esa épo-
ca. Detuvieron a más de 500 docentes, y 91
dirigentes de los diversos escalones del gremio
magisterial fueron destinados a la temible Co-
lonia Penal Agrícola “El Sepa”, ubicada en la
Selva Central, más conocida como el “Infierno
Verde”. Entre los detenidos se encontraba nues-
tro inolvidable primer Secretario General, Ho-
racio Zeballos Gámez, maestro primario, que
dio ejemplo de firmeza y decoro al rechazar el
ofrecimiento de la dictadura: renuncia al SUTEP
y recuperación de la libertad. Los demás
líderes magisteriales detenidos en condiciones
infrahumanas reaccionaron del mismo modo,
a excepción de dos sujetos que desaparecieron
en el rincón del olvido.
De tal modo, el desarrollo y fortalecimien-
to del SUTEP no ha sido nada fácil. Siempre
han intentado destruirnos. La clase dominante
jamás nos va a perdonar la decisión de defen-
der la educación pública para todos los perua-
nos. Jamás van a permitir que coadyuvemos a
7. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
7
Juan Contreras, dirigen-
te nacional del SUTEP,
vilmente agredido por
el anarquismo en la 8va
Huelga Nacional.
la forja de una sociedad más humana, inclu-
siva, democrática y en lucha frontal contra la
corrupción.
Desde la dictadura militar (1973), que vociferó
y destiló su odio de clase: ¡El SUTEP o la re-
volución! y apresó a 91 maestros en la colonia
penal del Sepa, hasta el inefable Chang que
“pronosticó la desaparición de la dirigencia del
Sindicato Único de Trabajadores en la Educa-
ción del Perú (SUTEP) al afirmar que su destino
es la crónica de una muerte anunciada, por ha-
ber rechazado la evaluación complementaria a
los maestros” (El Comercio: 20/12/2006), no
han podido lograr sus nefastos propósitos.
Acertadamente, Breña (29/12/2006) enumera
una serie de frases que expresan el deseo de la
muerte del SUTEP. Reconozcan a tales joyitas a
continuación.
• “Hay que hacer lo que sea para desaparecer
al SUTEP” (Expreso).
• “Tenemos que acabarla de una vez” (Lourdes
Alcorta…).
• “Dirigencia Sindical obtusa… enervados sin-
dicalistas… delincuencia… accionar artero y
criminal” (Director de Expreso).
• “Son parte de esta cultura de la mediocri-
dad” (El genio Nicolás Lynch).
• “Disolver el SUTEP”. “No hay solución para
el Perú mientras el SUTEP domine a los maes-
tros” (Martha Hildebrandt).
• “Proyecto que hace temblar al SUTEP” (Co-
rreo: Proyecto para que cualquiera pueda ser
docente).
Falta, en la sarta de reaccionarios, el ejecutor
del modelo neoliberal, el fujimorista Boloña,
quien manifestara que para que funcione el
modelo económico neoliberal en el Perú tenían
que desaparecer la Federación de Empleados
Bancarios (FEB) y el SUTEP. Lograron liquidar
a la FEB, pero el SUTEP siguió y sigue vigente
para pesar de los negociantes de la educación y
los tontos útiles que se prestaron y prestan para
acabar con tan histórico gremio.
II. PARALELISMO SINDICAL EN
ACCIÓN
A partir de 1977, aparece el grupo Puka Llacta
imbuido de radicalismo pequeñoburgués, cuya
prédica “moralista” y anarquista carece de ar-
gumentos ideológicos y políticos. Hasta ahora
no han esclarecido el nefasto rol que cumplie-
ron al oponerse al HISTÓRICO PARO NACIO-
NAL del 19 de julio de 1977. Cuando tenían
el control de la dirigencia de la Federación de
Trabajadores de Centromín Perú, emitieron un
8. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
8
comunicado que dicha Federación no acataba
el Paro porque era un PARO REVISIONISTA. He-
cho histórico que demuestra el dogmatismo que
ostentan algunos caudillos pequeñoburgueses,
que hoy aparecen hablando de un “nuevo sin-
dicato magisterial” (Magisterio: 2007, 17).
Los Pukallactas realmente son radicales de pa-
labra. No asumen la lucha multifacética. Solo
se preocupan de lo económico y siembran el
apoliticismo. Su oposición, por “principio” al
centralismo democrático y a toda institucionali-
dad y disciplina estatutaria, lo convierte en una
corriente centrífuga y disolvente, contraria al
elemental sentido de unidad. No es sino una de
las expresiones figurativas de la pequeña bur-
guesía radicalizada.
A veces, asumen el “sindicalismo revoluciona-
rio” de sus pares CONARES; que no es sino la
expresión gremial del espontaneísmo ideológi-
co y político. Es la confusión del rol del Partido
revolucionario con el Sindicato clasista, que si
bien no son antagónicos, tampoco son una sola
cosa; tienen objetivos, formas de unidad y orga-
nización distintas, así como diferentes formas y
estilos de conducción y lucha. Esta deformación
y confusión liquidacionista, intolerante y sectaria
que hace trizas al frente único, pretende hacer
“política revolucionaria” a través del gremio,
cree que la relación del Partido con las masas
se produce a través del sindicato, al punto que,
finalmente, se convierte en un ente subsidiario
del gremio al Partido, en una suerte de segun-
dón, prescindible, para la conducción política
de los sindicatos.
Este grupo radicaloide profundiza su acción di-
visionista y paralelista en el gobierno de Tole-
do. Proclaman asumir la independencia política
de clase, sin embargo pactaron con el Ministro
de Educación Nicolás Lynch la nefasta labor de
destruir al SUTEP, junto a los llamados “SUTEP
democrático” y CONARE-SUTEP. Por ello, en su
vocero “Magisterio” (2007, 5) expresan cínica-
mente lo siguiente:
“a) Ruptura orgánica del SUTEP, inicialmen-
te en dos grandes bloques: el del CEN del SU-
TEP, ligado a “Patria Roja” y el de la oposición
clasista que se reunió en Huancayo para fijar el
inicio de la VIII Huelga al margen del organismo
oficial encabezado por Nílver López. El impulso
de esta huelga partió de la oposición clasista
que fijó el 14 de mayo del 2003 como fecha
de comienzo de huelga. Este acuerdo movió al
CEN del SUTEP a realizar su propio evento y
TAMBIÉN ACORDAR UN INICIO DE HUELGA
PARA EL 12 DE MAYO, DOS DÍAS ANTES. Estos
dos eventos y las dos fechas de comienzo de la
VIII Huelga son una muestra clara de la ruptura
del SUTEP después de 31 años”.
Tal confesión de parte del grupo Puka Llacta
muestra, en cuerpo entero, el vergonzante rol
de prestarse al juego de los funcionarios del Mi-
nisterio de Educación, para que no se atiendan
los justos reclamos del magisterio nacional. Es-
tos caudillos pequeñoburgueses, Huaynalaya,
Jurado y Huertas, impulsaron eventos divisionis-
tas y paralelos en Cusco, Arequipa y Huancayo,
todos financiados por dichos funcionarios para
confundir y hacer fracasar las luchas del SUTEP.
La ruptura no se dio en el SUTEP, sino en
lo que ellos llaman “oposición clasista”, léa-
se CONARE, Puka Llacta y otros especímenes
desclasados. “Fallido Congreso Estatutario
de La Cantuta (2003), que debió poner las
bases para una justa y eficiente organización
de la oposición clasista que había dado el im-
pulso a la VIII Huelga del SUTEP. No primó la
razón política sino el sectarismo retardatario a
tal punto que se quiso reinstaurar, al pie de la
letra, el Estatuto del SUTEP de 1972. Ruptura
de la oposición en dos bloques” (“Magis-
terio”: 2007, 5). Hecho que demuestra que los
Pukallactas se han especializado en participar
de ruptura en ruptura en el movimiento magis-
terial. Así como despotricar de sus propios alia-
dos en las aventuras divisionistas y paralelistas
al servicio de los gobiernos de turno. Por ello,
desenmascara y despotrica de su socio Huayna-
laya abiertamente:
9. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
9
“Fallida Huelga ‘Nacional´
del SUTEP (2004), impulsada
por el ahora denominado CO-
NARE-SUTEP. Esta huelga su-
puestamente nacional fue un
acto voluntarista de típico carác-
ter pequeñoburgués que terminó
sin pena ni gloria con una deplo-
rable “Acta de 14 puntos”, donde
dirigentes afines a Huaynalaya
firmaron todo lo que el gobierno
quiso, y avalaron la racionaliza-
ción que deja sin el servicio de
la educación pública a muchas
zonas de la sierra y selva” (“Ma-
gisterio”: 2007, 5). ¡EL SUTEP ES UNO SOLO Y NADIE LO DIVIDE!
III. EL ANARQUISMO Y LAS FORMAS
DE LUCHA
Contreras (2004) nos recuerda que toda orga-
nización del campo laboral, independientemen-
te de la composición de sus integrantes –obrero
o profesional- debe asumir diversas formas de
lucha; es decir, desarrollar actividades, accio-
nes y medidas de lucha en los diversos campos
del quehacer laboral, con el propósito de con-
seguir sus objetivos. Entre las principales formas
de lucha podemos señalar las siguientes: reivin-
dicativa o económica, ideológica, política o so-
cial, y en el caso del magisterio, la pedagógica.
Al respecto, la lucha que enarbola el grupo
Puka Llacta es meramente economicista. En lo
político e ideológico, todo su accionar se centra
en desprestigiar a Patria Roja, coincidiendo con
la derecha al afirmar que dicha organización es
culpable de la situación de postración del ma-
gisterio nacional. Sobre la lucha pedagógica,
no tienen ninguna propuesta.
Además, despotrican de las fuerzas de izquierda
que asumen la lucha en el frente electoral; a
pesar que sus socios en la aventura paralelista
son asiduos participantes en las diversos proce-
sos electorales. Veamos el historial “electorero”
–término muy utilizado por los pukas para des-
calificar a sus adversarios- de los “dirigentes”
de FENDEP.
1) Edgardo Arturo ESCOBAR PORRAS de Pas-
co, quien aparece como Secretario General.
- Afiliado a la organización política TODOS
POR PASCO desde el 09 de mayo de 2007.
- Fue candidato a Consejero Regional en
2006, por el partido Alianza para el Progre-
so, partido del negociante de la educación
César Acuña Peralta, dueño de la UCV y ac-
tual alcalde de Trujillo.
- Además, don Escobar Porras es un hombre
dedicado a los negocios, ya que figura como
gerente general de la Empresa Constructo-
ra de Edificios Servicios Múltiples Esgilocar
SAC, con sede en Chaupimarca, Pasco.
2) Miguel Agustín PUESCAS RODRÍGUEZ de
Piura, denominado Subsecretario General.
- Afiliado a la organización política TODOS
UNIDOS POR EL PERÚ desde el 06 de di-
ciembre de 2013.
- Fue candidato a Consejero Regional en
10. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
10
La violencia anarquista en acción...
2010, por la organización política UNIDAD
REGIONAL.
- Puescas es un caso peculiar, típico anarquis-
ta que a veces es conarista de Proseguir y,
otras, de MOVADEF. Al final figura como
aliado de Puka Llacta.
En agosto de 2009, firma la convocatoria a la
Asamblea Nacional Extraordinaria de Unidad
de Conare (01 de agosto de 2009) junto a
Juan Garro Palacios (Áncash) y César Tito Rojas
(Puno), reconocidos militantes del MOVADEF.
Hoy aparece agitando junto a los pukas: ¡Ni Pa-
tria ni Sendero…! Mientras que hace poco vo-
ciferaba: ¡Viva la reorientación y reconstitución
clasista del SUTEP! ¡Abajo la política de crimi-
nalización de las luchas populares, No a la per-
secución, Libertad para los presos políticos! ¡Por
el éxito de la Asamblea Nacional Extraordinaria
de Unidad! Qué tal camaleón don Miguel, que
hoy pregona con los pukas renovación y nuevos
dirigentes, cuando hace diez años figura como
Secretario General del supuesto SUTE-Piura,
que en realidad es una ONG, propiedad de
Puescas y Arbañil.
Pero ello no importa a los autores intelectuales de
FENDEP, lo más importante es que Puescas es un
rabioso enemigo de Patria Roja y el CEN del SU-
TEP; hecho que consideran como requisito funda-
mental para tenerlos en cuenta en toda aventura
paralelista, con el fin de desprestigiar a PR.
3) Eusebio TIMANÁ CHÁVEZ de Tum-
bes, quien aparece como Secretario
de Prensa y Propaganda.
- Afiliado a la organización política
PARTIDO NACIONALISTA PERUA-
NO desde el 28 de octubre de 2010.
4) Rosa Elena GUERRERO CHIROQUE
de Tumbes, denominada Secretaria
de Autodefensa.
- Afiliado a la organización política
PARTIDO NACIONALISTA PERUA-
NO desde el 28 de octubre de 2010.
5) Julia Loreta REVILLA BENDEZÚ de
Ica, quien aparece como Secretaria de Eco-
nomía y finanzas.
- Fue candidata a Consejero Regional en
2006 en Ayacucho, por la organización po-
lítica fujimorista AGRUPACIÓN INDEPEN-
DIENTE SÍ CUMPLE.
- El caso de Revilla es similar al de Puescas,
hasta hace poco fue una rabiosa conarista y
ahora repite: ¡Ni Patria ni Sendero…!
6) Roberto Reyes ROSILLO CUEVA de Piura, de-
nominado Secretario de Derechos Humanos.
- Fue candidato a Regidor Provincial de Piura en
2010 por la Alianza Electoral Unidad Regional.
7) Montgomery Abel LESCANO SALAZAR de
Lambayeque, quien aparece como Secreta-
rio de Relaciones Sindicales y Populares.
- Fue candidato a Regidor distrital de Pomal-
ca, Chiclayo, en 2006, por la organización
política OBRAS.
8) Luis Fernando DEZA COASACA de Arequi-
pa, denominado Secretario de Asuntos Estu-
diantiles y Relaciones con Padre de Familia.
- Fue candidato a Regidor distrital de Lomas
en 2010, por la organización política ARE-
QUIPA RENACE.
9) Marcelina SERRANO SALAS de Cusco, aparece
como Secretaria de Orientación y Promoción de
la Mujer.
- Fue candidata a Regidor distrital de Wan-
chaq en 2006, por la organización política
11. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
11
FRENTE INDEPENDIENTE MORALIZADOR (FIM), en vista que no logró su objetivo, probó suerte
como candidata a congresista en las elecciones generales 2006, con el mismo FIM.
Sobre lo señalado, no estamos en contra de participar en los diferentes frentes de lucha; lo que
cuestionamos es la hipocresía de los Pukas de condenar la lucha electoral, mientras que sus aliados
sí lo hacen. Claro, mientras no sean militantes de PR todo está permitido. Ese es el accionar “polí-
tico” de los pequeño-burgueses radicalizados.
IV. EL ANARQUISMO Y LA HUELGA
La fuerza y el protagonismo de la clase traba-
jadora en el mundo ha logrado en la historia
de la legislación laboral tres derechos funda-
mentales: la sindicalización, la negociación
colectiva y la huelga. Con el primero, los tra-
bajadores obtienen fuerzas y con la huelga ejer-
cen presión social. La negociación colectiva o
llamada también Trato Directo, es un tipo de lu-
cha que permite al Sindicato exponer sus reque-
rimientos –Pliego de reclamos o Plataforma de
lucha- que, debidamente sustentados pueden
convertirse en disposición legal o aceptados por
la patronal en forma temporal o definitivamen-
te; generalmente se desarrolla en vísperas de
una confrontación o cuando esta es un hecho;
su éxito depende mucho de la correlación de
fuerzas (Contreras: 2004).
En torno a lo señalado, los anarquistas y sus
socios, embarcados en la empresa paralelista
FENDEP, confiesan: “Ya no decimos glorioso
SUTEP, pues todas nuestras luchas, desde su
fundación hasta la fecha, han sido traicionadas
por esta dirigencia y sus acólitos en todas par-
tes del Perú (sic) con el exclusivo propósito de
mantener privilegios y prebendas…” (Acta de
fundación de FENDEP, 2014).
Para rebatir tal acusación basta recordar lo su-
cedido en la última Huelga Nacional, cuando
los anarquistas de todo pelaje vociferaban la
defensa irrestricta de la Ley del Profesorado,
pero cuando se consiguió dicha norma median-
te diversas acciones de lucha, como moviliza-
ciones, plantones, toma de locales, paralizacio-
nes y la Huelga de hambre de tres dirigentes
nacionales, los mismos anarquistas manifesta-
ron que no se había conseguido nada solo va-
len, porque “la Ley no se come”; de tal manera,
que las conquistas cuando ellos lo logran. Puro
nihilismo pequeñoburgués.
Asimismo, existe un texto sobre el desenlace de
la IX Huelga Nacional del SUTEP que Puka Llac-
ta publicó en el mal llamado Magisterio (2007,
pág. 8), que es necesario analizar.
“Las fuerzas magisteriales organizadas en el SU-
TEP se enfrentaron al Estado patronal adminis-
trado por el APRA para impedir la aprobación
de una ley anti-magisterial. Lo hicieron con una
huelga unitaria que tuvo gran apoyo popular y
se dio al calor de amplias luchas del pueblo pe-
ruano, pero no lograron su objetivo. El magis-
terio organizado en el SUTEP fracasó en
la primera gran batalla contra la ley de
CPM: no se logró impedir su aprobación.
Este es un hecho macizo e incontrovertible que
debe tomarse muy en cuenta para analizar el
desenlace de la huelga. Desde una óptica mili-
tar al no conseguirse los objetivos del combate
sindical, lo correcto hubiese sido dar inmedia-
tamente la orden de repliegue ordenado para
conservar fuerzas con miras a futuras batallas.
Esto es lo racional, coherente y desapasionado,
y lo que dicta la contradicción principal, donde
el aspecto principal y más fuerte es el Estado
patronal. Frente a un enemigo más fuerte es un
suicidio dar luchas “definitivas”, hasta las últi-
mas consecuencias”.
Parece que el “ideólogo” Arrué se inspiró y
planteó algo coherente para abordar el desen-
lace de una medida de lucha tan extrema como
la huelga, salvo desconocer la integralidad de
12. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
12
la Plataforma de lucha. Toda dirigencia respon-
sable tiene que saber luchar con razón, ventaja
y sin sobrepasarse, teniendo en cuenta la corre-
lación de fuerzas y manteniendo la unidad de
sus afiliados. Hecho que siempre se ha realiza-
do en el Comité Nacional de Lucha del SUTEP:
partir de la realidad y no de los deseos. Pero,
como los pukallactas nacieron en 1977 vocife-
rando traición a raudales, su raleada militancia
ya lo ha considerado como un “principio”: toda
huelga es traicionada. Por ello, la reflexión de
Arrué no es gratuita, tiene un propósito, que al
final vamos a percibir. Veamos qué más dice el
“ideólogo”:
“Para los fines prácticos de la IX Huelga, la lu-
cha que se dio después de promulgada la ley
29062 ya nada tenía que ver con el objetivo
central de la huelga, porque en lo inmediato
era materialmente imposible conseguir la dero-
gatoria de esa ley. Lo único que justificaba la
prosecución de la huelga por unos días más,
era lograr una salida honrosa, con las menores
represalias posibles.
¿Dentro de estas condiciones y caracterís-
ticas, caben las acusaciones de traición?
¿Levantar o suspender la huelga cuando
ya era materialmente posible conseguir
el objetivo central de la huelga, era trai-
cionar?”
Interesante pregunta, que los pukallactas dog-
máticos muchas veces olvidan y expresan que
toda huelga del SUTEP ha sido traicionada, tal
como figura en el mamotreto de Estatuto de los
fendepillos, que hemos presentado: “…todas
nuestras luchas, desde su fundación hasta la fe-
cha, han sido traicionadas por esta dirigencia
y sus acólitos…”. Reiteramos, tal afirmación de
los pukas es refutada por los mismos pukas;
“Entonces, si suspender la huelga cuan-
do muchas bases de provincias querían
seguir luchando era traicionar, esta IX
Huelga ha tenido dos connotados traido-
res: Muñoz (SUTEP oficial) y Huaynalaya
(CONARE-SUTEP).
Sin embargo, esta es una conclusión fa-
laz, simplona y poco útil para el futuro
de un SUTEP verdaderamente renovado y
fuerte. Lo correcto hubiese sido que has-
ta el final se dé la unidad en la acción.
Incluso para suspender conjuntamente la
huelga” (Magisterio: 2007, pág. 8), el subra-
yado es nuestro.
Sobre lo manifestado anteriormente precisamos
lo siguiente:
1. La IX Huelga Nacional comprometió a las
diversas fuerzas políticas que tienen influen-
cia en el movimiento magisterial, asumiendo
la UNIDAD en la acción, considerando en
la Comisión de trato directo, fundamental-
mente, a Luis Muñoz (Secretario General del
CEN-SUTEP), Robert Huaynalaya (CONARE)
y Armida Huerta (FCM-Puka Llacta).
2. Una vez más el CEN del SUTEP demostró
la práctica del Frente Único en el enfrenta-
miento al enemigo común. A veces tenía que
actuar de bisagra para unir a Huaynalaya y
Armida, cuya repulsión mutua era visible en
los otrora socios financiados por Lynch para
dividir al SUTEP. Por ello, Huerta se embarcó
con Condori de CONARE-MOVADEF para
boicotear la X Huelga Nacional, que es his-
toria reciente y necesaria de escribir en otra
oportunidad.
3. Ante la contundencia de la IX Huelga, se
inició el trata directo con el Primer Ministro,
donde participaron fundamentalmente Luis
Muñoz y Armida Huerta, quienes al final fir-
maron el Acta de suspensión de la medida
de lucha. Mientras que Huaynalaya, Garro
y Maraví del CONARE huyeron despavori-
dos; tal como lo expresa el “ideólogo” Arrué
(2007):
“Estos, a último momento se arrepintieron de
participar en los tratos con el Primer Ministro
porque no tienen una línea que les dé seguri-
dad en sus actos. Después quisieron disimular
difundiendo la especie de que no se les había
13. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
13
dejado entrar, o que no se les permitía partici-
par en el trato (después de la huelga). Lo cual
es falso porque ya existía una resolución oficial
publicada en “El Peruano” donde el gobierno
aceptaba a Huaynalaya, Garro y Maraví como
representantes del magisterio en la Mesa de
Diálogo” (Magisterio N° 6: 2007, pág, 8).
Como los pukallactas han “formado” a su gente
en el chisme, la desinformación y el odio visceral
a Patria Roja, porque supuestamente traicionan
todas las huelgas; sus propias huestes cuestio-
naron a Armida Huerta, por qué había firmado
la suspensión de la IX Huelga, conjuntamente
con Luis Muñoz Alvarado del CEN-SUTEP. Arrué
y Huerta cosecharon de su propia medicina. Por
ello, decíamos al inicio que tamaño esfuerzo
“intelectual” de Arrué buscaba hacer entender
que toda medida de lucha sindical tiene un lími-
te, cuyo correlato debe ser analizado partiendo
de la realidad y la correlación de fuerzas.
Por lo tanto, el desenlace de la IX Huelga Na-
cional del SUTEP desmiente lo que manifiestan
los fendepillos, para argumentar el paralelismo
en el glorioso SUTEP. No lo decimos nosotros,
sino los documentos de Puka Llacta. ¿Será por-
que Huerta participó en la Comisión de trato?
¿Hubiesen dicho lo mismo si no figuraba en tal
Comisión?
V. EL ANARQUISMO Y LAS
ELECCIONES DE LOS DIRIGENTES
Según el Estatuto del SUTEP (2006, pág. 22),
“la elección de los dirigentes del SUTEP, desde
los SUTE BASE hasta el CEN, es un proceso de
selección de los más calificados militantes sindi-
cales que se caracterizan por su probada con-
secuencia en la lucha, su lealtad al SUTEP y su
conducta clasista”. Asimismo, “Los dirigentes de
los SUTE BASE son elegidos en la Asamblea de
la Base, especialmente convocada para tal fin”;
así como, “Los dirigentes de las bases distrita-
les, provinciales y sectoriales (Lima y Callao),
regionales y del CEN son elegidos en la Asam-
blea Distrital, Convención Provincial o Secto-
rial, Congreso Regional y Congreso Nacional,
respectivamente”. Eventos eleccionarios donde
se evalúa la convicción, trayectoria y formación
clasista de los maestros propuestos a los diver-
sos cargos.
También, el Estatuto permite la renovación elec-
toral mediante elecciones universales: “Podrán
realizar elecciones universales desde los SUTE
Bases hasta el SUTE Regional, solo por decisión
o convocatoria de sus respectivos máximos or-
ganismos de gobierno (Asambleas, Convencio-
nes o Congresos” (Estatuto del SUTEP: 2006,
pág, 22).
De tal manera, las elecciones universales se
asumen desde el SUTE Base hasta el SUTE Re-
gional. Mientras que el CEN del SUTEP se elige
en un Congreso Nacional, que es el máximo
evento de nuestro sindicato.
Este hecho es el más criticado no solo por la
derecha cavernaria, sino por toda laya de anar-
quistas y desclasados, con el cuento que Patria
Roja se ha enquistado en el poder. Cuando no
se conoce la historia del SUTEP, se cree al anar-
quismo y a los reaccionarios. Desde la dictadu-
ra militar, durante la dictadura fujimorista y el
reino neoliberal, hemos combatido consecuen-
temente, jamás hemos abandonado nuestras
responsabilidades, ni menos sometido a gobier-
no alguno. Por ello, asumimos lo manifestado
por el maestro Julio Mendoza (2012):
“Porque el sindicalismo clasista es el de la or-
ganización institucional desde las bases, el
sindicalismo de la unidad sindical clasista. No
es el sindicalismo amarillo individualista, neo-
liberal, que busca caricaturizar el gremio con
14. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
14
las “bondades” de unas elecciones universales
en las que el votante pasa por el mero rito de
elegir dirigentes sin representación de su SUTE
BASE y que actúan facciosamente. Que una vez
elegidos actúan al margen, y a veces, en contra
de sus bases, exclusivamente en función de su
partido político o de camarillas en ausencia de
este.
Los que santifican elecciones universales, pue-
den verse en los espejos de Fujimori, Toledo,
Alan García y ahora Ollanta, elegidos de esa
manera.
No es que estemos en contra de los partidos
políticos. Estos tienen derecho a “trabajar por
su credo” en el sindicato, en el frente único,
pero que lo hagan desde las bases y seguro
que estas los respetarán porque los verán hacer
precisamente esa labor. Porque el trabajo de or-
ganización, educación y lucha de las bases, es
uno de los mejores indicadores para determinar
quiénes son los que “saben ser los mejores”.
Elecciones universales válidas son las que forta-
lecen orgánicamente a los SUTE BASE y los es-
calones superiores. Si no es así, solo benefician
a las clases dominantes”.
Los anarquistas de Puka Llacta agitan constan-
temente elecciones universales desde el SUTE
Base hasta el CEN-SUTEP y exigen: ¡Un maestro
un voto! Magnífica propuesta “democrática”,
pero para la tribuna, en los hechos hacen lo
contrario. Basta dar lectura, su novísimo Estatu-
to, donde expresan lo siguiente:
“ Artículo 44°.- La elección de los dirigentes de
la FENDEP desde los SUTEs Bases hasta el CEN
es un proceso democrático y transparente de se-
lección de los más calificados militantes sindica-
les que se caracterizan por su conducta clasista
y honesta, por sus conocimientos, capacidad de
trabajo, lealtad al gremio y consecuencias (sic)
en la lucha.
Artículo 45°.- Los dirigentes del SUTE Base son
elegidos en su IE mediante asamblea o voto se-
creto y universal.
Artículo 46°.- Los dirigentes de las bases distri-
tales, provinciales o sectoriales y regionales son
elegidos por voto secreto y universal, de todos
los afiliados al nivel sindical correspondiente
cada dos años”. (Capítulo VII: De la elección de
los dirigentes. Estatuto de FENDEP: 2014, 18).
Tales artículos son adaptaciones del Estatuto
del SUTEP, salvo puntos, comas y algunos térmi-
nos expresan lo mismo: Elecciones universales
desde el SUTE Base hasta el SUTE REGIONAL.
Incluso el artículo 49° autoriza la elección por
asamblea, convención y congreso respectiva-
mente, salvo el agregado de “en casos espe-
ciales”.
Pero el famoso “un maestro un voto” para
elegir al Comité Ejecutivo Nacional mediante
elecciones universales, no aparece por ningún
lado. Estos pukas están más desorientados que
Chiroque, sí, el mismo de educación deses-
peranza. ¿Qué plantea FENDEP para elegir a
sus dirigentes nacionales?. Veamos el artículo
50°: “Los miembros del CEN de la FENDEP
serán producto y de las Elecciones Universales
Regionales, el Secretario General Regional es
miembro nato del CEN de la FENDEP. En el
Congreso Nacional se determina el cargo que
ocupará cada uno de ellos hasta completar los
18 cargos”.
Total, dónde está la pregonada elección univer-
sal desde las bases hasta el CEN, si solo se va
a generar este proceso hasta el SUTE Regional.
Incluso considerar solo a los secretarios regio-
nales, constriñe el derecho de elegir y ser elegi-
do a todo maestro encargado por su base para
que asista al Congreso Nacional. Por ello, ya
alguien dijo: a los hombres hay que calificarlos
por lo que hacen y no por lo que dicen. Tanto
grito de Huerta, Calla, Puescas y otros especí-
menes anarquistas, para terminar ahogados en
su propio veneno.
15. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
15
VI. EL ROL DEL ANARQUISMO EN LA
FENDEP
Como el anarquismo se cansó de ser minoría
en el SUTEP y no porque “¡Hubo (hay) manejo
poco democrático en las elecciones de los di-
versos estamentos del gremio! No solamente se
desoyó el clamor de las bases que pedían: “¡Un
maestro, un voto!”, sino que se hizo algo nor-
mal: las tachas a dirigentes electos, ajenos a las
posiciones hegemónicas. En este contexto, las
dirigencias “democráticas” y de los “sutes regio-
nales” fueron creciendo y siendo –de facto- re-
conocidos en algunos Gobiernos Regionales”,
tal como afirma irresponsablemente Chiroque
(2014) en su blog Educación desesperanza.
Sobre el caso planteado por Chiroque, trae-
mos a colación lo sucedido el 2000 en el SUTE
DOCE SECTOR, correspondiente a Comas y
Carabayllo. Armida Huerta, máxima dirigente
del FCM-Puka llacta ganó las elecciones uni-
versales por 20 votos. Ejerció su mandato sin
ningún problema. Participaron en los diversos
eventos orgánicos del SUTEP con voz y voto.
Hasta ahora existen fotos en el periódico SUTEP,
de esa época, en que se indicaba su accionar
sindical en respeto al carácter de Frente Único
del gremio. Incluso cotizaban puntualmente al
CEN del SUTEP, tal como emana nuestro Esta-
tuto.
El asunto es que Chiroque se hace el tonto en
cuanto a los errores de dirección y conducción
de sus socios anarquistas. Como cuando consi-
deran como principio las elecciones universales
y no como mecanismo democrático de elección
de dirigentes. Por ello, en las siguientes eleccio-
nes universales, Huerta fue reemplazada por una
opción de unidad sindical clasista, que desen-
mascaró la posición radicaloide, supuestamente
democrática, de Puka Llacta. Por ejemplo, siem-
pre pregonaron que los representantes del SUTE
DOCE en las diversas Comisiones de trabajo en
la UGEL 04-Comas, iban a ser designados en
Asamblea de delegados. Jamás cumplieron. To-
dos los representantes fueron designados a dedo
por los pukallactas. Por ello, Chiroque no es tonto
útil del anarquismo, sino es parte de esta campa-
ña de paralelizar al SUTEP, ya que escribe mentiras
con el fin de apoyar a sus amigos y desprestigiar a
la vanguardia del SUTEP.
Además, señala Chiroque que “Los grupos gre-
mialistas “Ni Patria, ni Sendero” también se or-
ganizaron sin romper el SUTEP en la década
del 2000 (“Sutes democráticos” y “Sutes regio-
nes”)…Y justamente estos grupos (con excepción
de la CNM) son los que han buscado legalizarse
sindicalmente, pero creando una nueva organiza-
ción: La FENDEP. Por ello, no es tan verdad que en
esta organización tenga hegemonía “la gente de
Sendero”, como se ha informado en campañas
mediáticas y desde el CEN SUTEP”.
¡Qué tal zamarro Chiroque! Dice que Sendero
no tiene hegemonía, pero implícitamente reco-
noce su presencia, no solo porque sus dirigentes
sean redomados conaristas como Puescas y Re-
villa, sino por lo que expresa la declaración de
principios de su Estatuto:“La lucha política toma
muchas veces la forma de enfrentamiento militar,
de guerra o de lucha armada. Es que la guerra es
la prolongación de la política por medios violen-
tos” (Estatuto de FENDEP: 2014, pág. 7 y Ramos:
2014, pág. 4).
Ni el mismo Escobar, gerente o secretario gene-
ral de FENDEP, sabía lo que contenía su Estatuto.
Quién introdujo tales principios, propios de los
partidos revolucionarios de antaño. Por ello, de-
clara a la revista Hildebrandt en sus trece (2 de
mayo de 2014, pág. 5): “Fue un tremendo error
usar esas expresiones”.
Ah, pero como la FENDEP representa el nuevo
sindicalismo en el Perú, en una semana ha realiza-
16. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
16
do un Congreso Estatutario y ha corregido lo que
molesta a sus aliados del gobierno. Ay, Chiroque
para qué te metiste en este zafarrancho, sigues el
mismo camino de tu carnal Gallardo; de viejos
se convierten en enemigos gratuitos del Sindicato.
Cuando el gremio siempre les invitaba a los diver-
sos eventos pedagógicos para compartir experien-
cia sobre educación y sindicalismo.
Tamaña viveza de los fendepillos es informado a
la revista Hidebrandt en sus trece (9 de mayo de
2014, pág. 37), por el mismo Edgardo Escobar,
mediante una carta notarial, que a la letra dice:
“…hemos realizado un Congreso Estatutario Ex-
traordinario, en el que se han hecho todas las co-
rrecciones para estar en total concordancia con
la Constitución y la Ley”. En el caso de Escobar
no sorprende, porque este es un tránsfuga que
se adecúa de acuerdo a sus intereses; pero los
pukallactas, que son aparentemente los únicos
revolucionarios puros, persistirán en esta felonía
paralelista y de sometimiento a la Constitución del
Estado burocrático con el cual piensan acabar.
¡Qué triste final de Puka Llacta!
Finalmente, ¿qué significa Pukallacta? Alguno de
sus ahora enemigos, como Zenón Pantoja de CO-
NARE, afirmaba que significaba ¡Patria Roja! ¡Ca-
ramba! Tamaño atrevimiento de don Zenón. La
misma Armida Huerta Gonzáles (DNI 08539958)
aclara al respecto, en una carta enviada a la revis-
ta Caretas, edición 1778, “Finalmente, Puka Llac-
ta no significa `bandera roja’ sino `pueblo rojo’
o quizá `comarca roja’.” Tal carta, buscó justificar
la marcha que realizó de los brazos de Meche Ca-
banillas. ¡Abajo el sindicalismo propatronal!
ARTICULO 13 de junio de 2003
Páginas 38 y 39 de la edición impresa.
Maestro contrario a la dirección del Sutep, el sábado 7, en intento frustrado de tomar la
sede de éste. Derecha, Encuentros cercanos de Meche Cabanillas y la adversaria de la
dirección del Sutep Armida Huertas (en el círculo). La congresista abrió paso a los
extremistas que agredieron a Nílver López en el Congreso.(CARETAS, EDICIÓN 1776:
13/06/03, págs.. 38-39).
ARTICULO 13 de junio de 2003
Páginas 38 y 39 de la edición impresa.
Maestro contrario a la dirección del Sutep, el sábado 7, en intento frustrado de tomar la
sede de éste. Derecha, Encuentros cercanos de Meche Cabanillas y la adversaria de la
dirección del Sutep Armida Huertas (en el círculo). La congresista abrió paso a los
extremistas que agredieron a Nílver López en el Congreso.(CARETAS, EDICIÓN 1776:
13/06/03, págs.. 38-39).
ARTICULO 13 de junio de 2003
Páginas 38 y 39 de la edición impresa.
Maestro contrario a la dirección del Sutep, el sábado 7, en intento frustrado de tomar la
sede de éste. Derecha, Encuentros cercanos de Meche Cabanillas y la adversaria de la
dirección del Sutep Armida Huertas (en el círculo). La congresista abrió paso a los
extremistas que agredieron a Nílver López en el Congreso.(CARETAS, EDICIÓN 1776:
13/06/03, págs.. 38-39).
17. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
17
CONCLUSIÓN
El grupo PUKA LLACTA y los rezagos del CONARE-Piura se han embarcado
en una nueva aventura paralelista, conjuntamente con algunos funcionarios
del Ministerio de Educación, al constituir una Federación Nacional de Edu-
cadores del Perú (FENDEP), que fue reconocida por el Ministerio de Trabajo.
Para ello utilizaron estilos y métodos ajenos a los principios del sindicalismo
clasista; más bien se han prestado a colaborar con el gobierno neoliberal ac-
tual, guiados por su odio visceral al Comité Ejecutivo Nacional del SUTEP. Sin
embargo, ante la firme denuncia del Secretario General del SUTEP han deja-
do sin efecto tal reconocimiento legal. A pesar de ello, estos sujetos seguirán
en esa nefasta tarea de confundir y paralelizar al gremio, aprovechándose
de la desinformación; de tal manera, que seguiremos desenmascarando el
accionar anarquista en el seno del magisterio.
Referencias
1. VILDOSO, Carmen. (1992). Sindicalismo clasista: certezas e incertidumbres. Lima: Edaprospo.
2. SUTEP. (2004). Estatuto del SUTEP y su reglamento.
3. CONTRERAS, Juan. (2004). El sindicalismo clasista, su doctrina, principios, y métodos de dirección y
conducción. Lima: I Escuela Sindical Nacional HZG.
4. BREÑA, Rolando. (2006). “Muerte al SUTEP”. Lima: Diario CORREO.
5. AURIS MELGAR, Olmedo. (2004). Las huelgas y logros del SUTEP.
6. SUTEP. (2006). Estatuto del SUTEP y su reglamento.
7. MENDOZA, Julio. (2012). Una hoja de ruta contra la ley de Reforma Magisterial.
8. MAGISTERIO. (2007). Necesitamos un nuevo sindicato magisterial. Lima: N° 06, octubre – noviembre
2007. Frente Clasista Magisterial*.
9. RAMOS, Alonso. (2014). Peligrosa radicalización. Lima: Revista Hidebrandt en sus trece, Año 5, N° 200.
Viernes, 2 de mayo de 2014. Pág. 5.
10. ESCOBAR, Edgardo. (2014). Carta notarial de FENDEP. Lima: Revista Hidebrandt en sus trece, Año 5,
N° 201. Viernes, 9 de mayo de 2014. Pág. 37.
11. HUERTA, Armida. (2003). Carta a CARETAS, edición N° 1778, 26 de junio de 2003.
12. LÉVANO, César. (2003). Meche con la mecha corta. En: CARETAS, edición N° 1776, 13 de junio de
2003. Págs. 38-39.
18.
19. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
19
Julio 2014
DESLINDE CON EL
ANARQUISMO
PROPATRONAL
CONTENIDO
I. Importancia de la organización de los trabajadores
II. La organización sindical y el Frente Único
III. El SUTEP y el Frente Único
IV. Unidad sindical clasista
V. ¡Ni Patria ni Sendero!
VI. Magisterio de Lima
EL CUENTO DEL “AMIGO” SIGFREDO
FENDEPILLOS: OTRO INTENTO ANARQUISTA DE LIQUI-
DAR AL SUTEP
BOLETÍN Nº2
¡Por la Unidad Sindical Clasista!
20. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
20
DESLINDE CON EL ANARQUISMO
PROPATRONAL (2)
I. Importancia de la organización de
los trabajadores
Para el desarrollo de su lucha sindical y política,
los trabajadores urgen de una organización. El
tipo de organización está diseñado por circuns-
tancias y consideraciones políticas, según las
condiciones concretas de la lucha, de los objeti-
vos y las tareas político o sindicales planteadas,
de acuerdo a la correlación de fuerzas, de la es-
trategia y tácticas a seguir. Es el instrumento, la
fuerza material indispensable que permite apli-
car una determinada dirección y conducción.
Debe existir, pues, una ligazón entre la dirección
y la organización; esta debe cumplir los objeti-
vos y tareas que se desprenden de aquella; su
discordancia genera crisis de dirección (Estatuto
del SUTEP, 2012).
Tal apreciación sobre la importancia de la or-
ganización de los trabajadores lo podemos per-
cibir en la investigación de la socióloga Vildoso
(1992):
“La primera mitad de la década del setenta es-
tuvo acompañada de condiciones favorables
para el avance del movimiento sindical: un cre-
cimiento económico sostenido desde mediados
de los años cincuenta, la política reformista del
primer gobierno de Acción Popular y especial-
mente del Gobierno Militar en su primera fase.
En este contexto, la intensa labor de organiza-
ción realizada por sindicalistas y cuadros polí-
ticos contribuyó a impulsar profundos cambios
al interior de las fábricas, los trabajadores con-
quistaban el reconocimiento de derechos mien-
tras el sindicalismo aportaba a una acumula-
ción de fuerzas que impactó en la sociedad en
su conjunto”.
Al respecto, mientras el clasismo ganaba la
conciencia de los trabajadores y los organiza-
ba en diversos gremios, el anarquismo liqui-
dador siempre apostaba por la división de los
sindicatos, como fieles guardianes de presa de
los explotadores y funcionarios del Estado; por
ello, consideran como algo natural una supues-
ta ruptura del SUTEP y sostienen alegremente
que “la ruptura efectiva y práctica del SUTEP es
parte del proceso histórico de un sindicato que
nunca se renovó, que había caído en el buro-
cratismo y que dejó de practicar el frente único”
(Magisterio: 2007, 5).
De tal manera que Pucallacta, de Armida Huer-
ta y CONARE, de Puescas y Revilla hipotética-
mente dan un salto “cualitativo” en su sinuoso
accionar político y forman una Federación Na-
cional de Educadores del Perú (FENDEP) y, pa-
radójicamente, asumen el lema: “Por un frente
único magisterial”. Habría que indagar el por
qué Pucallacta y sus socios de CONARE han
desistido de sus respectivos lemas: “Por la línea
sindical clasista” y “Por una línea de clase en el
movimiento magisterial”.
II. La organización sindical y el
Frente Único
Según Contreras (1999), en el devenir histórico,
el sindicato surge en el capitalismo por dos ra-
zones fundamentales:
- Una realidad social injusta, de explotación,
deshumanización.
- Una conciencia de los trabajadores de de-
fenderse frente a esta opresión, de conocer
a sus adversarios principales o aquellos que
los representan, tener claridad en el por qué
y para qué luchar, y cuál es la misión del
sindicato.
21. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
21
¿Qué es un Sindicato y cuál su
característica fundamental?
El sindicato es una agrupación de trabajadores
de diversas ideologías o pensamientos, que tie-
nen intereses comunes y persiguen los mismos
objetivos y propósitos. El carácter de su organi-
zación es de Frente Único, vale decir, conforma-
dos por trabajadores con los mismos derechos y
deberes a pesar de sus diferencias ideológicas,
políticas, de credos, étnicas, etc. Es su naturale-
za y no un principio. Por lo tanto todo sindicato
no pretende imponer una sola ideología, sino
que busca amalgamar las diferentes ideas re-
novadoras, promueve la unidad, la solidaridad.
Por ello, “ya en los albores del capitalismo, los
obreros comenzaron a comprender que para
luchar contra los patrones era necesario unirse,
organizarse”; asimismo, “cuando en Inglaterra
se operaba la revolución industrial que dio co-
mienzo al capitalismo industrial, las uniones de
los obreros –los sindicatos- empezaron a surgir
en todas partes” (Veber: 1965, 75-76).
Tanto la unidad de los trabajadores como el
carácter de frente único de los sindicatos están
intrínsecamente relacionados, porque lo ideal
sería que todos los trabajadores estén unidos
pero ello no ocurre en más de los casos. Por
eso la construcción del Frente Único tiene que
ver con encontrar los puntos coincidentes que
como trabajadores es posible afirmar, indepen-
dientemente de la ideología, partido, dogma o
credo que cada uno pudiera profesar.
Quien mejor trata el tema del frente único en el
país es el Amauta José Carlos Mariátegui; sin
embargo, aquellos que dicen ser mariateguistas
e incluso consideran su efigie como logo, no
practican lo que predican; ya que Mariátegui
(1924) sostuvo al respecto lo siguiente:
“El frente único no anula la personalidad, no
anula la filiación de ninguno de los que lo com-
ponen. No significa la confusión ni la amal-
gama de todas las doctrinas en una doctrina
única. Es una acción contingente, concreta,
práctica. El programa del frente único considera
exclusivamente la realidad inmediata, fuera de
toda abstracción y de toda utopía: Preconizar
el frente único no es, pues, preconizar el con-
fusionismo ideológico. Dentro del frente único
cada cual debe conservar su propia filiación
y su propio ideario. Cada cual debe trabajar
22. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
22
Expresión combativa y unificada de las masas magisteriales
por la conquista de sus derechos.
por su propio credo. Pero todos deben sentir-
se unidos por la solidaridad de clase, vincula-
dos por la lucha contra el adversario común,
ligados por la misma voluntad revolucionaria,
y la misma pasión renovadora. Formar un fren-
te único es tener una actitud solidaria ante un
problema concreto, ante una necesidad urgen-
te. No es renunciar a la doctrina que cada uno
sirve ni a la posición que cada uno ocupa en
la vanguardia. La variedad de tendencias y la
diversidad de matices ideológicos es inevitable
en esa inmensa legión humana que se llama
el proletariado. La existencia de tendencias y
grupos definidos y precisos no es un mal; es por
el contrario la señal de un período avanzado
del proceso revolucionario. Lo que importa es
que esos grupos y esas tendencias sepan enten-
derse ante la realidad concreta del día. Que no
se esterilicen bizantinamente en exconfesiones
y excomuniones recíprocas. Que no alejen a
las masas de la revolución con el espectáculo
de las querellas dogmáticas de sus predicado-
res. Que no empleen sus armas ni dilapiden su
tiempo en herirse unos a otros, sino en combatir
el orden social, sus instituciones, sus injusticias
y sus crímenes”.
III. El SUTEP y el Frente Único
El SUTEP, como sindicato,
tiene naturaleza de Frente
Único, por eso se busca que
la conducción sea unitaria,
con la mayor amplitud posi-
ble, aglutinar a la inmensa
cantidad de trabajadores y
sectores que tengan que ver
con la educación y con las
reivindicaciones históricas
y coyunturales del pueblo y
del magisterio.
El respeto al Frente Único es
el fortalecimiento de la or-
ganización sindical, es la sana competencia en-
tre diferentes ideologías, es promover el espíritu
creador de sus agremiados, lo que contribuye
a que las masas puedan seleccionar a sus re-
presentantes, u opten por apoyar determinada
orientación; de tal manera, el Frente Único sig-
nifica, pues, democracia y a la vez centralismo,
y, en la práctica, refleja la verdadera represen-
tatividad de las ideas o propuestas existentes en
el sindicato.
Del mismo modo, se demuestra su vigencia
cuando quienes conforman la organización
sindical respetan sus principios, aceptan y de-
fienden sus Estatutos, luchan por el Pliego de
Reclamos y acatan los acuerdos y medidas de
lucha de la organización sindical.
Por ello, es risible que Pucallacta y CONA-
RE-Piura asuman como lema el frente único
cuando se han caracterizado siempre como es-
pecialistas en dividir y destruir instituciones; así
como desconocer acuerdos y conquistas de los
trabajadores donde no han estado presentes
como conducción, convirtiéndose así en ele-
mentos útiles, ya sea directa o indirectamente,
en favor de los explotadores.
Al respecto, acusan cínicamente al CEN de
no respetar el Frente Único y reclaman la “de-
23. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
23
mocratización” del SUTEP; empero, son los
anarquistas pro-patronales los primeros en no
respetar los acuerdos ni las opiniones de los
maestros, en tratar de paralelizar y romper el
frente único a fin de imponer sus descabellados
puntos de vista, como si el sindicato fuera su
partido. Y, si no, ¿Qué significa que, sin consul-
tar a nadie, usurpando la voluntad de las bases
aprueben su propio “pliego” de reclamos, “de-
creten” fecha para el inicio de la huelga y cons-
tituyan un “comité de lucha” para conducirla?
(Barrera, 2003).
IV. Unidad sindical clasista
Los trabajadores más lúcidos que formaron las
uniones de obreros y empleados para exigir sus
derechos y hacer frente a todo abuso de la clase
dominante, resaltaron el asunto de la UNIDAD
como algo fundamental en el fortalecimiento
del Sindicato y el logro de mejores condiciones
de vida y trabajo para los afiliados; por ello,
que rechazaron y combatieron la división; tal
como nos recuerda Veber (1965, 101-102):
“La división del movimiento obrero debilita al
proletariado, obstaculiza su lucha contra la bur-
guesía, facilita a los capitalistas la aplicación
de la política reaccionaria, antiobrera. Como
resultado de la división en sus filas, la clase
obrera no pudo en las décadas del 20 y el 30,
impedir al fascismo ocupar el poder durante
largos años en una serie de países, ni evitar que
los imperialistas desataran la segunda guerra
mundial”.
Por ello, la materialización de la unidad sindical
clasista se expresa sobre cuestiones concretas
que en nuestro caso significa:
a) El reconocimiento de los principios del sindi-
calismo clasista.
b) La aceptación y defensa del Estatuto.
c) La defensa del Pliego de Reclamos y el aca-
tamiento de las medidas de lucha que se
acuerdan para tal efecto. La unidad por la
unidad es precaria, no es históricamente vá-
lida, ni coyunturalmente correcta, es total-
mente efímera.
Asimismo, la conducción unitaria es sinónimo de
fortaleza y garantía para alcanzar grandes logros;
por el contrario, una conducción sectaria es fuente
de disgregación y pérdida de vista del carácter del
sindicato (Frente Único), de las condiciones, de los
objetivos estratégicos, dejando de lado los intereses
de los trabajadores; de tal manera, la conducción
sectaria termina sirviendo a los adversarios y a inte-
reses reaccionarios, aunque se quiera adornar con
fraseología radical. Lo que cuenta no es lo que se
dice, sino lo que se hace. Se puede ser clasista de
palabra, pero en los hechos ser lo contrario, se rom-
pe el Frente Único, se le termina confundiendo con
partido o secta, se le aísla y termina destruyendo.
Al respecto, creemos que en el 2012 existie-
ron magníficas oportunidades para conquistar
mejores condiciones de vida y trabajo desen-
mascarando al gobierno neoliberal de Ollanta,
pero el anarquismo mediocre, tanto de Puca-
llacta como de Sendero se aliaron, una vez más,
para debilitar la Huelga Nacional del SUTEP, tal
como recuerda Barrera (2012):
“Sendero, por eso busca reinstalarse en el ma-
gisterio y destruir la institucionalidad del SUTEP,
creando su propio SUTEP (CONARE), para ello,
hoy atiza una huelga antiunitaria y provocado-
ra, que no es nacional, solo focalizada. Con
esta aventura, otra vez, queda demostrado que
al decretar una “Huelga” de este tipo, ha termi-
nado siendo funcional e instrumental al sistema
y haciéndole el juego al gobierno capitulador
de Humala y a la derecha reaccionaria, recal-
citrante y antipopular, que los ha usado para
presentar un Proyecto de “Reforma Magisterial”,
cuyo carácter regresivo y continuista, empeora
la situación profesional, laboral y salarial de la
gran mayoría del magisterio, comprendido en
la Ley del Magisterio (24029 – 25212), pero
que premia a los pocos que se acogieron a la
Ley de Alan García – Chang, 29062”.
24. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
24
Por consiguiente, una conducción
sectaria tiende al aislacionismo
y, consecuentemente al liquida-
cionismo. Se produce cuando se
confunde el carácter de la organi-
zación imponiéndola tareas que,
por su naturaleza, no soporta. El
SUTEP es un sindicato y no un
partido, por lo tanto tiene compo-
sición, estilos y objetivos diferen-
tes, pudiendo, sin embargo, en
determinadas circunstancias his-
tóricas, coincidir en alcanzar tales
y cuales metas. La incapacidad
para unir, para trabajar con otros
de acuerdo a sus capacidades,
ritmos y particularidades, conlleva
a la intolerancia sectaria, disgre-
gando el movimiento y debilitan-
do la organización. Esta es la pré-
dica y la práctica del anarquismo
liquidador, que encabezado por
Pucallacta y Conare-Piura, termi-
na dividiendo, desarmando y debi-
litando al sindicato, sirviendo con
ello a los enemigos del pueblo.
La huelga de hambre, ollas comunes y movilizaciones son formas de
lucha de un sindicato clasista, como el SUTEPV. ¡Ni Patria ni Sendero!
Los fendepillos del ex-gobernador fujimorista de
Chaupimarca que funge de secretario general
del fantasmal y fallido “fendep”, Edgardo Arturo
ESCOBAR PORRAS, han asumido la consigna
de propaganda para ganar grupos y opinión
pública, demostrando así una conducta total-
mente oportunista y utilitaria, que es síntoma de
degeneración ideológica y política.
Tal hecho demuestra que la conducción secta-
ria se aparta del Frente Único, no es capaz de
trabajar con los demás, de persuadir y conven-
cer de la justeza de sus propuestas. Su accionar
está alimentado de voluntarismo, no tiene en
cuenta la tendencia general, las condiciones
existentes, no solo la necesidad, sino también
la posibilidad de lucha y victoria; en suma, el
marco sociopolítico, las reales fortalezas y de-
bilidades del movimiento. No tiene en cuenta
la madurez de condiciones y a menudo confun-
de el estado de ánimo de los dirigentes con las
intenciones de las masas. Levanta plataformas
con rasgos de intereses de grupos minoritarios.
Siendo incapaz de educar ideológica y política-
mente a los trabajadores y, ante la orfandad de
fundamentos, alternativa y cultura, se esconden
en el grito, el cliché, el insulto y la mentira: ¡Ni
Patria ni Sendero!
Tal pretensión de los fendepillos, no reconoce
que la diversidad de ideas, opiniones, puntos
de vista y pensamientos sobre el proceso de
25. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
25
desarrollo social, permiten el surgimiento de lo
que se conoce como corrientes ideológicas. La
aparición o existencia de estas en un gremio o
sindicato –incluso en otra asociación o colec-
tivo- es inexorable, incuestionable y, más aún,
necesaria. Esto es lo que caracteriza a todo
sindicato: la presencia y participación de todos
los trabajadores con diferentes ideologías, po-
líticas, credos religiosos, pero con los mismos
intereses y objetivos laborales y sociales; esta
peculiaridad en el sindicato es lo que se deno-
mina, reiteramos, frente único, vale decir, en un
sindicato no existe unidad ideológica; por ello,
la consigna de los fendepillos es oportunista, re-
accionaria y anti-histórica.
Aún más, los fendepillos se han olvidado que
todos los partidos políticos tienen vocación de
poder y representan intereses de clase. Por eso,
al PPC se le denominaba el partido de los ge-
rentes o de los ricos; mientras que el APRA se
irrogaba la representación de la “clase media”
y los partidos de izquierda se identificaban con
los intereses de los trabajadores del campo y la
ciudad.
Al respecto, Veber (1965) precisa que los parti-
dos comunistas son precisamente esos partidos
Expresión orgánica y democrática del SUTEP
y buscan ganar su conciencia para que asuman
su propia emancipación, sin imposición alguna;
hecho que nos diferencia del senderismo volun-
tarista y sus cómplices pucallactas.
VI. Magisterio de Lima
Estamos a 42 años de celebrar el Día del Maes-
tro y la fundación del SUTEP, por ello es necesa-
rio desagraviar al magisterio limeño, que para
nosotros tiene mucho significado conjuntamen-
te con todos los Sute Regionales del país. Hace
un tiempo el pucallactismo oportunista y propa-
tronal viene atacando a nuestra base regional
a través de su vocero Magisterio (2007), donde
expresa:
“Desde el 18 de junio se da una sucesión de
inicios de huelga magisterial en diversas partes
del país…, la huelga se generaliza desde el 5
de julio, fecha tardía (sic) acordada en un even-
to del SUTEP oficial. Con este último acuerdo
entra en huelga la renuente pero mayoritaria
base de Lima y en esto reside su importancia”;
asimismo, el anarquismo se atreve a despotricar
de nuestra base regional afirmando:
“En las bases de Lima Metropolitana estuvo el
punto más débil de la huelga. La causa princi-
pal de esta debilidad es que la mayoría de los
20 SUTE sectoriales no llevan una vida orgá-
políticos revolucionarios de
la clase obrera, que no se li-
mitan a luchar por la mejora
de la situación de los trabaja-
dores bajo el capitalismo; su
principal objetivo consiste en
poner fin a la explotación del
hombre por el hombre, en
hacer la revolución socialista,
en construir una sociedad sin
clases.
De tal manera, los verdade-
ros proyectos socialistas se
identifican con los intereses
de clase de los trabajadores
26. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
26
nica regular o no existen. En algunos de ellos se han enquistado camarillas corruptas que solo se
preocupan por lucrar en contubernio con las autoridades de la UGEL. Por otro lado, el magisterio
de la capital depende directamente del Ministerio de Educación y puede ser sancionado con mayor
facilidad por el gobierno central. Esto asustó a muchos docentes atrasados y dio lugar a que mu-
chos colegios y escuelas no hicieran huelga. El mayor déficit de la IX Huelga Nacional ha estado
en el SUTE Lima, déficit bastante grave porque en Lima trabajan más de 80 000 maestros”.
Tal apreciación de los fendepillos no se sustenta en la realidad; lo que pasa que en Lima los pucas y
senderos no pueden sorprender con mentiras y chismes a un magisterio más informado y comprometi-
do con la institucionalidad del gremio; por eso, a pesar que impulsaron la censura a los dirigentes del
Comité de Lucha de la última huelga, fueron rechazados por las bases, porque jamás van a permitir
la división del indómito SUTEP y nuestro inolvidable maestro: Horacio Zevallos Gámez.
Referencias bibliográficas:
1. SUTEP. (2012). Estatuto y Reglamento. Lima: III Congreso Nacional Estatutario.
2. VILDOSO, Carmen. (1992). Sindicalismo clasista: certezas e incertidumbres. Lima: Edaprospo.
3. VEBER, A. (1965). La clase obrera: nacimiento y evolución.
4. MAGISTERIO. (2007). Necesitamos un nuevo sindicato magisterial. Lima: N° 6, octubre-noviembre 2007. Frente
Clasista Magisterial.
5. CONTRERAS, Juan. (1999). Manual Sindical: por un sindicato de clase renovado. Lima: Comité Ejecutivo SUTE
LIMA.
6. MARIÁTEGUI, José Carlos. (1988). El 1° de mayo y el frente único. En: Ideología y Política. 18° edición. Lima:
Empresa Editora Amauta.
7. BARRERA, César. (2003). El SUTEP, la defensa de su unidad y el divisionismo propatronal: Consideraciones nece-
sarias. Lima: SUTEP.
8. SULMONT, Denis. (1979). El movimiento obrero peruano 1890-1979. Reseña histórica. Lima: Tarea editores.
27. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
27
EL CUENTO DEL “AMIGO” SIGFREDO
Sigfredo Chiroque Chunga, investigador del
Instituto de Pedagogía Popular (IPP), acaba de
publicar un artículo titulado “Concesiones des-
de las dirigencias del SUTEP” (Blog Educación
Esperanza: 04 de mayo de 2014); dizque “con
ánimo de ayudar a recomponer una unidad sin-
dical”. Sin embargo, el contenido de su artículo
no refleja dicho afán unitario, más bien preten-
de institucionalizar el paralelismo del gremio
representativo del magisterio peruano. Incluso
se atreve a tergiversar sus propios datos esta-
dísticos en favor de los que pretender destruir
el SUTEP.
El susodicho investigador parece que cree que
todos los docentes no comprenden lo que leen,
ya que desde el propio título del artículo se infie-
re que existe una ruptura en el SUTEP, al señalar
erróneamente “dirigencias del SUTEP”. Quien
se precia de estar informado de lo que sucede
en el movimiento magisterial, acaso desconoce
que existe un solo SINDICATO UNITARIO DE
LOS TRABAJADORES EN LA EDUCACIÓN DEL
PERÚ (SUTEP), representado por su Comité Eje-
cutivo Nacional, que actualmente lo preside el
Mag. Hamer Villena Zúñiga; por lo tanto, solo
existe una dirigencia del SUTEP.
Asimismo, existen CONARES y otros anarquis-
tas que hoy pretenden paralelizar al SUTEP, al
formar una Federación Nacional de Educado-
res del Perú (FENDEP). Chiroque conoce que es
un intento más de destruir a nuestro histórico
sindicato; así como en el pasado surgieron el
SERP, el SINDEP y otros engendros que fueron
promovidos por los gobiernos de turno con el
fin de no atender los justos reclamos del magis-
terio y pueblo peruanos; no solo conoce, sino
está comprometido con esta última aventura
paralelista. No es una acusación gratuita, sino
un análisis de sus artículos demuestra lo que
afirmamos.
Veamos, a quién creemos, ¿al Chiroque que
escribió en la revista Ideele N° 224, de octubre
de 2012 o al Chiroque del blog Educación Es-
peranza, del 04 de mayo de 2014?
Según su artículo publicado en su blog Educa-
ción Esperanza, el nivel de acatamiento de la
Huelga Nacional 2012 fue el siguiente:
“En la Huelga del SUTEP del 2012, un 77% del
magisterio nacional acató la medida de fuerza,
en diversos momentos. Hubo cuatro bloques
de dirigencia movilizando al magisterio: (a) Un
22% fue movilizado por el CONARE-Condori
(Sendero Acuerdistas - Movadef); un 3% por
CONARE (Sendero Proseguir); un 33% por los
llamados en ese momento SUTEs-Democráti-
cos o Regionales (no PR, ni SL) y un 19% por la
dirigencia del CEN-SUTEP. Los maestros ollan-
tistas de la Coordinadora Nacional Magisterial
(CNM) también se plegaron a la Huelga, con
los Sutes democráticos o regionales)”.
De donde se deduce que solo el 19% del ma-
gisterio nacional acató la medida de lucha de-
cretada por el Comité Nacional de Lucha del
SUTEP, que Chiroque malévolamente lo tipifica
de “dirigencia del CEN.SUTEP”; mientras que el
33% acató lo planteado por los llamados SU-
TEs-Democráticos Regionales.
De donde se infiere que el 53,4% del magiste-
rio nacional acató la medida de lucha decreta-
da por el Comité Nacional de Lucha del SUTEP;
mientras que el 10,7% acató lo planteado por los
llamados SUTES regionales y CONARE Pantoja.
28. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
28
De tal modo que se percibe una manipulación de datos. ¿Por qué ha actuado Chiroque de esta
manera? Simple y llanamente porque está comprometido en la nueva aventura paralelista del
anarquismo liquidador. Además, este hecho no es casual. Confirma que es parte de un plan ma-
yor, donde están implicados funcionarios del Ministerio de Educación y los eternos enemigos de la
vanguardia que tiene la responsabilidad de conducir el SUTEP.
Por ello, el Comité Ejecutivo Nacional y las bases del SUTEP tienen que considerar seriamente todo
este proceso de paralelizar al gremio. Los anarquistas han revivido a los otrora “luchadores” y fieles
“amigos”, como Chiroque, que dicen estar por la UNIDAD, pero realmente son punta de lanza de
la nefasta acción de destruir nuestro histórico gremio, que se apresta a cumplir 42 años de lucha
junto al pueblo. Cierto, hemos cometido errores, empero, siempre hemos estado a la vanguardia
de las justas exigencias del magisterio nacional; mientras que otros invernaban en organismos bu-
rocráticos del Estado con jugosos estipendios.
Cuadro 1
Perú 2012: Huelga docente y su impacto en estudiantes
Momento huel-
guístico (dirección
sindical y política)
Fechas 2012
Acatamiento de la huelga por
docentes*
Estudiantes afectados**
N.º %
1
(Conare-Condori)
20 de junio 82.553 24,6 1’528.882
12 de agosto 74.860 22,3 1’386.407
2
(Conare-Huaynala-
ya-Zenón Pantoja)
15 de agosto 9.575 2,9 177.329
3
(CEN-SUTEP)
5 de sept. 140.801 42,0 2’607.635
5 de oct. 179.056 53,4 3’316.117
4
(SUTES regionales y
Conare - Pantoja)
6-13 de oct. 35692 10.7 661,016
Totales … 261.609 77,0 4’844.999
* Acompañamiento del autor con base en fuentes propias, sindicales y del MED.
** Estimado, considerando el promedio de carga bruta 2011: 18,52 estudiantes por docente.
*** Considera los datos del 20 de junio y del 5 de octubre. En estas dos fechas se pueden agrupar los estudiantes
afectados.
¡EL SUTEP ES UNO SOLO Y NADIE LO DIVIDE!
Referencias:
1. CHIROQUE CHUNGA, Sigfredo. (2014). Concesiones desde las dirigencias del SUTEP. 04 de mayo de 2014.
Blog Educación Esperanza: http://www.schiroque.blogspot.com/
2. CHIROQUE CHUNGA, Sigfredo. (2012). Educación: los efectos de la huelga. En: Ideele Revista N° 224, octubre 2012.
29. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
29
FENDEPILLOS: OTRO INTENTO ANARQUISTA DE
LIQUIDAR AL SUTEP
Cerca de cumplir 42 años de fundación del SU-
TEP, surge el anarquismo pro-patronal exigien-
do la liquidación de tan histórico gremio. Para
ello utiliza diversos mecanismos y clama apo-
yo del gobierno de turno. Su última exigencia
es la “nulidad de pleno derecho y cancelación
de la anotación del SUTEP en el registro de or-
ganizaciones sindicales de servidores públicos
(ROSSP) del Ministerio de Trabajo y Fomento del
Empleo”; solicitud presentada por Ángel Enri-
que Matos Castellares, el 2 de mayo de 2014.
En verdad, don angelito no hace honor a su
nombre, como aclararemos posteriormente.
Bueno, justifica su petitorio argumentando que
el SUTEP reconoce la lucha de clases como
principio rector de su accionar sindical. ¡Qué tal
descubrimiento del tal angelito! Parece que fue
ave de paso en la Universidad. Desconoce que
el concepto de clase social surge desde tiempos
inmemoriales, tal como nos recuerda Theotonio
Dos Santos (2006, 7):
“El concepto de clase social no fue una crea-
ción del marxismo. Desde la antigüedad griega,
por ejemplo (y aún se puede encontrar docu-
mentos egipcios donde se plantea la existencia
de clases en la sociedad). Aristóteles divide la
sociedad en esclavos y hombres libres. Además,
en la Política se divide a los ciudadanos en po-
bres, clase media, y ricos. En este mismo libro,
Aristóteles establece relaciones entre formas de
gobierno y predominio de ciertas clases socia-
les. También entre los patriarcas de la iglesia,
según Ossowsky, era bastante nítida la concien-
cia de una sociedad esclavista que se presen-
taba junto a la idea de la igualdad social. Los
actos de los Apóstoles y el Nuevo Testamento
están llenos de referencias a las clases sociales,
siempre observadas desde el punto de vista de
la relación entre pobres y ricos o de las relacio-
nes esclavistas”.
Al respecto, existen numerosos ejemplos sobre
el fantasma que quiere hacer desaparecer el tan
terrible angelito. Pero el problema no se centra
en tal fantasma. El asunto es que el anarquismo
conarista “pide a gritos hacer lo que sea para
reprimir, disolver, liquidar al SUTEP” (Breña,
2006); vano deseo que los emparenta con la
ultraderecha y el fujimorismo.
Lo que los mueve a los anarquistas, ultradere-
chistas y fujimoristas es su odio visceral al SU-
TEP, ya que es un obstáculo para concretar la
privatización de la educación acorde con el rei-
no neoliberal en que vivimos. Por ello, como
las calumnias, las diatribas y mentiras no han
surtido efecto, han abandonado el SUTEP y hoy
hacen coro con todos nuestros enemigos para
liquidarnos y avasallar al magisterio nacional.
No subestimamos al enemigo, sin embargo re-
saltamos que tenemos una rica historia de lucha
en la escena nacional. Por ello, recordamos lo
que escribió Rolando Breña cuando sufrimos
la arremetida de los neoliberales y sus socios
anarquistas en 2006: “Pretenden destruir al
gremio que siempre los defendió, que enfren-
tó dictaduras, mientras los mandamases de hoy
atisbaban medrosamente desde ventanales de
finos vidrios desde sus cómodas residencias…”.
De tal manera, la lucha multifacética la hemos
asumido desde nuestra fundación. Nadie nos
puede acusar de haber pactado con gobierno
alguno. Siempre estuvimos al frente de la lucha
anti-dictatorial, mientras otros jugaban a las
escondidas. Por ello, nuestro recordado maes-
tro José Ramos expresó, cuando cumplimos 40
años de lucha junto al pueblo, lo siguiente:
“No es casual que el filósofo Luis Felipe Alar-
co, cuando fue Ministro de Educación en 1980,
dijo que durante los 12 años de la dictadura
militar de 1968-1980 fue el SUTEP el que había
30. DESLINDE CON EL ANARQUISMO PROPATRONAL
30
salvado la dignidad nacional. Le costó el cargo,
pero decía la verdad. En estos años se sigue
escuchando y leyendo opiniones que tratan de
negar a los maestros el derecho de participa-
ción en la vida política del país, idea oscuran-
tista que tiñe también el proyecto de reforma de
la ley magisterial que el gobierno “nacionalista”
ha puesto en manos del Congreso de la Repú-
blica”.
El accionar heroico y sublime del magisterio
peruano, organizado en el SUTEP, trascendió
en la escena nacional; ya que en los anales de
la historia del Perú, a partir de la década del
setenta, se le considera como un referente en
los diversos fenómenos sociales y culturales. Por
ejemplo, en torno a la literatura, el escritor To-
más Escajadillo (1992, 96) considera que:
“Un punto ilustrativo sería, por ejemplo, el pa-
pel del maestro. En los textos de Rivera Martínez
y quizás en los de Yauri Montero, se presenta
la tradicional figura del maestro: miembro de
una familia importante, que apoya el orden es-
tablecido y muchas veces no enseña nada a sus
alumnos y los aprovecha para actividades ma-
nuales que le producen utilidades. Este sería el
maestro o la maestra de antiguo cuño. Pero,
en la narrativa posterior, la de Pérez Huarancca
o Huamán Cabrera, ya aparece la imagen del
maestro sutepista. Son otros tiempos. Por eso, el
referente de la existencia del SUTEP y la impor-
tancia de los maestros en todo el país es ya re-
flejado en la realidad de los nuevos escritores”.
Empero, no solo hemos desarrollado la lucha
sindical, política e ideológica, sino también la
lucha pedagógica. Al respecto, traemos a cola-
ción lo manifestado por el ilustre maestro Walter
Peñaloza Ramella (2000): “En estos momentos
existen tres propuestas para afrontar la educa-
ción en el Perú: La formulada por los técnicos
del Ministerio de Educación; la del Foro Edu-
cativo; y la del SUTEP. En mi opinión, la más
acertada, con ciertas modificaciones, es la del
SUTEP; porque se acerca a las necesidades na-
cionales”.
Finalmente, señalamos que los fendepillos no
se han equivocado en designar a don Ángel En-
rique Matos Castellares para el juego sucio de
exigir la anulación de inscripción del SUTEP; ya
que este sujeto es un especialista en afrontar
procesos administrativos, debido a su carácter
violento y prepotente. Su última AGRESIÓN lo
cometió contra su alumna B.P.E.O. (15) en la IE
7062 “Naciones Unidas” a fines del 2012. Por
ello, se le instauró proceso administrativo, de
acuerdo a la RD UGEL 01 N° 1306, de fecha
25 de marzo de 2013 y se ordenó interponer la
denuncia ante el Ministerio Público por maltrato
físico y psicológico a la estudiante, cuyas inicia-
les se ha mencionado anteriormente. ¡Qué tal
joyita de los fendepillos!
¡QUERRÁN MATARLO Y NO PODRÁN MATARLO!
Referencias:
1) DOS SANTOS, Theotonio. (2006). Concepto de clases sociales. Venezuela: Fundación Editorial el pe-
rro y la rana. Pág. 7.
2) BREÑA, Rolando. (2006). Muerte al SUTEP. Lima: Diario Correo (28/12/2006).
3) RAMOS BOSMEDIANO, José. (2012). A los 40 años del SUTEP los maestros peruanos siguen luchan-
do. Lima: Vanguardia Magisterial.
4) ESCAJADILLO, Tomás G. (1992). El indigenismo en la literatura. En: Hombres de letras. Historia y crítica
literaria en el Perú. Lima: Ediciones Memori Angosta. Pág. 96.
5) PEÑALOZA, Walter. (2000). Siglo XX: Balance de nuestra educación. Ponencia en Encinas 2000. Lima,
Editora Magisterial. Pág. 200.
31.
32. MENSAJE POR EL DÍA DEL MAESTRO
Alfredo Velásquez Acosta
Sec. General SUTE Región Lima
Dignos maestros de Lima:
Hoy 6 de julio nos convoca a tratar dos hechos
de vital importancia en la historia del magisterio
peruano.Primero,celebramoselDíadelMaestro,
ocasión que permite reflexionar sobre el rol
social del docente en la formación integral de los
estudiantes y el desarrollo de la comunidad y el
país; porque no vivimos en una isla, sino somos
parte del pueblo.
El segundo aspecto a tratar, se deduce del rol
social del docente, ya que los maestros de la
década del 70, tuvieron la lucidez de forjar un
solo sindicato del magisterio peruano, un 6
de julio de 1972, superando etapas nefastas
de división y enfrentamiento entre maestros.
Horacio y los fundadores del SUTEP nos legaron
una herramienta eficaz para luchar, junto al
pueblo, por mejores condiciones de vida y de
trabajo para todos, sin exclusión alguna.
Durante los 42 años de vida institucional hemos
logrado importantes conquistas, pero también
tuvimos grandes dificultades, sin embargo, de
todas ellas, siempre hemos sabido salir airosos,
con el apoyo solidario de nuestros estudiantes,
nuestros padres de familia y nuestro valeroso
pueblo que siempre está presente. Hemos
resistido diversos intentos de dividirnos y
liquidarnos; a los adoradores del mercado
neoliberal no les conviene un sindicato como
el SUTEP, ya que es un gran obstáculo para la
privatización de la educación, cuyo último intento
fracasó con la municipalización.
Hasta ahora hemos resistido y derrotado todo
intento de mercantilizar el derecho humano de
la educación, porque para nosotros la vida y
formación integral de calidad de nuestros niños y
jóvenes está primero. Por ello, los neoliberales al
no poder derrotar directamente, han cambiado
de táctica y mediante el vil metal han comprado
conciencias para destruir a nuestra histórica y
combativa organización sindical.
Estamos seguros que, con la convicción y firmeza
que caracteriza al maestro sutepista de Lima,
estaremosencondicionesdeseguirmanteniendo
la UNIDAD e INSTITUCIONALIDAD de nuestro
gremio, muy a pesar de nuestras discrepancias
y contradicciones; somos seres pensantes que
condenamos a aquellos que han vendido sus
conciencias al neoliberalismo.
Por lo tanto, el reto actual se centra en reactivar
democráticamente y manteniendo estrictamente
el carácter de frente único, las bases de plantel
y de los sectores, reafirmarnos en la lucha
consecuente y responsable por reconquistar
nuestros derechos, exigir mejores condiciones
de vida y trabajo; así como debatir las propuestas
curriculares y metodológicas del gobierno
actual, a fin de tomar decisiones al respecto.
Lamentablemente existen mentes obtusas que ni
siquiera han leído el índice de dichas propuestas y
las rechazan por indicación de algún “iluminado”;
demostrando que es simplemente un empírico
en la docencia y no un maestro que asume un rol
científico.
Estimados colegas, hay que persistir y
continuar en la tarea de reempadronamiento
y carnetización para dar solidez y seriedad a
las diversas instancias del gremio. Asimismo,
continuar con nuestra cualificación profesional,
formación continua y buen desempeño docente
en bien de nuestra comunidad educativa, sobre
todo, de los niños del Perú y las poblaciones
excluidas por el reinado neoliberal.
Finalmente, a nombre del Comité Ejecutivo Re-
gional del SUTE - Lima Metropolitana, expreso mi
saludo respetuoso a las maestras y maestros de
Lima y de todo el Perú, en este nuevo año de
celebración del Día del Maestro.
¡FELIZ DÍA MAESTROS!
¡EL SUTEP LUCHANDO, TAMBIÉN ESTÁ
EDUCANDO!