122 - EXPLORACIÓN CERVICAL INSPECCIÓN, PALPACIÓN, EXAMEN POR LA IMAGEN.pptx
1.at psicoterapias breves y psicoanálisis
1. 1. Análisis Transaccional, Psicoterapias breves y Psicoanálisis
Dr. Roberto Kertész et al.
Actas del XIIº Congreso de la Sociedad Interamericana de Psicología,
Montevideo, 1969
Desde la introducción del Psicoanálisis a comienzos del siglo, las técnicas de
tratamiento de las enfermedades mentales denominadas generalmente como
"Psicoterapia", sufrieron modificaciones tan diversas y profundas que tal vez
lo único remanente en común entre ellas, es el basarse en la comunicación
humana. De ahí la utilidad de la reciente aplicación por Ruesch, Bateson, Jackson,
Haley y otros, de modelos de la teoría de la información y la cibernética. A su
vez, los métodos grupales rompieron con el tradicional binomio médico - paciente,
ya que no solamente otros enfermos participan simultáneamente en el proceso, sino
que actúan también como, agentes curativos. Debemos mencionar también el aporte
de socioterapias, como la comunidad terapéutica y la terapia administrativa. Por
otra parte, dos corrientes tan paralelas o antagónicas como la "organicista" y la
“psicologicista", desde el advenimiento de los modernos psicofármacos parecen al
fin unir sus cauces, dando origen a métodos combinados.
Nuestras actividades profesionales privadas y hospitalarias nos ofrecieron pocas
oportunidades para la aplicación del psicoanálisis ortodoxo, cuyas indicaciones son
por cierto bastante limitadas por su duración y costos, optando por técnicas
individuales y grupales abreviadas, asociadas con psicodrogas, incluyendo
los alucinógenos. Estando abiertos a toda innovación, ninguna nos produjo mayor
interés y entusiasmo que el sistema de Psiquiatría individual y social desarrollado
por Eric Berne con el nombre de “Análisis Transaccional". Desde la sugerencia
por el Dr. Leopold Bellak de la lectura del libro de Berne "Games people play",
hasta el encuentro personal con este autor en 1968, en el IV Congreso
Internacional de Psicoterapia de Grupo en Viena, donde aclaramos muchos
puntos, nos hemos dedicado al estudio y práctica de sus ideas, con nuestros
colegas, alumnos y pacientes, siendo ésta nuestra primera comunicación al
respecto en un certamen científico.
Comenzaremos por esquematizar los puntos de contacto y las diferencias
fundamentales entre el psicoanálisis, las psicoterapias breves y el análisis
transaccional.
VARIABLES PSICOANÁLISIS PSICOTERAPIA
BREVE
ANÁLISIS
TRANSACCIONAL
1) Número de
pacientes
Individual y grupal Individual o grupal Individual o grupal
2) "Aquí y ahora" Pasado
Siempre
Variable Variable
3) Metas Análisis, Mecanismo
de Disolución de
resistencia, liquidar
transferencia
Defensa -
integración a la
Personalidad.
Resolución de
síntomas, de común
acuerdo.
Ruptura de Juegos.
Intimidad
4) Ubicación
espacial
Diván Cara a cara Cara a cara
5) Duración Prolongada Breve Variable
6) Estudio de la
transferencia
Si En general, no No
7) Psicodrogas No Si Si
8) Intervención No Si Si
2. sobre el grupo
primario
9) Intervención
sobre emergencias
Nula Siempre Siempre
10) Instrumento (s) Interpretación Interpretación,
consejo, etc.
Análisis:
estructural
transaccional, de la
regresión,
argumental
11) Tipo de
transacción
Análisis estructural,
transaccional,
cruzada tipo I
Transacciones
complementarias.
Todas
C U A D R O 1
Introducción al Análisis Transaccional
El intercambio social tiene por objeto la satisfacción de las necesidades, básicas de
afecto y seguridad. En la práctica estas necesidades se articulan, mediante los
siguientes requerimientos:
1. DE ESTÍMULOS ("Caricias" o strokes): asegurar el trofismo por
estimulación del sistema nervioso, manteniendo la homeostasis y evitando la
privación afectiva.
Al contrario de lo que generalmente se cree, en los experimentos con animales
se comprobó que no se evidencian diferencias importantes en los resultados de
estimulación "positiva" (acariciar los animales) y ''negativa"(shocks
eléctricos).
Lo realmente dañoso fue la ausencia de estímulos, sea cual fuere su tipo.
En seres humanos, evidentemente el trato afectuoso o agresivo producirá
personalidades bastante dispares, pero lo realmente grave es la deprivación del
contacto, como lo prueban los trabajos de Bowlby y Spitz.
2. De RE - CONOCIMIENTO: la respuesta (feed - back) de los demás nos
asegura ser nosotros mismos, y distintos del resto de las personas. Proviene la des-
individuación propia de la psicosis (despersonalización).
3. DE ESTRUCTURAR EL TIEMPO: a través de tres tipos de programación:
3.1) Material: actúa sobre las cosas. La llamamos "procedimientos".
3.2) Individual: consigo mismo: fantasías, ensueños.
3.3) Social: con las personas: "transacciones".
Mediante los tres tipos de programación se evitan el aburrimiento, la
angustia y la depresión, las cuales surgen ante sus fracasos.
---- o ----
La unidad fundamental de acción en la programación social es la "caricia",
equivalente del estímulo. Es unidireccional, implicando la aceptación de la
existencia del otro ("tú"). Es el "input" afectivo; si se logra respuesta
(feed - back o realimentación) se hace bidireccional: relación inter -
personal, una "transacción". Las "caricias" pueden ser positivas (variantes
del amor) o negativas (variantes del odio). Repetimos que lo más
intolerable es la ausencia de "caricias" y se hace cualquier cosa por lo-
grarlas. Si no se aprendió a despertar afecto, se prefiere provocar com-
pasión o agresión antes de ser ignorado.
Las conductas de programación o estructuración del tiempo pueden clasificarse
como sigue, según Berne:
3. Clasificación de las Conductas de Programación del Tiempo
Programación interna
Arqueopsíquica (niño)
Fantasías, ensueños,
fugas, delusiones (ideas
delirantes) lapsus,
parapraxias, tics.
Programación de
probabilidades
Neopsíquica (adulto)
1.
Actividades (el “qué”)
Procedimientos (el
“cómo”), o técnicas del
manejo de la realidad
Programación social
Exteropsíquico (parental)
1)Rituales, ceremonias
2)Pasatiempos
3)Operaciones, maniobras
1.
4)Juegos:
a)Profesionales
(transacc. angulares)
b)Sociales (transacc.
duplex)
5)Intimidad social
El Análisis Estructural de la Personalidad
Desde un punto de vista estrictamente fenomenológico, consideramos tres
"Estados del Yo", que representan conductas reales y observables, lla-
mándolos el Niño, el Adulto y el Padre (o Parental). En cambio, los con-
ceptos psicoanalíticos del Superyó y Ello, constituyen abstracciones útiles, pero
no objetivables ni representables.
Personalidad:
1. Superyó: es una abstracción, representando lo que la sociedad a través de
las personas más significativas permite o prohíbe en la conducta.
2. Ello (Id): abstracción que simboliza el nivel inconsciente de la
personalidad, caracterizado por el proceso primario.
3. Estados del Yo:
3.1) Padre Parental o Exteropsíquico. Representa lo que los padres o
figuras sustitutivas significativas hicieron. Permite respuestas automáticas e
identificaciones. Transmite experiencias ajenas. Dos tipos de influencia: "haz
lo que yo hago", o "haz lo que yo digo", sobre el Niño o el Adulto.
3.2) Adulto: o Neopsíquico. — Es el estado del Yo activo cuando el
individuo siente, piensa y actúa en función de la información y situación real
y actual (juicio de realidad más conducta efectiva). Todas las personas
poseen un Adulto, incluso los niños, pero no todas son capaces de emplearlo
como corresponde.
3.3) Niño: o Arquipsíquico. — Representa el niño que cada individuo ha
sido, fundamentalmente en sus primeros años. En él reside la intuición, la creatividad y
la espontaneidad. Las situaciones traumáticas provocan fijaciones que son reactivadas
posteriormente, dando origen a conductas inadecuadas. El niño puede estar
"adaptado" (sometido), o bien "natural" (espontáneo, rebelde). Los psicóticos
poseen un Niño "confuso" por los mensajes dobles (double-bind); las personalidades
4. rígidas y puritanas, excluyen al niño.
Todo Análisis Transaccional comienza por el Análisis Estructural, dirigido
a los estados del Yo del individuo. Se le familiariza con la terminología y se
delimitan las características de su Padre, Adulto y Niño, relacionándolas con sus
síntomas y conflictos interpersonales. Entre las posibles evoluciones ulteriores del
Análisis Estructural se hallan las siguientes; Alta-Baja (abandono de la terapia);
Psicoanálisis ortodoxo (equivalente al análisis del Niño) - Psicoterapias breves o
de otro tipo - Análi sis Transaccional.
Algunos ejemplos aclararán mejor estos conceptos. Si en el paciente
predomina el Padre (influencias exteropsíquicas) probablemente se tratará
de un individuo muy puritano, de un neurótico depresivo, etc. Si predomina el
Adulto, una personalidad lógica (Ruesch), un "científico puro", matemáticos,
jugadores de ajedrez, personas frecuentemente inteligentes pero aburridas y
poco gratos como compañeros de diversión. Si predomina el Niño, tendremos
un artista, un bohemio, o bien una persona de acción (Ruesch);
patológicamente, un psicópata por falta o estimulación perversa del Padre, un
maníaco por rebelión contra el Padre o un psicótico si el Niño está "confuso" y
toma el control de la conducta.
Los distintos Estados del Yo, de acuerdo a sus cargas catéxicas, pueden tomar
el control de la conducta, sometiendo o excluyendo al resto. Esto nos conduce a
un intento de definición de la meta de la psicoterapia, que sería equivalente
a la de salud mental, o sea el dominio de técnicas adecuadas para obtener el
máximo de efecto y seguridad:
PSICOTERAPIA: tratamiento de las enfermedades emocionales, basado en
la comunicación humana terapéutica, tendiente a lograr un control Adulto, y no
Parental, sobre el Niño.
Debemos aclarar que los tres estados del Yo son necesarios para una personalidad sana y
armoniosa, pero que en la gran mayoría de los pacientes psiquiátricos el conflicto se halla
entre el Niño y el Padre. Esto responde a las modernas teorías interpersonales de las
enfermedades psíquicas.
El Análisis Transaccional
Será descripto en mayor detalle en la próxima comunicación. Sólo men-
cionaremos aquí el origen de este término y algunos aspectos comunes con el
psicoanálisis.
Por "transacción" se entienden dos significados:
a) la transacción, sea realimentación del mensaje; equivaldría a la
reacción frente a un estímulo.
b) Un sentido similar al comercial, por cuanto en toda transacción social
existe algún tipo de ventajas para ambos participantes, si bien éstas no siempre son
ganancias en un sentido positivo, y que algunas transacciones (juegos de tercer grado)
pueden terminar en muertes y todos los juegos patológicos producen sufrimientos para
alguien. Hasta el tipo más superficial de transacción, como el saludo ritual: "Hola"-“Hola"
presenta ventajas, ya que es un intercambio de caricias y mutuo reconocimiento. Estas
ventajas son cada vez más significativas al intensificarse las transacciones, hasta llegar a la
máxima gratificación, representada por la intimidad.
A. T. y Psicoanálisis
El A. T. se desarrolla a un nivel de abstracción más elevado que el psi-
coanálisis, que es abarcado por el primero como un tipo especial de transacción
terapéutica, desarrollado entre el Niño del paciente y el Padre (proyectivo) de éste sobre el
Padre del terapeuta. Este se analiza terapéutica y didácticamente para evitar que sea su
verdadero Padre el que responde al Niño del paciente, y lograr que sea su Adulto el que
lo haga siempre que le sea posible. Al comienzo de cualquier tratamiento, es necesario
efectuar un "contrato" entre los dos Adultos, el del paciente y el del terapeuta. Los as-
pectos terapéuticos serán descriptos en la tercera comunicación de este Simposio.
5. Psicofármacos y Análisis Transaccional
La combinación de psicodrogas con psicoterapia es muy reciente, discutida y no
posee aún un cuerpo coherente de doctrina ni técnicas adecuadamente regladas.
Desde un enfoque clínico empírico, clasificamos a los psicofármacos en:
1) Sintomáticos: disminuyen o suprimen los síntomas del paciente que
provocan sufrimiento y perturban la comunicación terapéutica: ansiedad, depresión,
hostilidad, alucinaciones, delirio, insomnio. etc. Su administración es prolongada en el
tiempo; de primera elección e indispensable en las psicosis, y de dudosa utilidad en la
mayor parte de las neurosis, excepto la de ansiedad y la forma depresiva. Son los
tranquilizantes, psicolépticos y los antidepresivos.
2) Abreactivos: en lugar de atenuar, exaltan la descarga emocional del
paciente, rompiendo temporalmente sus defensas y permitiendo una comunicación más
masiva y directa con el terapeuta. Se administran durante la sesión; su acción es
inmediata (por vía endovenosa) o muy rápido, por vía intramuscular u oral. Requieren un
cuidadoso estudio del enfermo, y adecuado entrenamiento del terapeuta. Comprenden los
barbitúricos por vía endovenosa (pentotal), las anfetaminas por la misma vía (weck-análisis) y
los alucinógenos o psicodislépticos (LSD, mescalina, psilocibina, sernyl, etc.).
3) Acción de las Psicodrogas en Psicoterapia y Estados de Yo
Psicolépticos
Sedantes en general
Tranquilizantes y antipsicóticos
Ej. Alcohol, barbitúricos.
Duermen al Padre y luego al
Adulto
Liberan al Niño
Psicoanalépticos
Estimulantes
Ej. Anfetaminas y
antidepresivos
Estimula al Niño
Psicodislépticos
Alucinógenos
Ej. LSD, mescalina.
Duermen al Padre y al Adulto
Liberan al Niño más arcaico.
El Análisis Transaccional se presta a su combinación con cualquier otro tipo de
tratamiento psiquiátrico, además de los psicofármacos: psicodrama,
musicoterapia, etc. Tiene también aplicaciones en la enseñanza y el campo
laboral.
A continuación nos referiremos al Análisis Transaccional en particular, y
posteriormente a nuestras experiencias personales con este método.
6. Psicofármacos y Análisis Transaccional
La combinación de psicodrogas con psicoterapia es muy reciente, discutida y no
posee aún un cuerpo coherente de doctrina ni técnicas adecuadamente regladas.
Desde un enfoque clínico empírico, clasificamos a los psicofármacos en:
1) Sintomáticos: disminuyen o suprimen los síntomas del paciente que
provocan sufrimiento y perturban la comunicación terapéutica: ansiedad, depresión,
hostilidad, alucinaciones, delirio, insomnio. etc. Su administración es prolongada en el
tiempo; de primera elección e indispensable en las psicosis, y de dudosa utilidad en la
mayor parte de las neurosis, excepto la de ansiedad y la forma depresiva. Son los
tranquilizantes, psicolépticos y los antidepresivos.
2) Abreactivos: en lugar de atenuar, exaltan la descarga emocional del
paciente, rompiendo temporalmente sus defensas y permitiendo una comunicación más
masiva y directa con el terapeuta. Se administran durante la sesión; su acción es
inmediata (por vía endovenosa) o muy rápido, por vía intramuscular u oral. Requieren un
cuidadoso estudio del enfermo, y adecuado entrenamiento del terapeuta. Comprenden los
barbitúricos por vía endovenosa (pentotal), las anfetaminas por la misma vía (weck-análisis) y
los alucinógenos o psicodislépticos (LSD, mescalina, psilocibina, sernyl, etc.).
3) Acción de las Psicodrogas en Psicoterapia y Estados de Yo
Psicolépticos
Sedantes en general
Tranquilizantes y antipsicóticos
Ej. Alcohol, barbitúricos.
Duermen al Padre y luego al
Adulto
Liberan al Niño
Psicoanalépticos
Estimulantes
Ej. Anfetaminas y
antidepresivos
Estimula al Niño
Psicodislépticos
Alucinógenos
Ej. LSD, mescalina.
Duermen al Padre y al Adulto
Liberan al Niño más arcaico.
El Análisis Transaccional se presta a su combinación con cualquier otro tipo de
tratamiento psiquiátrico, además de los psicofármacos: psicodrama,
musicoterapia, etc. Tiene también aplicaciones en la enseñanza y el campo
laboral.
A continuación nos referiremos al Análisis Transaccional en particular, y
posteriormente a nuestras experiencias personales con este método.