Este documento resume la historia de Al-Ándalus y los reinos cristianos peninsulares durante la Edad Media. Describe la conquista musulmana de la Península Ibérica en el siglo VIII, el establecimiento del emirato y califato de Córdoba, y la posterior fragmentación en reinos de taifas. Asimismo, explica el surgimiento de los pequeños reinos cristianos del norte y su progresiva reconquista de territorios hacia el sur, a lo largo de tres etapas clave, hasta la caída
Tema 19. Inmunología y el sistema inmunitario 2024
Bloque 3. La Edad Media tres culturas y un mapa política en constante cambio (711 1474)
1. Bloque 3. La Edad Media Tres
culturas y un mapa política en
constante cambio (711-1474)
2. 1.AL ANDALUS
1.1 La conquista musulmana de la Península Ibérica
Los musulmanes (seguidores del Islam (Sumisión)), la doctrina religiosa predicada en la península
arábiga por el profeta Mahoma en el s. VII, se había expandido con gran facilidad por el norte de
África.
En el 711, aprovechando la crisis de la España visigoda por la lucha por el poder monárquico,
cruzaron el estrecho de Gibraltar (Tarik-Tarifa).
Dirigidos por Tarik, derrotan a los visigodos de Don Rodrigo, último rey godo, en la batalla de
Guadalete en 711, continuando con su avance por la península, subiendo hasta Toledo y más
tarde a Zaragoza, donde detienen su avance.
En apenas tres años se hicieron con el
control de la península sin encontrar
resistencia, parando su avance en la
región montañosa de las zonas cantábrica
y pirenaica, escapando su de control.
En algunas zonas los dirigentes locales
pactaron su rendición con los musulmanes
a cambio de conservar las propiedades y
la religión cristiana.
3. 1.2 Evolución política de Al-Andalus
Al frente del nuevo territorio conquistado para el Islam, Al Ándalus (tierra de vándalos), se colocó
un emir o gobernador, que actuaba como delegado del califato de Damasco, donde gobernaban la
dinastía de los Omeyas.
Los musulmanes serán detenidos por los francos en el 732 en la batalla de Poitiers, en su avance
hacia el norte.
A esta primera etapa se le denomina Emirato
dependiente de Damasco por ser Hispania una
provincia más del imperio islámico dirigido desde
Siria.
Pero a mediados del s VIII, la familia Omeya fue
víctima de la revolución Abasí, siendo asesinados
todos sus miembros, a excepción de Abd-Al-
Rahman I (756-788), quien se refugió en la
península y se proclamó emir.
Se inicia así el llamado Emirato independiente al
romper el contacto político con los califas abasíes que se habían establecido en Bagdad
5. El emirato independiente tenía como capital a la ciudad de Córdoba, y duró desde
mediados del s VIII hasta comienzos del s X, consolidando el poder musulmán en la
península.
Pero los conflictos internos entre los musulmanes, permitieron a los cristianos del norte,
iniciar un descenso hacia el sur y ocupar las llanuras del rio Duero.
En el 929 Abd-Al-Rahman III se
proclama califa (máxima autoridad en
lo político y en lo religioso, el emir solo
tenía poder político) rompiendo así la
dependencia con Bagdad.
Se inicia el Califato de Córdoba, la
etapa de mayor esplendor de los
musulmanes en España.
Con Al-Hakam II (961-976) se abre una
etapa de paz con los cristianos del
norte.
Hisham II (976-1013) delegará el poder,
a su hachid (especie de primer ministro), Al-Mansur, quien iniciará una serie de “razzias”
contra los pueblos cristianos.
Con su muerte en 1002, tras la derrota de Calatañazor, se inician una guerra civil que
6. terminara con la desaparición del califato de Córdoba en el 1031, dando lugar a la
aparición de multitud de pequeños estados independientes conocidos como los Reinos
de Taifas, reinos débiles que tuvieron que recurrir en muchas ocasiones a buscar el
apoyo de los reinos cristianos.
7. La toma de Toledo en 1085 por las tropas del rey castellano Alfonso VI, supuso una
gran conmoción en el Islam hispano y pidieron auxilio al reino norteafricano de los
Almorávides, derrotando estos a Alfonso VI, acabaron con las taifas y unificaron
nuevamente el poder musulmán de la península, deteniendo el avance cristiano con las
victorias en las batallas de Sagrajas (1086) y de Uclés (1108).
Pero el integrismo almorávide, disgusto a
mozárabes, judíos y otras comunidades,
provocando la caída de estos, y de nuevo,
fragmentándose en unos nuevos reinos, los
llamados Segundos reinos de Taifas entre
1145 a 1172.
De nuevo hay una nueva incursión contra los
cristianos en la península, proveniente del norte
de África, son los Almohades, quienes vuelven a
unificar Al-Ándalus y hacen frente a los cristianos
con la victoria de Alarcos (1195) contra Alfonso
VIII de Castilla.
8. Pero estos tampoco logran consolidar su poder y sufren una derrota aplastante a manos
de los reinos cristianos en la batalla de las Navas de Tolosa (1212), acabando con su
domino en la península y volviendo a aparecer unos breves reinos de taifas que serán
conquistados por los reinos cristianos.
La única taifa que logrará sobrevivir será la de Granada, gracias a la crisis que afectó a
la corona de Castilla, formándose el reino Nazarí de Granada, que se mantendrá
independiente hasta 1492, cuando los Reyes Católicos entren en la ciudad y pongan fin
a la Reconquista y a la presencia musulmana en la Península Ibérica.
9.
10. 2. LOS REINOS CRISTIANOS DE LA RECONQUISTA
2.1 Evolución política, proceso de reconquista y repoblación.
• En la batalla de Guadalete en el 711, los musulmanes dirigidos por Tarik, derrotaron a Don Rodrigo, el
último rey visigodo, logrando en apenas tres años, hacerse con el control de la Península sin encontrar
apenas resistencia (problemática entre godos y hispanorromanos).
• Solo las regiones de las zonas cantábricas y pirenaica escaparon a su control, y con el paso del tiempo,
estos núcleos cristianos fueron ganándole terreno a el Al-Ándalus, extendiendo sus fronteras hacia el
sur peninsular, a lo largo de un proceso discontinuo, aprovechando los momentos de debilidad de los
musulmanes.
11. A este proceso de expansión territorial de los reinos cristianos peninsulares se le ha llamado Reconquista, la
cual careció de uniformidad, puesto que se sucedieron épocas en las que los reinos cristianos pagaban
parias (tributos que se pagaban reconociendo así la superioridad del contrincante), se reconocían como
vasallos de los emires o califas, o incluso se aliaban con reinos de taifas para combatir entre sí.
En determinados momentos algunos reyes cristianos llegaron a unirse en coaliciones de carácter religioso,
las cruzadas contra el infiel, aunque no tardaron en aparecer divisiones entre estos, provocadas por sus
propios intereses.
- Distinguimos 3 etapas:
Siglos VIII-IX: Inferioridad de los reinos cristianos.
El primer reino que surgió en la cordillera cantábrica fue el de Asturias entre 718 y 722, cuando un caudillo
local llamado Pelayo, inició una revuelta que derrotó a los musulmanes en Covadonga.
12. Los sucesores de Pelayo consolidaron el reino astur y
durante el reinado de Alfonso II (791-842), trasladaron
la corte a Oviedo, establecieron relaciones con
Carlomagno, rey de los francos y emperador de
Occidente, restablecieron la legislación visigoda
(Fuero Juzgo) y organizaron la Iglesia católica (fortalecida
por el supuesto descubrimiento de la tumba del apóstol
Santiago en Compostela).
Junto al reino de Asturias, apareció en el Pirineo
occidental el reino de Pamplona y en el Pirineo central
se formaron a comienzos del s. IX tres condados, el de
Aragón, el de Sobrarbe y el de Ribagorza. En la zona
del Pirineo oriental, se formó la llamada
Marca Hispánica, formada por varios condados,
siendo el más importante el de Barcelona.
Durante esta primera etapa desde el s. VIII a mediados del s. XI, se produce el nacimiento y consolidación de
los reinos cristianos, que sufren las aceifas (razzias) con Abd al Rahman III y Almanzor, viéndose obligados a
pagar y a declararse vasallos del poder islámico de Córdoba.
Hasta el s. XI la repoblación de los territorios fronterizos fue espontánea y la ocupación de la tierra se
denominaba presura o aprisio, una fórmula jurídica que concedía la propiedad de la tierra al que la ocupaba
durante cierto tiempo y cultivaba una parte de la misma.
13. Siglos XI-XII: Avances en el valle del Tajo y Ebro.
En esta etapa la expansión de los reinos cristianos se produce gracias a la destrucción del califato de Córdoba
(1031) y la formación de los débiles reinos de Taifas, siendo estos ahora, los que paguen parias a los reinos
cristianos, que experimentarán un importante crecimiento económico y demográfico.
Los reinos cristianos realizaron grandes avances a costa de Al-Ándalus, aunque a finales del s. XI la situación
se equilibró debido a la invasión almorávide de gran parte de la península.
Durante este periodo, Alfonso VI, rey del nuevo reino cristiano de Castilla-León conquistó Toledo en el 1085
y controló junto con otro nuevo reino, el de Portugal, el valle del Tajo.
El reino de Aragón (unido al reino de Navarra) conquistó Zaragoza (1118) y controló el valle del Ebro. Más
tarde Navarra se separó y quedaría como un pequeño reino y Aragón se aliaría con el condado de Barcelona
(1137).
14. Una nueva invasión, la de los almohades, detendrá en el s. XIII la expansión de los reinos cristianos
restableciendo el equilibrio en la península durante algún tiempo.
Siglo XII-XIII: Hegemonía de los reinos cristianos.
Entre los s. XII y XIII, la expansión de los reinos cristianos
atravesó por 2 fases separadas por la batalla de Navas de
Tolosa (1212).
Hasta 1212, los avances cristianos fueron escasos debido a
la amenaza almohade, a la división de Castilla-León tras la
muerte de Alfonso VII (1157) y al proceso de consolidación
interna de los nuevos reinos (Portugal y Aragón). Esta etapa
es la conocida como la de los cinco reinos (Portugal, León,
Castilla, Navarra y Aragón).
Tras la derrota de los almohades en la batalla de las Navas
de Tolosa en 1212, ante el rey castellano Alfonso VIII y sus
aliados de las coronas de Navarra y Aragón, el territorio
musulmán fue invadido por los cristianos.
La única taifa que logró sobrevivir fue la de Granada, que formada por las actuales provincias de Granada,
Almería y Málaga, y que subsiste gracias a la crisis interna que sufrió en el s. XIV a la corona de Castilla.
El último reino musulmán peninsular, el reino Nazarí de Granada, se mantendrá independiente hasta 1492,
cuando el 2 de enero los Reyes Católicos entren en Granada y se ponga fin al dominio musulmán en la
península.
15. A partir del siglo XI, en lo referente a la repoblación de las tierras recién conquistadas, estas tenían
características diferentes a las repobladas anteriormente, ya que ahora contaban con numerosas población
musulmana y judía, realizándose el reparto de tierras con las siguientes formulas:
• Privilegios y Fueros: Su objetivo era atraer a nuevos colonos para que se establecieran en la zona,
mediante contratos que fijaban condiciones para el cultivo de la tierra, los derechos de una ciudad o villa, los
privilegios, libertades y exenciones de impuestos y militares a los colonos.
• Capitulaciones: Eran acuerdos con las poblaciones sometidas (musulmanes, judíos, mozárabes), a cambio
de respetar sus leyes, costumbres y parte de sus propiedades y libertad religiosa, imponiéndoles
contribuciones especiales.
• Repartimientos: Consistían en la distribución de bienes y tierras en lotes que efectuaba el monarca entre
los conquistadores.
16.
17. 2.2 El régimen señorial y la sociedad estamental
A comienzos de la Edad Media, la inseguridad con la vivían los habitantes de Europa, dio lugar a un
conjunto de relaciones personales que conocemos como feudalismo, una forma de organización social
impuesta por los más poderosos para regular las relaciones con sus vasallos y establecer vínculos de
dependencia.
El feudalismo originó la sociedad estamental, caracterizada por su jerarquización y privilegios, quedando así
dividida la sociedad en tres estamentos:
-Los que luchan, los nobles.
- Los que rezan, los clérigos.
-Los que trabajan, los campesinos, el tercer estado.
Los dos primeros estamentos (nobleza y clero), monopolizaban
el poder y disponían de privilegios, no pagaban impuestos y los
cobraban de los campesinos.
Al igual que en Europa, la sociedad quedó dividida en
Estamentos, jerarquizados y basados en la desigualdad de sus
Miembros, privilegiados y no privilegiados.
Era una sociedad agraria, que vivía en pequeños núcleos rurales, con diversidad étnica y religiosa, debido a
la presencia de minorías musulmanas, mudéjares y judías.
18. Como consecuencia de las relaciones de dependencia personal, aparece el régimen señorial, por lo que los
habitantes de un determinado territorio quedan ligados a su señor, pudiendo ser:
- Señorío de realengo, pertenece al rey.
-Señorío eclesiásticos, pertenecen a la Iglesia.
-Señorío solariego, cobrando rentas a sus habitantes por el uso de la tierra.
-Señorío jurisdiccional, los señores cobran impuestos, administran justicia.
2.3 El nacimiento de las Cortes.
La curia o consejo del rey se transformó en Cortes, cuando a los estamentos nobiliarios y eclesiásticos se
incorporaron los representantes del estamento popular, surgiendo por primera vez en ele reino de León en
1188, antes incluso que en otros lugares de Europa.
Existieron dos tipos de Cortes:
-Castilla: León y Castilla unieron sus asambleas en la 2ª mitad del s.XIV, formadas por tres estamentos y con
función principal fiscal.
-Aragón: Las Cortes de Aragón, Cataluña y Valencia se mantienen independientes entre sí. Poseían la
potestad legislativa.
19. 2.4 El Camino de Santiago
En el año 812, durante el reinado de Alfonso II de Asturias, se “descubren” los restos del apóstol Santiago,
y el rey Alfonso II manda la construcción de una pequeña iglesia sobre la tumba del apóstol.
Tras la peregrinación a Jerusalén y Roma, Santiago pasa a ser la tercera vía de peregrinación más
importante, facilitando así, la entrada de nuevas ideas culturales y religiosas (Románico).
En torno a él, surgen ciudades como Burgos o León, gracias a los fueros concedidos por monarcas navarros
y castellanos para atraer población.
De acuerdo con la tradición cristiana, el apóstol Santiago había predicado sus enseñanzas por la península
ibérica. A su regreso a Palestina, fue decapitado por el rey de Judea. Sus discípulos trasladaron su cuerpo
para enterrarlo en algún lugar de Galicia. En , un ermitaño llamado Pelayo, observa durante varias noches
una lluvia de estrellas sobre una colina. El apóstol le revelaba así el lugar en que estaba sepultado.