1. LA PÉRDIDA DE CUBA La guerra de los diez años (1868-1878) La Guerra Chiquita (1879-1880) La guerra de Cuba (1895-1898) La guerra hispano-norteamericana (1898)
8. La guerra (1868-1878) El terrateniente Carlos Manuel de Céspedes lanzó el "Grito de Yara" en su ingenio azucarero (hacienda colonial) de "La Demajuana", situado en las inmediaciones de Manzanillo, liberando a sus esclavos. Inmediatamente se levantaron los terratenientes de los alrededores, quienes fueron a la lucha seguidos de sus esclavos, ya liberados, y los pequeños agricultores que trabajan para ellos como colonos. El 7 de octubre de 1868 los principales caudillos rebeldes se reunieron en el ingenio de El Rosario y proclamaron a Céspedes como único jefe del movimiento , señalando el levantamento para tres días más tarde, 10 de octubre.
9. La guerra (1868-1878) El 10 de octubre Manuel Céspedes se sublevó contra la dominación española al frente de 140 hombres más armados y 200 de sus esclavos y atacó la población de Yara. Al día siguiente, 11 de octubre, Céspedes redactó un el "Manifiesto de la Junta revolucionaria de Cuba" , lleno de principios revolucionarios propios de una sociedad burguesa.
24. NO PARA ADQUIRIR MÁS TERRITORIOS SINO POR LA HUMANIDAD PROPAGANDA NORTEAMERICANA
25. Con la excusa de asegurar los intereses de los residentes estadounidenses en la isla, el gobierno estadounidense envió a La Habana el acorazado de segunda clase Maine . El viaje era más bien una maniobra intimidatoria y de provocación hacia España, que se mantenía firme en el rechazo de la propuesta de compra realizada por los Estados Unidos sobre Cuba y Puerto Rico. El 25 de enero de 1898, el Maine hacía su entrada en La Habana sin haber avisado previamente de su llegada, lo que era contrario a las prácticas diplomáticas tanto de la época como actuales. En correspondencia a este hecho, el gobierno español envió al crucero Vizcaya al puerto de Nueva York.
26. Sin embargo, a las 21:40 del 15 de febrero de 1898, una explosión ilumina el puerto de La Habana . El Maine había saltado por los aires. De los 355 tripulantes, murieron 254 hombres y 2 oficiales. El resto de la oficialidad disfrutaba, a esas horas, de un baile dado en su honor por las autoridades españolas. Sin esperar el resultado de una investigación, la prensa sensacionalista de William Randolph Hearst publicaba al día siguiente el siguiente titular: « El barco de guerra Maine partido por la mitad por un artefacto infernal secreto del enemigo ».