Este documento resume los principales valores de los jóvenes españoles en 2005 según un estudio. Muestra que los jóvenes son más intolerantes hacia grupos como neonazis, drogadictos o punkis y perciben más violencia en su entorno. También se ven a sí mismos como consumistas, egoístas y con poco sentido del deber. El estudio analiza la tolerancia vecinal de los jóvenes y muestra que rechazan más a inmigrantes, punkis y gitanos que en el pasado. Las agresiones más comunes que sufren son
Tarea 5_ Foro _Selección de herramientas digitales_Manuel.pdf
Los valores de los jóvenes españoles: tolerancia vecinal y percepción de violencia
1. Los valores
en la adolescencia
SOL
CRE
Un reciente estudio sobre la juventud española revela que aumenta
E
n las páginas que siguen presen-
taré algunos de los principales
la intolerancia hacia distintos grupos, como neonazis, drogadictos o
valores de los jóvenes españoles
punkis y la percepción de mayor violencia en su entorno. en 2005, teniendo en cuenta su relación
con la convivencia social. Me basaré en
Los jóvenes se ven a sí mismos como consumistas, egoístas y con poco un estudio de la Fundación Santa María
que se presentó en abril de 2006, que
sentido del deber. Un dato preocupante cuando la correlación entre
incluye un capítulo sobre los valores e
baja autoestima y manifestaciones violentas es bastante clara. identidades de los jóvenes (Elzo, 2006).
Ciertamente, el estudio está basado
en jóvenes entre los 15 y los 24 años, y
JAVIER ELZO los datos que ofreceré se refieren a esta
Catedrático de Sociología en la Universidad de Deusto franja de edad, pues he querido presen-
Correo-e: javierelzo@telefonica.net tar algunas cifras comparativas de los úl-
18 CUADERNOS DE PEDAGOGÍA. Nº359 MONOGRÁFICO } Nº IDENTIFICADOR: 359.002
2. monográfico
timos años, y solamente están segmen- Sostengo que, sin querer eliminar la im- A continuación me detendré en la pre-
tadas por edades. Pero antes que nada portancia de la edad cronológica, lo re- sentación de algunos valores de estos
es necesario señalar que la diferencia en- pito, en nuestro tiempo, abierto a más jóvenes, con los que podremos, si no
tre la adolescencia y la juventud va mu- posibilidades que en generación alguna, explicar, sí contextualizar los niveles de
cho más lejos de la mera edad, aun sin en las edades que comentamos, de 15 a tolerancia vecinal que manifiestan y de
negar la importancia de este factor. A 24 años, la adolescencia, tal y como la violencia que padecen.
menudo nos encontramos con jóvenes he delimitado someramente arriba, inva-
que deberían ser calificados como tales de a la mayor parte de los jóvenes espa-
por estar su edad cercana a los 30 años, ñoles, quienes raramente se abren a la A quiénes no desean tener como
pero que sociológicamente hablando son juventud hasta bien pasados los 20 años. vecinos
adolescentes; en cambio, existen adoles- Esto resulta particularmente cierto en los
centes por edad, que tienen 17 ó 18 que deciden continuar sus estudios, aun- En el cuadro 1 presentamos la evolución
años, pero que pueden ser etiquetados que no solamente en ellos. de la tolerancia vecinal de los jóvenes es-
como jóvenes”. Comienzo con la presentación de aquel pañoles siguiendo, muy parcialmente, el
Muy brevemente describiría así la dife- indicador que más se acerca a la cuestión indicador propuesto por Bogardus en el
rencia que hay entre el joven y el ado- que aquí interesa: la convivencia en los año 1928: a qué personas no se desea
lescente. El joven, aun viviendo el pre- centros. Pero no lo haré en base a traba- tener como vecinos, que lleva aplicán-
sente, sabe que está en tránsito, en stand jos empíricos sobre este tema (lo que dose desde entonces. Es evidente que
by para el futuro, que se le presenta in- resultaría muy cómodo pues hemos lle- los jóvenes de 2005 son más intoleran-
cierto y, de una u otra manera, con ma- vado a cabo tres estudios en los que he- tes que los de años anteriores. Con la
yor o menor ahínco, piensa y se prepara mos abordado directamente esta cues- insignificante excepción del descenso en
para cuando, inevitablemente, el futuro tión en los años 2001, 2002 y 2006, el de un solo punto porcentual en la tolerancia
en ciernes se haga presente. Por el con- este último año se encuentra en fase de a los etarras –que así y todo continúa sien-
trario, el adolescente está instalado en análisis cuando se redactan estas páginas), do el colectivo más rechazado–, aumen-
el presente y no quiere mirar hacia el fu- ya que en este monográfico otras con- ta el número de jóvenes españoles que
turo. Incluso si lo hace, inmediatamente tribuciones se ocupan de ello. Empezaré rechazan a todos los demás colectivos
se vuelve al presente; quizás porque te- con lo que he denominado “la tolerancia por los que se les ha preguntado sobre
me el futuro, más probablemente por- vecinal”, y continuaré inmediatamente si “no les gustaría tener como vecinos”.
que no quiere que éste llegue, felizmen- con una cuestión sobre las diferentes El caso más llamativo es el aumento en
te instalado en la desresponsabilización modalidades de violencia padecidas por el rechazo vecinal a los inmigrantes, que
del presente. los jóvenes. pasa del 1% en el año 1981 al 12% en el
Cuadro 1
Evolución (1981-2005) de la tolerancia vecinal
Personas que no quisieran tener como vecinos.
(En porcentajes descendentes de las respuestas dadas por los jóvenes entre 18-24 años)
2005 ( – )
1981 1990 1994 1999 2005
más lejano
Miembros de ETA - - - 83 82 -1
Neonazis y gentes de extema derecha - - 68 70 80 +12
Skinheads - - 61 66 69 +8
Musulmanes Radicales - - - - 69 -
Drogadictos - 49 42 43 52 +3
Gente dada a la bebida 31 34 23 30 35 +4
Punkies, Ocupas - - 24 21 35 +11
Gitanos - - 18 18 29 +11
Personas con antecedentes penales 25 22 11 14 25 =
Inmigrantes (1) 1 5 2 4 12 +11
Gente de otra raza 6 5 2 4 8 +2
Personas con SIDA - 25 9 7 - -
(1). Hasta 1999. Trabajadores inmigrantes/extranjeros
{ Nº359 CUADERNOS DE PEDAGOGÍA. 19
3. Cuadro 2
Colectivos que no se desean como vecinos en varios países europeos (16 a 29 años el año 2000)
En porcentajes
España Francia Alemania Gran Bretaña Italia Suecia
Drogadictos 43 44 44 65 46 68
Personas con antecedentes penales 23 17 16 38 41 28
Gitanos 4 8 5 8 13 6
Gente de otra raza 5 7 2 7 14 2
Inmigrantes/Trabajadores extranjeros 5 8 8 11 17 3
Musulmanes 8 9 8 9 14 9
Gente dada a la bebida 32 39 56 36 36 38
Personas con SIDA 13 5 5 19 25 4
Fuente: “Human beliefs and values” Tablas A 124 - A 140
2005, once puntos porcentuales, los mis- El mayor problema percibido por los razón de otras características como, por
mos que hacia los punks y los gitanos, jóvenes en relación con la inmigración es ejemplo, por citar solamente dos, el lu-
pero en estos dos casos partíamos del el aumento de la delincuencia, supuesta- gar donde está ubicado el centro y la
24% y 18%, respectivamente, en el año mente vinculado a este fenómeno. Así lo composición sociológica del alumnado
1994, cuando se incluyeron por primera cree un 59,3% y un 39,7% de jóvenes cabría presumir que hubiera. Es la impor-
vez en el cuestionario. opinan que los inmigrantes quitan el tra- tancia del factor humano y, con un pro-
Nótese también que una gran parte bajo a los españoles. Asimismo, la gran yecto de centro, lo que quiero subrayar).
de la intolerancia hacia grupos concretos mayoría de los jóvenes ve la adaptación Por contextualizar más las cosas, pre-
(neonazis, drogadictos, punks, personas cultural solamente en una dirección: del sentamos en el cuadro 2 los niveles de
con antecedentes penales e inmigrantes) inmigrante a la sociedad receptora; cua- tolerancia vecinal de los jóvenes espa-
se produce en los últimos cinco años. Al- tro de cada cinco (78%) se muestran to- ñoles (de 16 a 29 años esta vez) en com-
go ha pasado en la juventud española tal o parcialmente de acuerdo con que paración con los de varios países euro-
–y de forma particular en los más jóve- “los inmigrantes deben esforzarse para peos. En líneas generales, los jóvenes
nes– en estos últimos años. Nuestra hi- adaptarse a las costumbres y a la cultura españoles son algo más tolerantes que
pótesis apuntaría al difícil acomodo de los de los españoles y no al revés”. los europeos, como ya han mostrado
padres actuales a las nuevas y emergen- El ranking de colectivos menos desea- otros estudios.
tes realidades familiares. En España esta- dos como vecinos apenas se ha movido,
mos haciendo el cambio familiar (“revo- y el cuadro lo muestra elocuentemente,
lución familiar”, la llaman algunos) en muy etarras y neonazis, casi a la par el año Las manifestaciones de violencia
pocos años. 2005, se encuentran en un primer y des- padecida
Los jóvenes españoles, a diferencia de tacado lugar. Gente de otra raza e inmi-
lo que ocurre con el total de la población, grantes están en último lugar, aunque Las agresiones más frecuentes en el
continúan sin identificar la inmigración co- los musulmanes radicales (ítem que in- entorno juvenil son los insultos con ame-
mo uno de los problemas más impor- trodujimos por primera vez en este estu- nazas graves (18% de los jóvenes asegu-
tantes de la sociedad española. Siendo dio) vienen inmediatamente después de ran haber sido alguna vez objeto de este
considerado en 2005 aún como un pro- los etarras y los neonazis. Es fácil prever la tipo de agresiones), seguidos a cierta dis-
blema de menos relevancia que el racis- incidencia que esto va a tener en un futu- tancia de la agresión física por descono-
mo, muestran una mayoritaria preferencia ro próximo en los centros docentes una cidos (13%) y amigos (12%), lo que su-
por permitir la entrada de inmigrantes vez asentada la inmigración. (Aunque, di- giere una concentración de la violencia
siempre y cuando éstos posean un con- gámoslo entre paréntesis, pues éste no es en la escena de ocio del joven, unida
trato de trabajo. Frente a un 67,7% que nuestro tema aquí, esta variable no es probablemente a la conflictividad entre
da preferencia a esta opción, solamente suficiente, ni mucho menos, para explicar grupos o, simplemente, a la tensión con
un 15,7% opta por “facilitar al máximo la conflictividad en los centros. Hipoteti- desconocidos en las salidas con los gru-
la entrada de inmigrantes” y un 10% por zaría que un claustro de profesores esta- pos de amigos.
prohibir su entrada sin distinciones. Sin ble, con conciencia de tal claustro, con un El mayor interés surge al ser compara-
embargo, una amplia mayoría (67%) opi- director que lo dirija, sería un factor expli- dos los datos de los estudios de los
na que empieza a haber demasiados in- cativo muy importante, incluso más im- años 1999 y 2005, ya que en solamente
migrantes, y dos de cada cinco, que “les portante, de que hubiera menos conflic- seis años casi todas las formas de vio-
damos demasiadas facilidades”. tividad en un centro docente del que, en lencia han aumentado. Así por ejemplo,
20 CUADERNOS DE PEDAGOGÍA. Nº359 }
4. monográfico
los insultos con amenazas, la agresión físi- revelar aquí), muestran que no hay nece-
ca, ya sea por desconocidos o por amigos sariamente un aumento de las agresiones
o conocidos, la agresión por parte de un y los maltratos reiterados, graves, entre
policía, de un agente privado, e incluso escolares (aun siendo la cifra importante),
haber sido obligados a realizar una prácti- pero sí aumenta, claramente, la percep-
ca sexual no deseada (del 1,3% al 1,7%). ción de los escolares de que hay más
Sin embargo, hay dos únicas excepciones agresiones que hace cinco años. Esta per-
que aquí nos interesan –la familia y la es- cepción de aumento de agresiones pare-
cuela– en la modalidad de violencia ejer- ce que es compartida, también, por pro-
cida por un profesor sobre un alumno, fesores, padres y ciudadanía en particular.
pero no la padecida por agresión de un Asimismo, esa percepción, unida al
compañero, que aumenta. Por su interés, constructo social dominante de una gran
y dado que no están desglosados los da- parte de la sociedad española, y de for-
tos en la publicación Jóvenes españoles ma particular en los medios de comuni-
CRESOL
2005 según la edad escolar secundaria, cación social, de que los adolescentes y
los ofrecemos en el cuadro 3. los jóvenes de hoy son indolentes, de-
La conclusión de todo esto, repito, nos sinteresados por todo, comiendo la sopa
indica que nos encontramos ante un in- boba en casa, pensando solamente en la
cremento generalizado de la violencia pa- fiesta, en la juerga, en la borrachera (la
decida por el conjunto de los jóvenes, simplista idea de que los jóvenes france-
dentro y fuera de la escuela, siendo ex- ses saldrían a la calle para exigir la retira-
cepción la que proviene de sus padres da de una ley de empleo juvenil que per-
y de sus profesores. mite el despido libre durante uno o dos
Creo, de todos modos, que debemos años, y aquí salen a la calle para hacer
ser cautos. Las cifras, aunque claras, no macrobotellón o botellón a secas), ha lle-
denotan enormes diferencias, y es legíti- gado incluso a ser internalizada en ele-
mo preguntarse qué hay de real y qué de vadas proporciones de adolescentes y
percepción de esa realidad, en los datos. jóvenes españoles. Este hecho, unido a
Otros datos que estoy analizando cuando la objetiva dificultad de la emancipación
cierro estas líneas (inicios de abril), en el familiar y a la subjetiva querencia de de-
ámbito específico de la escuela, con base sear vivir al mismo nivel de vida de sus
estadística muy elevada en una comuni- padres, aunque con mejor calidad que
dad autónoma española (que no puedo ellos (menos prisas y agobios), explica, a
Cuadro 3
Manifestaciones de violencia padecidas en edades comprendidas
entre los 15 y los 17 años (En porcentajes)
1999 2005 2005 (–) 1999
Insultos con amenazas graves 15,1 16,3 +1,2
Agresión física de desconocidos 8,3 8,9 +0,6
Agresión física de amigos o conocidos 12,2 13,5 +1,3
Mis padres me han pegado 14,0 11,6 -2,4
Maltrato en la escuela o lugar de trabajo 4,5 5,9 +1,4
Algún profesor me ha pegado 6,1 4,9 -1,2
Policía me ha pegado (manifestación) 1,3 2,5 +1,2
Agente seguridad me ha pegado (discoteca...) 0,7 2,3 +1,6
Mi pareja me ha pegado 1,3 0,9 -0,4
Obligado a una práctica sexual no deseada 1,4 1,6 +0,2
N= 1.188 1.008
Fuente: base de datos de “Jóvenes Españoles 2005”. Elaboración JE.
{ Nº359 CUADERNOS DE PEDAGOGÍA. 21
5. mi juicio, uno de los datos mayores del ción entre baja autoestima y manifesta- religión. En medio, y por este orden: el
informe Jóvenes españoles 2005: el des- ciones de violencia es clara, aunque afor- trabajo, ganar dinero, el tiempo libre, lle-
censo vertiginoso en la autoestima de tunadamente no es mecánica y otros fac- var una vida moral y digna, tener una vi-
los adolescentes y los jóvenes españo- tores pueden venir a paliarla, por ejemplo, da sexual satisfactoria y los estudios para
les, cuestión que me parece clave desta- la evolución en la justificación de com- tener una buena formación y competen-
car, y con la que inicio el repaso de algu- portamientos, como veremos más abajo; cia profesional.
nos valores e identidades juveniles. pero antes de ello dedicaré dos párra- La evolución de la importancia de los
fos a las prioridades vitales de los jóve- valores finalistas en los últimos años
nes, sus valores finalistas. muestra que una buena relación familiar,
Una autoestima muy baja unos buenos amigos (no simplemente
compañeros), sin olvidar la salud, confor-
El año 2005 observamos que los ras- Las prioridades en la vida man la tríada básica, el sustrato desde
gos “consumistas”, “pensando sólo en donde edificar su universo simbólico y
el presente”, “egoístas” y “con poco Los jóvenes priorizan y valoran, sobre todo su edificio de valores. Estos tres va-
sentido del deber y del sacrificio” son los todo, como objetivo en sus vidas, lo coti- lores hay que leerlos desde una doble
que el mayor número de encuestados diano, lo cercano; esto es, la familia y los perspectiva: individualista (pretendida-
señalan atribuyéndolos al conjunto de amigos, dando por supuesta la salud. En mente autónoma) y de búsqueda de
los jóvenes. En sentido contrario, ser último lugar, lo que tiene que ver con lo bienestar y seguridad emocional. A fin
“maduros”, “generosos”, “tolerantes”, holístico, lo ideológico: la política y la de cuentas denotan una situación de
“trabajadores”, “solidarios” y “leales en
amistad” son los rasgos que, a su juicio,
menos caracterizan a los jóvenes espa-
ñoles de hoy. En otras palabras, los jóve-
nes se atribuyen en mayor grado los ras-
gos negativos que los positivos. Además,
el estudio diacrónico muestra que esta
nota central se ha acentuado en los últi-
mos diez años. La conclusión se impone:
los jóvenes del año 2005 tienen una baja
autoestima, que además es notoriamen-
te más acentuada que la de los jóvenes
del año 1994. Estamos ante uno de los
datos más preocupantes de todo el estu-
dio. La repercusión ante el tema que nos
ocupa es evidente, pues la correla-
inestabilidad, inseguridad e incertidum-
bre personal, y apelan a la amistad, a la
gratuidad, a la relación íntima y en pro-
fundidad con otra persona como gran-
des querencias de su vida, como sus pri-
meros y principales objetivos vitales. Es
también un rasgo preocupante que, en
algunos jóvenes –con una copa de más
o con valores finalistas de rechazo al di-
ferente o, más simplemente, ante una
CRESOL
frustración mal gestionada–, puede dar
22 CUADERNOS DE PEDAGOGÍA. Nº359 }
6. monográfico
lugar a un brote de violencia que puede en 1984. Los valores éticos se han libe- portamientos, que muestra que son exi-
ser grave. Pero vayamos al factor que ralizado. Son los comportamientos indi- gentes con la ética cívica a la par que
puede ejercer de protector. viduales y los proxémicos los que aumen- muy permisivos con la ética privada. Es-
tan sus niveles de justificación, mientras te hecho puede servir de contrapeso, si
que sucede lo contrario en los compor- es realmente asumido y no meramente
Exigentes en la moral pública, tamientos de carácter más global o con enunciado. Pero, como no me canso de
permisivos con la privada consecuencias más colectivas. Este im- repetir, para que estos enunciados sean
portante dato sirve de contrapeso en el algo más que brindis al sol, la disciplina,
En líneas generales cabe decir que los tema que nos ocupa a otros arriba pre- el trabajo bien hecho, dar cuenta del por-
comportamientos relacionados con la vi- sentados, especialmente en lo referente qué de lo afirmado, la racionalidad más
da privada, con las relaciones de proxi- a la baja autoestima. allá de la mera emoción y la competen-
midad (con la significativa excepción de cia personal –por señalar algunos de los
la violencia de género), son los que en más importantes en este momento con-
mayor grado reciben la justificación y la Cerrando que no concluyendo creto de esta adolescencia y juventud
aceptación de los jóvenes españoles. En concretas–, deben ser potenciados. Y no
la vida privada, en las relaciones de pro- Los valores más preocupantes en los es seguro que ésa haya sido la prioridad
ximidad allí donde juegue el afecto, en adolescentes y los jóvenes españoles de en la educación familiar y escolar por ra-
las decisiones vitales (divorcio, relaciones hoy ante la convivencia en los centros zones diversas, aunque perfectamente
de pareja, de adopción de niños, tam- escolares vendrían de una acentuación identificables. Pero ése ya es otro tema.
bién por homosexuales y lesbianas), no de lo individual, de lo subjetivo, de lo
debe haber normas externas a los indi- propio y próximo, en detrimento de una
viduos. Son normas privadas y como tal conciencia real, no meramente enunciada
deben quedar. (es la trampa de los estudios de valores),
En el extremo opuesto, en los com- de la importancia del otro, de la acepta-
portamientos menos justificados, los que ción del diferente. Es la instauración social
mayor rechazo suscitan en los adoles- del yo, es el asentamiento en el hoy de la
centes y jóvenes, encontramos, en pri- vida haciendo de la adolescencia no un
mer lugar, los comportamientos violen- paso sino un estado, difiriendo lo más po-
tos (terrorismo y violencia de género, sible el tránsito de la adolescencia a la
causar destrozos en la calle y la pena de juventud, en el sentido en que arriba he
muerte), así como, en líneas generales, definido ambos conceptos; es la dificul-
los comportamientos relacionados con tad de encontrar balizas de comporta- para saber más
la ética civil, la moral pública, como acep- miento, iconos referenciales de valor so-
tar un soborno, no informar de desper- cial (otro estudio de valores y drogas que
fectos causados a un coche aparcado, saldrá a final de este año lo mostrará pa- Elzo, Javier (2006): “Valores e identidades
▲
engañar en el pago de impuestos, hacer ladinamente). Es, en definitiva, vivir en la en los jóvenes”, en Pedro González Blasco
ruido impidiendo el descanso de los ve- burbuja adolescente el mayor riesgo para (dir.): Jóvenes españoles 2005. Madrid:
cinos, etc. la convivencia, dentro y fuera del aula es- Fundación Santa María - SM (pp. 13-110).
El análisis evolutivo nos muestra que la colar, entre los adolescentes y los jóvenes, Inglehart, Ronald; Basañez, Miguel; Diez
▲
permisividad, la tolerancia normativa y la especialmente en el caso de los primeros. Medrano, Jaime (2005): Human beliefs
justificación de determinadas prácticas Afortunadamente, presentan un univer- and values. México: Siglo XXI.
son mucho mayores en el año 2005 que so de valores, en la justificación de com-