2. UNA ENCRUCIJADA EXISTENCIAL: EL AMOR
El amor desde una óptica
humanística, ética, moral y
cristiana debe ser entendido
como la capacidad de ser
felices y hacer felices a los
demás.
3. Puntos de vista del Amor
El amor desde un punto de vista ético es un
compromiso entre dos personas.
El amor desde un punto de vista religioso, es la
unión de dos personas bajo la gracia y voluntad de
dios.
El amor es la expresión de los propios valores, la
mayor recompensa que podemos ganar por las
cualidades morales que hemos cultivado”
4. MATICES DE LA CONVIVENCIA
Podemos encontrarnos con
personas que actúan dentro
de una normalidad social, y
que en un momento dado,
por distintas razones, ven
alterados ciertos rasgos de su
carácter que pueden
desembocar en conductas
agresivas y criminales.
5. Una de las lesiones convivenciales más conocidas
se derivan de una libertad mal entendida. Lleva a
creer que podemos expresarnos, o actuar como nos
plazca.
La delicadeza y el buen gusto tienen que presidir
nuestros actos.
Ante las disputas lo ideal es pensar que ninguno
estamos en posesión de la verdad absoluta.
6. Una persona se forma
mediante la cantidad y calidad
de las relaciones sociales que
haya tenido en su medio y es
probable que obtenga un
mejor desarrollo cuando
establece relaciones
amistosas, coopera y colabora
con los grupos y personas en
que convive.
7. Generalmente los fracasos en
las relaciones humanas
constituyen la razón principal de
la perdida de la salud mental, es
por eso que es tan importante
aprender a convivir en armonía
con el mundo y con la sociedad
que nos rodea.
Es de ahí de donde debemos
aprender el amor a nosotros,
que incluye al yo y a los otros.
8. Las personas comúnmente
recurrimos a ofender cuando
OFENSAS Y DESAGRAVIOS alguien nos desagrada ya sea
por su manera de pensar o por
que simplemente nos ocurre
algo químico que no nos
permite acercarnos a ellos,
solemos descalificar o minimizar
al otro, sin darnos el tiempo de
analizar nuestra palabras.
9. Por fortuna, pase lo que pase,
en el mundo de las relaciones
humanas civilizadas tenemos
una palabra, breve, directa y
contundente: “Perdón”.
“Si perdonas, olvídalo; si te
perdonan, nunca lo olvides”.
Porque el egoísmo, la envidia,
las rencillas, la soberbia, el juicio
sobre la conducta ajena, va en
contra del perdón.
10. El efecto del acto de
petición de perdón en
nosotros mismos y en los
demás es sumamente
beneficioso y conlleva muchas
implicaciones.
No es un acto de
humillación.
Realza la dignidad de la
persona.
11. Es una condición formidable
que nos vincula a Dios Padre,
para los que tenemos fe, y a
nuestros semejantes.
Si ofendemos a alguien en
la convivencia y presentamos
nuestras disculpas, tenemos
que saber que hemos de
cambiar.
12. El camino para aprender a amar es
"Perdonando", quien desea crecer en el
amor lo logra amando en el perdón.
Hoy perdonaré para siempre y arrojaré de
mi alma todos aquellos rencores que me
envilecen y me atan al pasado, hoy estoy
dispuesto a olvidar, hoy me demostraré a
mí mismo mi capacidad de amar.